Astro rojo
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Astro rojo

Bienvenidos a la penumbra
 
ÍndicePortalBuscarÚltimas imágenesRegistrarseConectarse

 

 El amanecer

Ir abajo 
4 participantes
Ir a la página : 1, 2, 3, 4, 5  Siguiente
AutorMensaje
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeVie Feb 09, 2007 12:59 am

Aqui van las interpretaciones
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeVie Feb 09, 2007 9:57 pm

Lunes 16 de octubre de 2006

Cher Journal,

Aquí estoy un día más... Un año más vieja o apenas unos días, según como se mire... Y no sé que tendrán los 27 años, pero desde que empezaron no he parado ni un segundo... Sólo pasaron 3 días desde el viernes y sin embargo parece que los acontecimientos no quisieron detenerse ni un instante...
Estoy inmersa en una vorágine de acontecimientos... Muchas cosas en muy poco tiempo y me abruma, incluso en algunos momentos me supera, me alegra, me agobia, me encandila, me angustia.
Mi vida parece un discurso argumentativo... tesis, antítesis... A ver si soy capaz de hacer la síntesis porque lo necesito...Un especie de dicotomía vital, muy buenas cosas y muy malas.
Tal vez valga la pena empezar por las malas para quedarse con un buen sabor de boca.
Parece mentira que vaya a poner lo que voy a poner pero es que me entró la duda. Erick me dejó claro que puede que por la investigación la Iglesia nos eche abajo, nos rompan... acaben con su renombre y con mi nombre, aunque hoy intentara suavizarlo pero solo lo hizo para tranquilizarme... sobre todo teniendo en cuenta como es la opinión pública de este país.

Es un tanto difícil pensar que si no me hubiera encontrado con la clave mi vida seguiría siendo segura. Tan segura como presentar mi tesis en junio (ahora no dudo de que tendrá que ser en septiembre), solicitar la beca post-doctoral al ministerio para la UNAM y conseguir un puesto como profesora asociada. Investigar, dar clases presentarme a la cátedra cuando saliera... Fácil y sencillo porque no hay dudas de que me darían la postdoctoral... Vaya es que si no me la dan a mi es que no hay convocatoria, como me decía Casanueva. Aunque Erick hoy me dijo algo que me caló muy hondo y la verdad es que es un gran cumplido... que estaba por encima de un montón de números... que valía por lo que soy y no por mi frío promedio. La verdad es que ese tipo de cosas hace que aprecie a este hombre... Antepone la pasión y el compromiso. Hay muy poca gente que hace eso, demasiada poca. Con un director como Erick todo podría ser tan fácil...

Todo puede ser tan fácil y sin embargo de repente todo se complica... Si rompen con mi reputación como investigadora me voy a la mierda y todo ese futuro tan sencillo y seguro para mi hace apenas unas semanas se habrá derruido. Y todo por la clave... Dejarla de lado sería tan fácil, retomar la tesis en donde estaba y adiós a las dudas, a los problemas... Volvería a tener mi futuro de historiadora asegurado...saber que me podré dedicar a esto toda mi vida....

Pero ¿podría disfrutarlo? ¿Podría soportarme a mi misma por haberme traicionado? ¿Vivir sin saber que hay detrás de todo esto? Porque hasta ahora siempre pensé que la clave no encerraría mas que teorías alquimicas varias, novedosas interesantes, alguna nueva vertiente tal vez de la piedra filosofal ¡Eso ya sería la leche! Pero lo más probable es que sean simples y meros planteamientos filosóficos...alcanzar la inmortalidad a través del conocimiento porque nadie es inmortal; a todos nos llegará la hora como le habrá llegado a Fioraventi en su momento a pesar de su secreto... A veces me hago gracia a mi misma porque de repente me veo soñando con cosas inverosímiles, imaginándome que todo esto puede sobrepasar algo meramente mítico...sueños, sueños y más sueños... algo totalmente imposible.

Y aquí me estoy jugando mi futuro por los pensamientos afortunados o no de un tío que vivió hace cuatro siglos... Unos desvaríos de un viejo loco... Es muy fuerte decirlo pero es que ésta es mi situación.... Pero quiero saber lo que son...si realmente son desvaríos y de qué tipo son. No podría vivir con ese peso, esa frustración el resto de mi vida. Sabiendo que he tenido la mítica clave Fioraventi en mi mano y que por simple comodidad, por miedo la he dejado, huido... huir de mi misma, traicionarme. Me asusta lo que puede llegar a pasar, tener que abandonar la investigación histórica por unos hijos de puta con alzacuellos, porque es lo que son unos malditos..... Unos malditos cabrones asustados ¿Por qué?

Porque sinceramente me choca que en el siglo XXI lleguen los miembros de la Iglesia con planteamientos inquisitoriales... Sólo les falta recuperar la clave quemarla y de paso a mi y a Erick. ¡Cómo se puede ser tan poco ilustrado, tener tan poco sentido común! Me asombra, me alucina... No es más que una clave alquímica al fin y al cabo...

Que el mismísimo Vaticano con sus Santos varones quiera detener la investigación no hace más que picar más mi curiosidad. ¿Creen que está la clave de la vida eterna? Eso es técnicamente imposible!!! Sólo me queda la otra posibilidad y es que haya algo que puede (y me hace gracia poner esto porque parece de best seller barato) hacer que tiemblen los cimientos sobre los que se asienta la Iglesia.... Realmente esto último es lo único que se me ocurre... Y si se comportan de esta manera a estas alturas es que saben algo que nosotros no sabemos... porque sino no veo lógica a la intromisión del Vaticano...

Eso me reafirma en que no podría vivir si no siguiera con esto. No puedo ser una cobarde y plantarme... tengo que seguir adelante con esto, entender lo que hay detrás...aunque realmente no sé si voy por el camino adecuado.

Este fin de semana encontré una copia de los manuscritos del círculo en Atlatlahucán. Una copia de finales del XVII. Me puse a investigar la documentación de esa fecha y vi que muchos manuscritos habían desaparecido sin dejar ningún rastro. Y lo mismo pasa en San Miguel...durante 30 años de 1694 en adelante hay un lento goteo de misteriosas desapariciones documentales. Encontré un listado de abades de los monasterios del valle... y así determiné el año 1694 como inicio exacto de la fuga de documentos. 7 abades dimitieron en ese año, y por lo que pude averiguar hoy en el archivo de la inquisición, esos abades mas que dimitir fueron echados. Lo chocante es que estos siete hombres desaparecieron justo después de “dimitir”. La Inquisición no logró saber de ellos y a pesar de todo los declararon herejes por llevar a cabo al parecer rituales satánicos. Lo mas fácil es relacionar la desaparición de los documentos con la de estos hombres. Pero desde ya me parece que va a ser difícil seguirles el rastro. Si la inquisición, la STASI del s. XVII, no consiguió hacerlo en su momento, va a ser algo bastante difícil...pero hasta que la última pista esté agotada no quiero rendirme. Por lo que pude averiguar estos 7 abades eran todos discípulos de un octavo, el abad de Cuernavaca. Empezaré buscando por ahí como le dije a Erick hoy.

Es un gran hombre, la verdad es que nunca había imaginado a un director de tesis como él. Es un hombre apasionado, hoy nos tiramos no sé cuanto tiempo hablando de conceptos históricos, de la ensoñación del historiador, de la curiosidad por imaginarse que sería de la vida de la gente que está tras los documentos... Y a eso hay que añadir que sus conocimientos son impresionantes, su elocuencia es admirable... A veces tengo la sensación de quedarme embobada cuando lo escucho explicándome algo... es simplemente impresionante, la reostia.
Sabía de su fama, su conferencia me había encantado en Barcelona pero nunca pensé que detrás de semejante investigador hubiera una gran persona también. (y francamente escuchar a la mediocre de Historia de la música criticar sus planteamientos respeto a la prensa, hoy ya ha convertido a esa frustada en una inútil a mis ojos per secula sularum) Porque se está jugando su puesto, su posición de hombre que ya no tiene que demostrar nada a nadie, su prestigio, su fama, por esta investigación.

Le sería muy fácil decirme que me quedo sola, que me las arregle, dejarme en la estacada con todo el marrón encima, pero no lo hace a pesar de no tener tiempo siquiera de poder investigar nada, perdido como está en medio de toda la burocracia.

Y voy yo y todavía no sé por qué ayudé a ese periodista. Vale que no me cayó mal del todo, que me hizo mucha gracia ver como se emocionaba al darse cuenta de que era “Laura, la cantautora”, la del Medulio... que comparte algo que para mi siempre quedará como una parte importante de mi vida, Compostela...
Pero de ahí a hacerme pasar por la hermana Clarisa, cuidadora del próximo enviado vaticano a México, monja francesa que participó en una misión en Guinea Ecuatorial!!! Una locura!!! Nunca pensé que tuviera que hacer nada así en mi vida... y preferí no decirle nada a Erick, indignarme... Porque lo peor es que por encima me echan la culpa a mi. Héctor me llamó para agradecerme el gesto, pero la verdad es que es alucinante que esos cabrones con sotana piensen que fui yo!

Tienen la mente bien retorcida porque si bien ayudé a Héctor para salvarle el cuello, nunca, jamás de la vida se me hubiera ocurrido hacer algo así. Y tienen la puta desfachatez de acusarme, de vincularme al caso...porque la reflexión del abad de San Miguel en el periódico fue a mala leche... ¡Cuanta mala ostia, mala follá, como dicen los andaluces, tienen esos hombres de fe! Un buen revolcón (si es que ya no se lo dan) les vendría taaaaan bien.

Y ahora a ver las consecuencias de todo esto... Hoy Pereda tuvo uno de “sus momentos” sacando a relucir el periódico al principio de la clase...si pensaba que me iba a avergonzar se equivocó. Pero su puta sonrisa y tono cínico me pone nerviosa. Mientras las consecuencias solo sean esto no pasa nada.... Como decía Erick hoy a ver cuantos idiotas se tragan estas sandeces...

Pero todo esto...todo lo negativo, toda esta locura tiene una gran compensación... Se llama Mauricio Altamira. Es tan, tan.. genial. Su regalo de cumpleaños fue maravilloso, simplemente alucinante. Por fin pude volver a pisar un escenario y fue simplemente fabuloso. Ese regalo vale más que todo el oro del mundo junto y realmente me he dejado vencer. He bajado esa barrera protectora que quería poner para no hacerme daño... Lo amo, y eso, eso me llena tanto.

Sentir su apoyo diario, su ayuda para intentar sobrellevar todos los problemas que se han acumulado en bloque. Después de hablar con Erick, antes de la entrevista sentía que todo se estaba derrumbando a mi alrededor y el consiguió sosegarme, hacerme sonreir... Y por la noche igual después de ese sábado de locos. Por encima fui tan torpe como para tomarme a mal la canción que escribió. Después de hablar con el, de que me aguantara, serenara, me hiciera ver las cosas con mas entereza...lo miré y volví a sentir eso. Dicen que solo se ama una vez...y es una gran mentira, una enorme mentira.
Y es inevitable y sin quererlo me vuelvo a hacer ilusiones. No quiero hacérmelas porque no quiero volver a llevarme otro golpe... Pero es difícil que no me las haga.... Me veo tan bien con el que me gustaría que esto fuera así siempre.

Realmente soy consciente que la gente cambia, que la vida te puede llevar por caminos diferentes, que solo estamos iniciando esto, con apenas casi 3 meses de relación... pero quiero hacer lo que esté en mi mano para que las cosas sigan como están. Y ya he tomado la primera medida. Parece una tontería pero me va a permitir ir a los monasterios cualquier día de la semana o algún fin de semana y volver a D.F. Al fín y al cabo no voy a poder pedirle que se venga de ruta turística todos los fines de semana... Necesitaba un coche y ahora puedo comprármelo.

Me he dado cuenta, por cierto, que lo que gano aquí entre las dos becas es una barbaridad. Ya en España 2000 euros es un sueldo muy bueno, pero aquí es simplemente impresionante. Tomé verdadera consciencia de ello al ver la cara de incredulidad de Mauricio, el día que me compré el violín al contado y le dije lo que ganaba.

Y bien al fín hoy me he decidido y me lo he comprado... al final ni Ford K, ni mini (podria pagármelo pero me parece una burrada meter tanto dinero en una simple caja metálica con asientos y ruedas...No tenía ni idea de que pudiera valer tanto), al final me compré un renault Clio *1... además me gusta más dar mi dinero a los franceses que a los yankees de la Ford. Fue curioso, funcionó el anuncio que salía hoy en el periódico porque pensé en ir al concesionario...y al final el Clio me pareció simplemente perfecto. Lo compré en rojo metalizado...siempre me tiró el azul oscuro pero tenía que esperar un mes y tampoco era plan...así que me decidí. Realmente me tiene emocionada eso de tener coche propio... Es una chorrada pero me hace ilusión, y me va a venir muy bien para ir a los monasterios o para ir al conservatorio o la facultad si algún día no me apetece el metro... que al principio me da que van a ser bastantes días...
Y para mi relación con Mauricio, aparte de dejar de pedirle el coche, voy a poder liberar un poco los fines de semana.

Y como había predicho, dejar lo bueno para el final me deja un buen sabor de boca... Ya puedo ir a dormir, sentir su respiración acompasada en mi nuca y notar su abrazo adormilado posándose sobre mi inconscientemente, con más tranquilidad. Simplemente espero que los ánimos se calmen y que todo lo de la investigación no acabe desmadrándose...


_________________________________________________

*1 El amanecer Renault_Clio_RS-6
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Feb 11, 2007 10:50 pm

Héctor estaba haciendo esfuerzos ingentes por no quedarse dormido en el trabajo, hoy tenía un día de los más aburrido. Pero un inesperado e-mail le iba a reactivar.

“Vaya el redactor jefe me manda un correo ¿Qué querrá?”

Héctor lo abrió:

Buenos días Héctor, échale un vistazo al archivo que te adjunto, quizá te interese.

El amanecer Premionacionaldeperiodifn4

Sin más dilación, abrió el correo. Se quedó sorprendido, eran las bases del premio nacional de periodismo, con un premio de 50.000 pesos.

Héctor se levantó de la silla de un salto emitiendo ciertos gemiditos que podían recordar otros menesteres.

“Vaya pero si aún hay otro premio”. Héctor siguió leyendo, era una escultura del maestro Juan Soriano. “Juan Soriano pero ¿quién será ese tío?”

Las siguientes horas se las pasó pensando sobre que podía hacer el artículo. Al final un recuerdo un tanto vago pasó por su mente. Era una noticia de hacía un mes, Héctor se estaba empezando a acordar. Recordaba que en aquel momento le había parecido una noticia que se le podía seguir sacando jugo pero no se siguió con el tema. “¿Por qué?”

Se dirigió a la hemeroteca del Universal, que se encontraba en la primera planta, era una planta abierta al público para que pudieran buscar noticias de números anteriores, a veces venían investigadores a buscar ediciones antiguas del Universal.

Héctor fue pasando las filminas que contenían los periódicos del mes de Agosto hasta que dio con la que quería.

El párroco de Iztapalapa denuncia a la empresa Taxcorp por contratar a menores para la construcción del distribuidor vial Taxqueña. El gobierno de D.F. aseguró que se realizará “en el momento oportuno” una inspección de las condiciones laborales que prevalecen en las obras y en caso de encontrar irregularidades, las sanciones podrían llegar hasta la cancelación del contrato.

El secretario de Gobierno, Alejandro Ruiz, informó que será la Subsecretaría del Trabajo la que realice las inspecciones correspondientes.

También puntualizó el secretario de gobierno que “esta es una responsabilidad de las empresas que están contratadas para estos efectos, no es responsabilidad directa del gobierno, sino de quien contrata, pero sí tenemos facultad de investigación, de supervisión del asunto”, abundó.

Las dos etapas en las que se hará la inspección, de acuerdo con el secretario de Gobierno, corren a cargo de la Subsecretaría del Trabajo.

La primera consistiría en la inspección laboral, mientras que la segunda determinaría, en su caso, una sanción administrativa que tenga que ver con la contratación de la empresa para la finalización de las labores de construcción.

El funcionario capitalino aseguró que la revisión de las condiciones laborales deberán hacerse cuando llegue el momento debido a la enorme carga de trabajo que tiene la Subsecretaría de Trabajo.

En caso de que se viesen irregularidades, el secretario de Gobierno puntualizó que “puede haber sanciones desde el punto de vista laboral, de acuerdo con las atribuciones que tiene la inspección de trabajo y por supuesto que también puede haber sanciones administrativas, en caso de que veamos que alguna de las empresas contratadas hacen eso”.

Sin embargo los vecinos no se quejan de eso, sino de que las obras supuestamente dañan las casas aledañas, pero la empresa se niega a repararlas.

Así, a penas un par de semanas de que comenzasen las obras del distribuidor vial de Taxqueña, más de un centenar de vecinos de la delegación Iztapalapa exigen la reparación de sus inmuebles dañados a consecuencia de la edificación de esa obra.

Casas, departamentos y negocios registran cuarteaduras en techos, paredes y áreas comunes, en tanto que en algunos más las puertas y ventanas ya no sirven.
Además, de acuerdo con residentes de la Unidad Habitacional Taxqueña, ubicada en el número 5090 de dicha avenida, las obras afectaron la estructura de sus cuatro edificios, de modo que hoy “tiene una declinación de 16.5 centímetros”.

Pero aunque los daños ya fueron reportados hasta el momento ni el GDF, ni la empresa constructora Taxcorp. han ofrecido garantías de reparación.

Por eso los residentes advirtieron que no permitirán que se ponga en riesgo la seguridad de sus familias y de su patrimonio, “no es justo que vengan, hagan obras y digan sí, están en riesgo, pero es por falta de mantenimiento o por la antigüedad del inmueble ”, indicó Ana Castillo.

Y es que independientemente de que la Unidad tiene 40 años, las obras implicaron varias semanas de excavación profunda, así como introducción de 100 pilotes a presión, a escasos 9 metros.

“Cada golpe de la máquina era como un temblor, muchos nos salíamos por miedo de que esto se viniera abajo”, relató.

Además, hubo afectaciones incluso en inmuebles localizados a 200 metros de distancia de la construcción, como en el caso de los números 20 y 38 del Eje 3 Oriente, en el Barrio de San Antonio Culhuacán.

Aunque la vialidad está lejana, las ballenas y trabes de varias toneladas de peso se almacenaron enfrente de esas casas, causándoles daños .(Miguel Rubio)


“Vaya con que fue Rubio quien hizo este artículo, interesante”. Héctor empezó a planear que pasos daría. El primero sería hablar con Rubio, después se pasaría por las obras y el ayuntamiento para hablar con la persona responsable de la subsecretaría de trabajo. También pensó en preocuparse de los problemas de los vecinos. “Bueno lo primero es hacerme con una copia de este artículo.”
Volver arriba Ir abajo
Abdul Al Hazrad
Artífice del foro
Artífice del foro
Abdul Al Hazrad


Cantidad de envíos : 147
Edad : 43
Ubicación : Lanús
Ocupación : Playboy Multimillonario
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMar Feb 13, 2007 10:40 pm

Era miércoles. Nehuel tenía un dato que corroborar en la policía; Gordon Dominguez. El prontuario de ese mexicano era frondoso. Había estado detenido cuando aún era menor, por asaltos en la vía pública, y se lo implicó en varios delitos mayores, aunque siempre terminaba sobreseído. “Este hijo de puta está apadrinado” pensó Nehuel, sospechando de que álguien lo salvaba de ir a la carcel.

Se lo relaciona con un secuestro también, aunque cobraron el rescate y nunca liberaron al rehén. La policía logró rescatar a la víctima pero nunca encontraron el dinero. “Se la repartieron entre los policías y los chorros” dedujo Nehuel. También lo habían relacionado con el robo a dos bancos. Siempre quedaba en libertad. “Un verdadero hijo de puta” maldijo por dentro, indignado, Nehuel. Ese tipo de cosas era lo que lo sacaban de quicio, la corruptela, como la balanza de la justicía pesaba fajos de billetes para ver a quién beneficiaba. Y era ciega, ciega a la evidencia, ciega al dolor de las victimas de esos animales. Porque eran eso, animales. El daño que causaban, las familias que destrozaban; eso no era humano.

Nehuel imprimió el prontuario, así como una foto medianamente actual de Dominguez. Fue a verlo a Riviera, quería estar seguro de que ese era su hombre.

-Buenos días señor Riviera. Le tengo varias novedades.-

-Esperemos que sean buenas, ¿qué tiene?-

-Bueno, atrapamos a los ladrones de los autos que usa la banda que tiene a su esposa, y tengo a esta persona en mi lista.- Nehuel sacó la impresion del prontuario de Dominguez, así como su foto, y se lo entregó a Riviera. -¿Lo reconoce?-

-Sí, fue el que se sentó al lado mío, el que me golpeó con la culata y me dejo inconciente.-

-Bien, entonces estoy tras la pista correcta. La pregunta es, ¿qué hacemos? Porque si bien soy alguien entrenado para estas cosas, y soy un oficial de Interpol, sin darle parte a la policía, no hay mucho que pueda hacer. Sólo estoy yo contra esta gente, que parece estar apadrinada por alguien, ya que salen de la carcel como quieren.-

-No, no haga nada, no me importa, voy a pagar el rescate y voy a sacarlos de ahí, no quiero arriesgarme estupidamente.-

-Mire Riviera, este tipo ya secuestró antes. Pagaron el rescate, y el rehén no apareció. No crea que no lo entiendo. Mi esposa fue asesinada. Sé lo terrible que es tener a alguien tan amado en manos de unos hijos de puta.-

-Lo lamento- dijo al oir sobre su esposa -y yo no voy a dejar que eso pase si puedo evitarlo, y la única forma que tengo de hacer eso es pagar el rescate que ellos pidieron.-

-Riviera, hay otra forma. Yo no debería ni mencionárcelo, pero realmente entiendo la rabia y la impotencia que siente en estos momentos... Puede contratar mercenarios.-

-Hare lo que haga falta- dijo Gustavo, en sus ojos, Nehuel podía ver que ya había hecho uso de ese recurso o lo haría muy pronto.

-Yo puedo hacer la inteligencia, y hasta ir con ellos. Los hay de varios paises, por lo general ex fuerzas especiales. Los rusos abundan, con la caída de la Unión Soviética, los militares ofrecen sus habilidades al mejor postor. Lamentablemente, Interpol no movería un dedo hasta no investigar a fondo a esta gente, y la policía mexicana no parece fiable. Le repito, es una locura, pero no creo que esos hijos de puta respeten los terminos del acuerdo.-

-¿Qué quiere hacer? ¿Cuál es su idea? ¿Qué propone?-

-Mire, a esta gente hay que caerle con algo pesado. Yo sólo no voy a poder hacer nada, y las autoridades van a ser muy lentas. Lo primero que hay que saber es donde tienen a su mujer, y organizar el rescate. Con ella segura, váyase del pais, y piérdase en Argentina, no sé, en el sur o en la cordillera, algún lugar alejado. Yo puedo conseguirle el contacto de algún grupo mercenario. Había datos sobre ellos en varias investigaciones que se hicieron en la Argentina. El asesinato del hijo del ex presidente, sin ir más lejos. Habían dicho que fue un accidente en helicóptero, sin embargo las fotos periciales revelaron impactos de bala de alto calibre.-

-¿Y cómo piensa caerles sin poner a ella o al bebé en riesgo? No se olvide que esta embarazada.-

-Yo pertenecí al G.E.O.F. Cuando un grupo especial cae, se termina todo en menos de diez segundos. Cronometramos todas nuestras entradas, con y sin rehenes, todo queda controlado en segundos. Si ella logra sobrellevar el shock, debería estar bien. Las posibilidades de supervivencia del rehén en un ingreso bien planeado son casi absolutas.-

-Apretar un gatillo lleva menos de diez segundos.-

-No pueden apretar el gatillo, ese es el punto. No saben que vamos a entrar, y si la habitación donde está su esposa tiene una ventana, puedo asegurarle que la cabeza de quién la retiene va a explotar como una sandía antes de que entremos. Le pido que confíe, no habla con un aficionado.-

Riviera no asintió con al cabeza, pero sus ojos mostraban total decisión. -¿Cuánto?-

-Yo no le voy a cobrar un peso, lo hago porque lo entiendo, y porque sería un acto de justicia. Creo que estos grupos no deben cobrar menos de 25 mil dólares. Pero hablamos de profesionales entrenados.-

-¿Va a hacerlo grátis? ¿Quién es? ¿Papa Noel? Creí que tenía barba.-

-Mire, si no quiere que lo ayude, me dice y me voy.-

-No dije eso, pero me parece un poco increíble que me quiera ayudar tan desinteresadamente, más siendo un compatriota.-

-Arriesgué mi vida más de una vez desinteresadamente. Y si me encuentro a miles de kilometros de Argentina, es porque no entré en transas.-

-Bueno, discúlpeme, no quería ofenderlo. Pero bien sabe que usted es la excepción y no la regla.-

-Bien, entonces. Esta gente, ¿nunca le dió ninguna dirección? No tiene un celular de contacto con ellos?-

-No, ellos me contactan a mí, la primera vez al hotel y ahora a mi celular, todavía no volvieron a llamar, pero tengo que juntar el dinero para dentro de dos días.-

-Comprendo, ¿qué cifra le pidieron?-

-Dos millones de dólares.-

Nehuel asintió, estaba analizando todos los datos que Riviera le daba a la vez que charlaba. -¿Van a llevar a su esposa a la negociación? ¿Cuál es el punto de reunión?-

-No sé, no lo sé, no dijeron nada. Sólo cuánto querían, que lo juntara lo más rápido posible y que en unos días volverían a llamarme, no me importa el dinero, sólo mi esposa y mi hijo, creo que ellos no saben de su embarazo. Paragaria el doble si los mercenarios lo pidieran.-

-Bueno, yo voy a ir buscarlo a este Dominguez. No se preocupe, no voy a dejar que se escape o ponga en sobre aviso a los otros, y me va a tener que cantar la justa.-

-Esta bien, confío en usted, pero mientras tanto voy a hacer todo lo que ellos digan.-

-Bien, quédese tranquilo, va a tener a su esposa de vuelta.- Le garantizó Nehuel.

-Eso no lo dudo ¿y que hay con los hijos de puta que hicieron ésto?-

-Con los otros... voy a ubicarlos, y ver si están todos juntos o separados. Lo fundamental es saber dónde está su esposa.-

-No me refiero a eso, sino a que va a hacer con ellos.-

-Mire Riviera, si llegamos a necesitar de los mercenarios... no va a quedar nada de ellos. Si no llegamos a necesitarlos, usted se va a Argentina con su esposa y su hijo, y se olvida del tema.-

-Espero que sean necesarios entonces.-

-Lo entiendo. despreocúpese. Me voy yendo, voy a verlo a Dominguez. Necesito saber por donde se mueve y agarrarlo cuando esté solo.-

-Esta bien, confío en usted. Vaya, y si necesita dinero.-

-No se preocupe, se lo voy a hacer saber. A todo ésto, saque otro teléfono. No sabemos que tan segura es la línea que mantiene. Quizás esté pinchada, quizás por eso retuvieron el aparato. Apenas tenga el nuevo número, llámeme, si no, espere a que venga a verlo en persona.-

-Esta bien. Gracias.-

Nehuel salió y fue a dar sus clases, a los miembros de las fuerzas especiales de la policía. Al salir, cerca de las 16, fué al domicilio de Dominguez. Esperó tener suerte y escabulló en el estacionamiento que le pertenecía al edificio donde el criminal vivía. Esperó oculto, pacientemente. Tenía su arma y su chaleco antibalas, el abrigo que llevaba ocultaba ambas cosas.
Volver arriba Ir abajo
Abdul Al Hazrad
Artífice del foro
Artífice del foro
Abdul Al Hazrad


Cantidad de envíos : 147
Edad : 43
Ubicación : Lanús
Ocupación : Playboy Multimillonario
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMar Feb 13, 2007 10:40 pm

Cerca de las 18 horas, un Volkswagen Bora negro ingresó al lugar. Era conducido por Dominguez. Nehuel se acercó como si anda pasara, haciéndose pasar por alguien que acababa de aparcar su vehículo. Cuando estuvo a unos pocos metros, y tras mirar que nadie pudiera verlo, se abalanzó sobre Dominguez. Con una mano lo empujó contra el vehículo, con la otra, posó el cañón de su pistola en la nuca del hombre.

-Quieto y calladito.- Dijo nehuel mientras le esposaba las manos tras la espalda.

-Qué se supone que es ésto?- Dijo con una sornrisa en el rostro.

-Lo último que hagas si no te callás la boca.- Nehuel le sacó el celular y las llaves del auto. Abrió el baúl y lo forzó a meterse. Le sujetó las piernas con el cinturón que traía el mismo Dominguez y lo amordazó con su corbata. Lo desnudó por completo y cerró el baúl.

Nehuel llevó el auto hasta las afueras del D.F., en la ruta hacía las ruinas precomlombinas. En medio de la nada, se slaió de la ruta y se internó unos 500 metros a campo traviesa. Apagó las luces y el motro del auto, amparado por la noche, tenía a ese hijo de puta a su merced.

Era la primera vez que hacía algo ilegal. En su cabeza los pensamientos volaban, analizaba cda paso a seguir, que detalles tener en cuenta. Sacó a dominguez del baúl e hizo que se arrodillara ante él.

-Podrías haberme preguntado antes. Te hubiera dicho que no me gustan los de tu tipo, ni estas cosas raras.- dijo Dominguez, bromeando por las esposas, la mordaza y su desnudez.

-Mis preferencias sexuales son tu última preocupación en este momento. ¿En qué andás?-

-Yo, prefiero las mujeres, mientras más, mejor, y mis manos libres.-

-Y yo prefiero que me contestes, asi puedo dejar de ver esa broma que te tocó por pito.-

-Y si no, ¿qué? ¿Vas a disparar? Con una bala van a morir tres personas.-

-No, no tenía pensado eso. Prefiero descargar la batería de ese auto en tus huevos, hasta freírlos. Ésto es personal, y a mí ya me mataron lo unico que quería.-

-¿Tu novio? Estoy seguro que en el puerto puedes conseguir otro.-

La imagen de Valeria vino a la mente de Nehuel. Murió estrangulada, un hijo de puta la agarró mientras se bañaba y la ahorcó con un hilo de nylon. Recuerda su cadáver como si lo hubiera visto hace cinco minutos. Su cara estaba tan hinchada que se había deformado, complétamente moraba por la falta de ciculación, lo ojos casi se le habían salido de la presión. Nehuel perdió los estribos. Le pegó con la culata del arma en la boca, lleno de un terrible odio. Pudo ver como volaban algunos dientes de entre los labios de Dominguez, reventados por el golpe.

-No me molesta que me trates de puto, me molesta que me hagas perder el tiempo.- Dijo Nehuel.

Dominguez escupió un diente diente y un montón de sangre, y miró a Nehuel a los ojos, ya sin ese aire jocoso que tenia. -Te voy a hacer perder más que el tiempo.-

Nehuel estaba harto de las amenazas, harto de esa escoria que se hacían pasar por hombres. Por una vez en su vida, iba a ser justicia, como él la entendía. Ojo por ojo, diente por diente. Le dió otro golpe en los dientes con la culata del arma. La base de mental de la misma, terminó de roper las piezas dentarias frontales de Dominguez.

-No estás haciendo negocio, flaco. Respondeme de una vez.-

Dominguez, escupió con más furia, pero esta vez apuntó a la cara de Nehuel, llenandola de sangre y saliva. Nehuel no se inmutó, estaba demasiado furioso para hacerlo.

-Yo no tengo nada que perder, hagas lo que hagas, pierdes. ¿Qué piensas hacer, amenazarme?.-

Nehuel puso a calentar el encendedor del auto, cuando estuvo al rojo, lo presionó sobre el escroto de Dominguez, mientras con la otra mano lo tomaba de los pelos y le llevaba la cabeza hacia atrás, para sostenerlo.

-Yo no te amenazo, actúo. ¿Vas a hablar? La próxima va en el ojo. ¿Vés como de repente tenés cosas que perder?- Dijo volviendo a poner el encendedor a calentar. Los recuerdos de Valeria sacaban lo más oscuro de su alma. No iba a dejar en paz a ese hijo de puta. Su impunidad le recordaba al político que mató a su esposa.

Cuando Nehuel se acercó con el encendedor nuevamente, Dominguéz le dió un topetazo, tumbándolo. Pero estando atado de piés y manos, Nehuel lo redujo sin problemas. Lo dejó boca abajo y se sentó sobre él, mirando a sus piés. Dominguez se sacudía, intentando liberarse, pero nada podía hacer.

Nehuel estiró su pierna izquierda, y apoyó su pié en las ataduras que retenían las piernas de Dominguez, evitando que las flexione. Con la mano que tenia el arma, separó los glúteos del mexicano, y apoyó el encendedor en el ano del criminal, cerrando el orifcio por cauterización.

-Espero no hayas comido mucho, la próxima vez que quieras cagar, vas a tener que ver a un cirujano primero.- Dijo Nehuel, siniestramente. -¿Vas a hablar? Creo que no te dije que era médico, ¿no? Me conozco el cuerpo humano al detalle, y se de unos lugares muy dolorosos.-

El grito de dolor pudo escucharse a muchos, muchos, metros a la redonda, hasta perderse en el vacío.

-Aaaaah, aaaaaaah, aaaaaaah- Nehuel parodió el grito de dolor de Dominguez. -Ahora querés hablar ¿no? ¿Viste como nos hicimos amigos?-

El mexicano tardó algo en poder recuperarse del dolor para poder hablar, totalmente furioso.

-Contame lo que sepas Dominguez, tengo encendedor y orificios para rato.-

-¿De qué? Hijo de puta, ¿qué es lo que quieres saber?-

-¿Donde tienen a la esposa de Riviera?-

-¿Y de que te sirve saberlo? No vas a llegar antes de que la maten después de ésto.

-¡Pero no sabes como nos vamos a divertir juntos mientras tanto!- Exclamó sarcásticamente Nehuel. -Más te vale que hables si no querés que te selle el pito.-

-Si me matas, ellos se mueren, si no la cabeza va a ser la tuya.-

-Respuesta equivocada, hay que respetar las consignas, ¿no te enseñaron eso en la escuela?- Nehuel posó el encendedor en el orifcio de la oreja derecha de Dominguez, se oyó el siseo de la piel rostizándose. -Huele a cerdo asado, ¿no?- Con la mano que portaba el arma, apretó el rostro del secuestrador contra el suelo, para mantenerlo quieto, y para ahogar un poco el grito.

-Está en una casa en el sur del D.F., pero es inútil, no lograrás llegar, si te vas ahora quizá puedas volverte con las piernas sanas a tu país de mierda.-

-Lamentablemente no puedo creerte todavía.- Nehuel tomó por detrás el miembro del mexicano, cerrando su prepucio. Con el encendedor cauterizó la piel, que burbujeo unos segundos, ampollándose, hasta sellar su abertura en una sola costra de piel y sangre quemadas. -Como médico, te recomiendo que no te mées, digo, para que no te reviente la piel del pene. ¿En qué casa están?-

-Hijo de puta.- Dijo apretando los dientes. Las lágrimas le brotaban solas de los ojos, pero él se aferraba en aguantar, cuando superó el dolor, le dió la direccion.

-¿Cuánta gente trabaja con vos? Dame sus nombres.- Dijo, mientras volvía a calentar el encendedor, siempre atento a Dominguez y al entorno. Sacó su celular y lo puso a grabar, sin decirle nada al mexicano, que se había amanzado.

Nehuel tomó la llave en cruz del baúl. Sentía la ira coriendo por su cuerpo, su moral le dejo el paso libre a todo ese odio reprimido. El pobre infeliz de Dominguez se convirtió en el catalizador de la ira de Nehuel por la muerte de su esposa y su hijo nonato. El hombre le dió los números y los nombres, eran seis personas en total.

-¿Quién los protege? ¿Cómo hiciste para salir siempre sin problemas de las causas?- Preguntó, ahora nuevamente junto a Dominguez, con la llave en cruz en una mano y la pistola en la otra.

-Con la cabeza, usando a imbéciles para que se ensucien por nosotros.- Respondió el maltrecho Dominguez.

-Te voy a dar un breve curso de traumatología.- Nehuel comenzó a explicarle, -la médula espinal es muy frágil, capaz de lesionarse con un golpe puntual, para eso están las vértebras que la protegen, pero si algo pasa a entre ellas, seguramente va a dañar los cartílagos y finalmente, a la médula misma.-

-Si la lesión ocurre en la zona lumbar,- Nehuel apoyó la parte de la llave en cruz que se asemejaba a la cabeza de destornillador sobre la columna lumbar del mexicano, -el paciente queda parapléjico, perdiendo toda posibilidad de utilizar la parte inferior de su cuerpo. Ahora, si la lesión ocurre en la región cervical- Nehuel apoyó el agudo extremo de metal en la base del cuello del mexicano, -el paciente queda terapléjico, sin posibilidades de controlar la parte inferior o superior de su cuerpo.-

-Ahora, cuando te cruzas con un gran hijo de puta que puede elegir, te conviene cantar todo, sin omitir detalles, y no hacerte el pelotudo.- Nehuel apoyó con fuerza la llave en la nuca del mexicano, en la parte blanda que que hay entre las vértebras, lastimándole la piel y cargando el peso de su cuerpo, lentamente. -En tres segundos, el dolor de tus nervios comprimiéndose va a ser lo pero que sentiste en tu vida, y en diez, por el resto de tu vida sólo vas a poder mover la cara. Mas vale que me des todos los detalles de tu banda, contactos, armas, contraseñas.-

Dominguez se había quebrado y soltó todo lo que sabía, repitió la locación de la casa en donde mantenían cautiva a la muchacha, cómo se manejaban, todo. Llamaban desde la camioneta en movimiento, para que no pudieran rastrearlos, e iban a cambiar de vehículo la semana entrante, el auto estaba ya desaramado. A la camioneta que utilizaban le habían cambiado las matrículas y sabían que la esposa de Riviera estaba embarazada. Iban a pedir el doble de rescate por eso.

Nehuel llamó al hotel, y pidió por el número de habitación de Riviera. Nunca dió nombres, le dijo que era un viejo compañero de facultad, un código que había acordado con él, y le pidió que lo encontrara, le dió la altura aproximada de la ruta, y lo espero con Dominguez en cerrado en el baúl. Riviera llegó lo más rapido posible.

-Acá tiene a uno.- Le dijo a Riviera, mientras sacaba a Dominguez, maltrecho y desnudo, del baúl. Lo tumbó en el piso.
-Ya cantó todo.- Dijo Nehuel y se alejó del lugar dándole la espalda a la pareja.

Nehuel pudo oir los alaridos de dolor de Dominguez, y permaneció sin inmutarse, mirando el cielo nocturno. A lo que ocurría detrás de él, lo entendía como justicia. Para las víctimas había muerte y dolor y para esos hijos de puta, códigos y burocracia. No esa noche. Esa noche se les pagaba con la misma moneda.

-Excelente. ¿Cuál es el próximo paso?- Preguntó Riviera, minutos después de que los gritos cesaran.

-Enterrar el cuerpo.- Respondió Nehuel, metódico. Ambos hombres enterraron el cuerpo unos cien metros desierto adentro. Estaba a más de medio kilómetro de la ruta, en medio de la nada. Tardarían en encontrarlo, y si lo hacían el cuerpo estaba tan maltratado que tardarían semanas en identificarlo, sin rostro, sin dientes, sin huellas digitales.

Nehuel limpió las huellas que habían en el auto, y se guardó todas las poseciones de Dominguez, excepto por la ropa, la cual prendió fuego en un basurero a cielo abierto a medio camino. Cuando sólo quedaron cenizas, volvió con Riviera a la ciudad, y dejaron en auto en los lindes de un barrio marginal, sin alarma y sin trabas. Nehuel se llevó las matrículas del auto, para dificultar su identificación, y tras doblarlas al medio, las tiró en una boca de tormenta, a varias cuadras del lugar.

Volvió a su hogar, se duchó y se acostó.


Última edición por el Mar Mar 06, 2007 8:11 pm, editado 1 vez
Volver arriba Ir abajo
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Feb 18, 2007 2:01 am

Al fin había llegado el viernes, la semana se había desarrollado sin demasiados sobresaltos entre el conservatorio, la facultad y una visita a los monasterios que le había permitido a Laura estrenar su nuevo y flamante coche.
La chica había pensado en ese día durante toda la semana tratando de repasar el repertorio que tocaría. No quería ser demasiada repetitiva y aunque algunos temas serían fijos quería que ante todo hubiera variedad.

Héctor cogió el reloj“Vaya ya son las 21h30”¡ANTÍA VÁMONOS! Que ya es tarde – dijo mientras se dirigía en donde estaba la mujer arreglándose. - Ya voy – dijo una voz femenina, con cierto hastío tras la puerta del baño.

A Héctor le molestaba el tono de voz de Antía “ya voy, ya voy” pensó rezongando por lo bajo - ¿CÓMO QUE YA VOY? Sal ya del baño mujer. ¡Siempre esperando por ti!-

De repente la puerta del baño se abrió de un portazo. Antía salió de ahí hecha una furia – Ya está bien, impaciente. Qué quieres que vaya hecha un trapo!

Héctor se quedó mudo, realmente estaba muy guapa. – eh... mmm... eh... vale, vale, te espero en el salón viendo la téle
Al cabo de diez minutos Antía apareció en el salón. Se acercó sigilosamente por detrás del sofá y abrazó a Héctor dándole un beso en el cuello. Héctor le correspondió con un – Te quiero-

Antía le sonrió complacida por las palabras del chico – Voy a llamar un taxi

- No, No que va...Entre que llega el taxi y todo, nunca llegaremos a tiempo, vámonos en moto.-

Antía refunfuñó por lo bajo pero sabía que Héctor tenía razón – Vale por esta vez pero no más, la vuelta la hago en taxi
Héctor negó y dijo algo ininteligible escuchando aquello.

Al cabo de media hora llegaron al local. “Vaya nombre más ortera” pensó Héctor mientras veía el cartel de Blowin’ in the wind. Tras pagar la entrada pasaron a dentro.

- Vaya, pues sí que está lleno el local para no ser nada conocida la chiquita esta – dijo Antía. El local presentaba unos tres cuartos de aforo completo.

- Vamos para adelante que esto va a empezar – dijo Héctor mientras se abría paso hasta llegar a las primeras filas seguido por Antía que se había agarrado a su jersey.

La hora del concierto había llegado, repitiendo sus habituales rituales y pequeñas supersticiones Laura salió al escenario. Sonrío levemente, le encantaba sentir el calor de los focos sobre su cara. Su corazón latía a mayor velocidad por la excitación del momento. Podía explayarse, liberarse, contar y cantar lo que le apetecía. Saludó brevemente a los presentes pudiendo observar que el local estaba más lleno que la anterior vez. Las figuras simplemente se intuían.

Con voz suave y clara, Laura empezó a cantar, dejándose llevar a aquella otra realidad menos caótica que el mundo en el que solía desenvolverse. Las notas y los compases se fueron sucediendo...

- Para esta canción, contaré con la colaboración de Mauricio – No quería explayarse en público sobre la relación que le unían aunque no pudo evitar sonreír cálidamente.

El chico subió al escenario con su guitarra, seguido por el aplauso de los presentes.

Tras un breve saludo, unas leves notas *1 surgieron de la guitarra de Laura secundada a continuación por la de Mauricio. Habían decidido tocar la canción que él había escrito el fin de semana anterior. La canción que había provocado su primera discusión pero que sobre todo había permitido a Laura liberarse de la barrera defensiva que se había impuesto después de su anterior relación. Habían trabajado uniendo las voces de ambos y repartiéndose la canción... Aunque podía sonar a despropósito para quien conociera Laura, la chica estaba diciendo en aquel momento: - Los libros sólo son papel

- Gracias – dijeron ambos – tras el aplauso. Uno y otro se miraron y sonrieron. Mauricio la observó con cierta complicidad y dijo en bajo - ¿La hacemos?

Laura asintió con una leve sonrisa en los labios. Parecía que Mauricio en principio un tanto reacio a la idea se había animado y estaba disfrutando de aquel momento.
Laura tomó el pedal metálico para ponerse en la característica postura de guitarra clásica siendo imitada por Mauricio.

Los dos empezaron a tocar *2, las notas se compenetraban, en un ir y venir de rápidos acordes que se entremezclaban como en un suspiro acompasado y definido. Laura cerró los ojos, esbozándose una sonrisa cálida en sus labios en una expresión que combinaba plenitud y placer.
El juego continuaba y susurraba complicidad a los presentes. El ir y venir de las notas fue cada vez más fluido y natural variando la rítmica y arrastrando a ambos protagonistas por su viaje que en algunos momentos llegaba a entonarse con cierta contundencia. El momento era de los dos y para los dos, semejara que se habían aislado del mundo exterior en una unión armónica. La caricia a las cuerdas era tenue, el rasgueo dulce, los punteados se combinaban con perfección acabando aquel canto a la transitoriedad en un aliento de regocijo.

El concierto había acabado, le había gustado tanto a Héctor como a Antía salvo aquella canción que había cantado con el tal Mauricio “ vaya canción más ñoña y ¿esa frase?...los libros sólo son papel, que raro viniendo de una rata de biblioteca como Laura”. Ambos se sentaron en una mesa.

-A ver si sale pronto. Oye Antía ¿qué te parece si llamó a Cristóbal el crítico musical que escribe en el periódico para que venga a ver a Laura, crees que le pueda gustar?

-Si, yo estaba pensado en la misma cosa, aunque se me ocurrió que tal vez no fuera buena idea.
Héctor se quedó sorprendido ante la respuesta de su novia, a él le había gustado bastante, "mmmm... ¿estará celosa?"
-y porque no?-

-Bueno, no se, se me ocurrió que quizás pudiera verse mal tras aquel artículo de los monasterios.

Héctor frunció el ceño, "está celosa, que divertido, creo que la voy celar más que morbo".

-¿No crees que se vería mal si un día se publica una nota sobre ella como historiadora y a la otra semana una critica musical?- Antía miró a Héctor pero sin esperar respuesta. Había sido un comentario nada más. –Acabo de recordar que mañana por la tarde tengo que ir a hacerme una ecografía, vendrás ¿no, amor?

-Claro que iré a lo de la eco, quiero ver a nuestro hijo- le dijo mientras le daba un beso - En cuanto a lo de Laura, no creo que sea problema, además eso puede empujar su carrera musical, claro está si a Cristóbal le gusta-

Laura bajó del escenario y fue junto a Mauricio con una sonrisa en los labios. Aquello suponía un paréntesis de tranquilidad en medio del ajetreo de su vida diaria. - Bueno, al final te animaste con lo de tocar el tema de guitarra... No fue tan terrible...ni me quitaste ningún protagonismo - dijo Laura arqueando una ceja y sonriendo a continuación.

Mauricio le devolvió la sonrisa y le besó los labios para luego decirle - Pues sí, la verdad es que salió mejor de lo que esperaba, y sobretodo me gustó mucho como cantaste mi canción....gracias- dijo volvió a pegar sus labios a los suyos -si quieres tomar algo yo invito-

Laura arqueó una ceja – Eres Incorregible... Invitas tu a esta pero la siguiente me toca a mi - dijo negando y sonriendo. Se giró hacia la barra y pudo ver ahora sentados en una mesa a Héctor con una mujer en medio del local – Ah... Está el periodista que me hizo la entrevista, el del monasterio... el de la monja Clarisa, me había olvidado que iba a venir -

Ambos avanzaron hacia la mesa. - Hola - dijo la chica con una sonrisa amable -

Antia sonrió con la respuesta de Héctor -Gracias- dijo tras besarlo

Héctor se giró y con una efusividad un tanto fingida... – hey, Laura cariño- le dijo mientras le daba dos buenos besos en ambas mejillas, mientras por el rabillo del ojo observaba a Antía. En el fondo le dolía un poco hacer eso pero quería espabilar a Antía. Últimamente estaba bastante apática a penas le hacía caso a Héctor, el cual sólo quería volver a encender la llama de la pasión aunque quizá... se quemase al intentar encenderla.

Laura notó los dos efusivos besos de Héctor, con evidente mueca de sorpresa... "Cariño... ahh... pero a este tío se le va" . Tras separarse del chico y establecer nuevamente una distancia coherente entre ambos - Te presento a Mauricio, mi novio - afirmó recalcando ligeramente la última palabra.

Antia escuchó una voz y como Héctor se separaba de ella para ponerse en extremo cariñoso con la tal Laura " ¿Se ha vuelto loco? si no ha bebido, joder" pensaba no pudiendo evitar sentir cierta molestia.
La agradable sonrisa de Mauricio se vio notablemente disminuida por el peculiar gesto del periodista, pero no dijo nada, no conocía las maneras de Galicia y él hombre parecía estar con su novia, asi que...

Héctor había conseguido en parte su objetivo, notó como Antía le había molestado ese gesto hacia Laura. Pero tendría que dejar ese juego ya que Laura se encargo muy bien de no darle ningún tipo de chance.
-Hola Mauricio- Se giró hacia Antía- Te presento a Laura la que me ayudo con lo de los monjes. Ella es Antía – afirmó mirando para Laura y Mauricio - Mi novia y futura madre de nuestro hijo -dijo mientras le pasaba su brazo por la cintura-

Antia saludó sonriente a ambos con dos besos -Es un placer- dijo, al parecer Laura había sido bastante tajante con Héctor, eso le había gustado, pero ya hablaría con él más tarde. Mauricio saludó primero a Antia y luego le estrechó la mano a Héctor - el gusto es nuestro, y felicitaciones.

--Oh gracias Mauricio. Por cierto Laura, el concierto genial y muy bien cuando estuvisteis los dos tocando juntos. Recuérdame que después te diga algo que te va a gustar después de eso ya me deberás dos- dijo riendo -Por cierto ¿tomáis algo? yo invito-

Laura escuchó lo que le había dicho Héctor "¿Pero de qué va?... Deberle dos, YO!" Arqueó levemente una ceja y dijo -. Claro Padre Silvestre - dijo riendo y negando.

Héctor rió - Si es cierto, entonces sólo me deberás una - le dijo dándole un pequeño codazo de complicidad. Héctor bebió un poco más de su copa-Bueno Mauricio ¿a que te dedicas? -

-Deben ir al conservatorio juntos ¿verdad? - preguntó Antía con una sonrisa mientras abrazaba el brazo de Héctor..

-No, realmente nos conocimos en el subterráneo cuando casi resulta aplastada por un aluvión de gente- dijo riendo un poco al recordar el momento.

-Ah si que curioso, pero ¿en que trabajas?- le volvió a preguntar Héctor a ver que Mauricio no le respondía

Laura escuchó la suposición de Antía y quedó un instante sorprendida ¿Cómo sabía Héctor y su novia que estaba en el conservatorio?... Escuchó la respuesta de Mauricio y se rió ligeramente mirando para el chico y negando. Pero Héctor insistía.

- Soy docente – dijo Mauricio con sinceridad.

-Ah interesante mientras no tengas que aguantar a adolescentes babosos- le dijo

Laura miró a Antía primero y luego para Héctor, arqueó ligeramente una ceja - ¿Pero cómo sabéis que estoy en el conservatorio?

Héctor miró a Antía a la vez que pensaba en que decirle -mmmm.... bueno ya sabes somos periodistas y.... tenemos nuestros pequeños contactos- le dijo mientras pellizcaba ligeramente a Antía para que no dijese nada.

Laura miró para Héctor, realmente le resultaba desagradable que espiaran su vida. Cada vez dudaba más de por qué se había metido en semejante berenjenal por aquel chico que ni siquiera conocía y que por encima resultaba saber más de lo que decía.

Antia logró no sobresaltarse ante el pellizco y entendió el mensaje de Héctor, se quedo callada y no dijo más.
Mauricio dijo -Estaba por invitarle unas copas a Laura, pero puedo permitirme dos mas

_________________

*1
Los días grises: http://rapidshare.com/files/16962561/los_d_as_grises_-david_rubio_y_zahara-mp3.mp3.html

*2

Danza de la vida breve (guitarra española) :
http://rapidshare.com/files/16961625/Danza_de_la_vida_breveRegino_Sainz_De_La_Maza_-Guitarra_Espa_ola_Clasica__-_3_38.mp3.html


Última edición por el Dom Feb 18, 2007 2:12 am, editado 3 veces
Volver arriba Ir abajo
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Feb 18, 2007 2:04 am

Después de la típica discusión por saber quien invitaba, Mauricio y Héctor se dirigieron a la barra para pedir unas copas excepto para Antía que debido a su estado de buena esperanza no podía tomar alcohol.
-Bueno Mauricio va a ser la primera vez que me tome una copa en México, a ver que tal las hacen porque por el resto de Europa son una mierda, no las cargan nada-

Héctor llamó la atención de uno de los camareros -Dame un San Francisco, un ron con cola y... - Se dirigió a Mauricio -¿qué tomais vosotros?-

Mauricio sonrió y contesto -No puedes visitar México sin probar el mejor tequila del mundo- miro al hombre al que Héctor le había pedido las cosas y completó pidiendo una botella de una marca de tequila nacional y 3 vasos.

"Joder tequila, vaya mierda, odio el tequila" el pobre Héctor tuviera una mala experiencia de tequila en su adolescencia, entre el tequila y los callos acabó vomitando al poco tiempo de comenzar a beber, aquello fuera una mezcla explosiva para su estomago.

Laura se quedó sola con Antía - Eres española ¿no? ¿gallega? – pensó por el nombre de la chica que era claramente noroccidental.

-En realidad soy Madrileña, pero mis padres son de Coruña

- Ah que bueno...así que tus padres se fueron de la tierra, como los míos ¿y son de Coruña capital o de algún pueblo?- Laura estaba intentando entablar conversación.

Antia estaba contestando a las preguntas de Laura cuando dos hombres con algunas copas encima preguntaron-¿Están ocupados estos asientos? Sin esperar respuesta ellos mismos los ocuparon, cada uno con una exagerada sonrisa en el rostro.

Laura intercambió una mirada con Antía - Pues, la verdad es que sí están ocupados - dijo con una leve mueca claramente condescendiente.

-Bueno, pero supongo que no pasara nada si las invitamos a unas copas, después de todo, si dejaron solas a dos hermosas muchachas como ustedes ...- dijo el otro

Laura no pudo evitar entornar ligeramente los ojos “ala...ya nos han tocado los plastas babosos de turno que no entienden la sencilla palabra no”. - Pues es que justamente, estos chicos de ahí que nos acompañan - dijo señalando con la mirada en dirección de Héctor y Mauricio - fueron a buscar unas copas - volvió a repetir aquella sonrisa condescendiente.

-Así que pueden seguir su ruta- coronó Antia, entonces el hombre que estaba sentado junto a ella cruzó su brazo por su espalda
- Vamos, que estoy seguro de que están buscando algo mas que "eso"- dijo señalando con la cabeza a Mauricio y Hector - en México

Laura miró para aquella escena... "trogloditas descerebrados" - A ver, creo que hemos sido bastante claras ¿no? ¿Qué es lo que no entendisteis del concepto estas sillas están ocupadas?

Héctor cogió su tequila y junto a Mauricio se dirigieron junto a las chicas cuando vio la escena. -Oh mierda lo que nos faltaba, los típicos gárrulos. Bueno Mauricio vamos a ver si nos libramos de esos pendejos de la mejor manera posible- Héctor no quería problemas, así que se le ocurrió que lo mejor es que las chicas fuesen junto a ellos y dejasen a los tipejos esos ahí. "Coño pero si está...abrazando a mi novia" - Será hijo de puta - "No Héctor relájate no te busques problemas". -Vamos Mauricio acerquémonos un poco y las llamamos-

Antía le puso bruscamente una mano en el pecho al hombre que con confianza se había acercado tanto a ella, intentando ponerle un freno y alejarlo -Ea! ¿Que crees que haces, imbécil?-

El otro hombre pareció no prestar atención a esa escena y siguió con Laura
-No entiendo como una chica tan bonita puede estar con unos maricas como esos, vamos no te hagas la difícil- dijo acercándose mas.

-No, Laura....justo lo que nos faltaba- se lamentó Mauricio luego vio a Héctor y asintió encaminándose a la mesa.

Laura fijó una mirada gélida en el chico "son cortos...gilipollas" - A ver creo que es muy fácil tío, de-jad-nos en PAZ , pírate, que te vayas tu y tu colega y tengamos la fiesta en paz -

-Chicas venid vamos a bailar- grito Héctor

Laura miró un segundo a Antía y se levantó de la silla para dirigirse hacia Mauricio y Héctor "A ver si nos libramos de este par de pelmas".. El chico que estaba con Antía le agarró la muñeca cuando ésta hizo el amago de irse.

Antia le dio un buen tortazo en la cara el sujeto - Déjame en paz, animal ¿qué te has creído?- protestó ella , pero cuando el hombre sintió el golpe en su cara se dejó llevar por la furia, levantando su mano para devolverle el golpe.

Héctor al ver como su novia le pegaba al chico, empezó a correr hacia ellos

Laura vio aquella escena e intentó tomar la mano del chico para impedir que le pegara a Antía - ¡ESTA EMBARAZADA HIJO DE PUTA!

El sujeto vio a Laura tomándole el brazo y lo sacudió con fuerza hacia atrás sin hacerle mayor daño pero alejándola de sí y sentándola en el piso.

Héctor llegó junto al chico que intentó pegar a Antía y sin mediar palabra
le golpea con el vaso de tequila en la cabeza. Su novia se hizo a un lado rápidamente cuando el hombre la soltó tras el golpe de Héctor.

El chupito de tequila se rompió tras el contacto haciendo que el chico se tambaleara por la conmoción del golpe, tras dejar momentáneamente a uno fuera de combate, Héctor se dispuso presto al combate contra el otro pendejo que molestaba a las chicas. En esos momentos a Héctor se le venían por la cabeza recuerdo de su etapa de militar. se veía con la bayoneta cargando contra un enemigo simulado...las prácticas de defensa personal, el cabrón del García que tan mal se lo había hecho pasar. El otro chico se quedó sorprendido al ver a su compañero gritando de dolor, momento que aprovechó Héctor para descargarle todo un puñetazo en la nariz.

Laura estaba en el suelo anonadada todavía con el empujón que acaba de recibir y viendo aquella escena. Héctor había reaccionado con vehemencia pero era una furia comprensible aunque en ningún caso la violencia fuera un medio que le pareciera conveniente. Pero semejara que aquel idiota no comprendiera otro lenguaje. Se incorporó intentando reaccionar... buscó con la mirada primero a Mauricio y luego a Enrique, el dueño del local....Aquella locura tenía que finalizar.

La gente de las mesas vecinas se levantó y algunos hombres se metieron separándolos, sobre todo sujetando a los que habían comenzado con aquello intentando pasarse de listos con Antia y Laura. Mauricio avisó al dueño del lugar, pero tan pronto como vio a Laura caída en el piso se apresuró para llegar a su lado y ver como estaba.
El dueño y el muchacho que servia los tragos en la barra se acercaron rápidamente intentado poner fina al conflicto -Hey, qué pasa aquí?- dijo el primero.

Laura vio a Mauricio ante ella... Todo había acabado - Estoy bien...estoy bien - se sacudió los pantalones y negó todavía nerviosa con aquella situación - Panda de idiotas...trogloditas de los cojones... Le intentó pegar! - dijo con incredulidad - Quise evitarlo y me empujó el so-mamón - afirmó con furia contenida.

Héctor se dirigió a Antía con evidentes signos de preocupación -¿Estás bien cariño?- le dijo mientras la abrazaba fuertemente.

Los tipos intentaron zafarse mientras la gente los agarraba y el dueño del local fue directamente con Héctor -¿qué ocurrió? ¿Qué es esto? Este es un lugar tranquilo, para peleas, la calle.

Laura escuchó al dueño increpando a Héctor. Se acercó a él - No, no... Estos chicos nos estaban molestando... y ese - dijo señalando con la mirada al que le había empujado - quiso pegar a su novia...lo quise impedir y me tiró al suelo - negó con la cabeza.

Héctor se giró cuando escucho hablar a Laura. -Si es cierto esos chavales tiraron al suelo a Laura y uno de ellos intentó pegar a mi novia que está embarazada- dijo señalando al chico que había intentado agredir a Antía.

Uno de los clientes del bar que estaba ahí corroboro las palabras de ambos - Es verdad, esos tipos se sentaron con ellas sin invitación y después empezaron a pasarse de la raya- el dueño del bar asintió -Esta bien, esta bien, todos tranquilos- miro a los dos sujetos - y ustedes dos, fuera, este es un lugar tranquilo así que para andar haciendo estupideces vayan a otra parte, y váyanse antes de que me decida a ponerles una denuncia.


Antia se abrazó a Héctor, aun estaba asustada - pensé que ese animal iba a golpearme-

Mauricio se acercó al dueño y se disculpó por lo que había pasado, aunque realmente no tuviera culpa alguna.

Héctor miró a ambas quería distender el ambiente – No se os puede dejar solas ni un segundo que ya os ponéis a ligar – dijo riendo.

Laura arqueó una ceja y se rió... Héctor tenía un sentido del humor..."diferente" aunque ya empezaba a entenderlo mejor. Negó brevemente - Bueno, caballero andante o debería decir Rambo - dijo con una sonrisa - os dejo un momento tranquilos... voy a hablar con el dueño un momento - Sentía la necesidad inminente de disculparse. Sabía que no habían tenido culpa de nada pero nunca le habían gustado ese tipo de situaciones. Llegó junto a Mauricio y a Enrique..

-Esta bien, no tienes por qué disculparte, no fue culpa de ustedes, de todas formas dile a tu amigo que se controle un poco la próxima vez, los tipos tenían bastante mala pinta, parece que les pego con demasiada fuerza- Laura llegó justo para oír al dueño del local hablar con Mauricio.

-Quiero irme a casa Héctor, no me estoy sintiendo bien- dijo Antia sin separarse de él.

Héctor volvió a abrazar a Antía - Muy bien nos iremos ahora mismo, no te preocupes, ya hemos tenido suficientes emociones por hoy-

Laura escuchó lo que decía Enrique - Bueno, siento todo este rollo...es verdad Héctor se pasó un poco, pero iban a pegar a Antía y está embarazada...ya sé que no se puede justificar la violencia pero vaya... lo siento... No me gusta haber montado un alboroto así sobre todo después de la oportunidad... - Tomó aire aquella situación le había incomodado.

Esta bien, insito no tiene que disculparse, y comprendo a su amigo, solo digo que piense antes de hacer algo así porque puede traerle problemas estando en otro lado, aunque ahora no tenia otra opción, cualquiera hubiera hecho lo mismo, no se preocupen ahora vayan, siéntense enseguida les traigo algo, la casa invita- dijo con una sonrisa intentado calmar los ánimos


Héctor y Antía se dirigieron junto a Laura y Mauricio - Bueno chicos nosotros nos vamos. Por cierto Laura recuérdame que te tengo que decir algo, ¿vale?

Laura vio como llegaba Héctor con Antía y escuchó la despedida - Bueno ya me dirás, hablamos - dijo algo intrigada, dando dos besos al chico - Cuídate Antía- dijo con una sonrisa y repitiendo el gesto.
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Feb 18, 2007 6:33 am

Laura estaba en el aula de guitarra, esperando que el profesor llegara. Hoy iba a tocar. Había practicado con ahínco la técnica del trémulo a la par que había mirado concienzudamente elementos que hicieran su estilo de guitarra mas ortodoxo... Había adoptado la postura clásica y corregido algunos defectos de posicionamiento. Había sido ciertamente difícil y necesitaba concentración para no volver a la rutina de los vicios adquiridos por su formación autodidacta.

El profesor como todas las clases había entrado, saludado, dado un tiempo a que todos se acomodaran mientras repasaba los presentes y luego de una breve introducción y un repaso pidió a Laura que pasara a hacer una demostración. Ella misma se lo había pedido en la clase anterior para que el docente pudiera evaluar su evolución en la postura y en aquellas nuevas técnicas.

Laura se levantó sacando la guitarra que le había regalado Mauricio... Había tenido que darse por vencida. No había color entre su vieja y querida guitarra y esa nueva: la sonoridad era mucho mejor. A eso había que añadir que la había tomado con cariño. Era un regalo suyo y aquello le daba personalidad.
Siguiendo su habitual ritual la sacó de la funda acercándose al estrado. Metódicamente tomó asiento, acercando el pedal a su pie izquierdo y colocando el instrumento en aquella llamativa y clásica posición oblicua. Realmente no era del todo incómoda y había sido más fácil adaptarse a una correcta colocación de la manos y dedos. Con concentración fue ajustando sus manos fijándose principalmente en su pulgar que tenía tendencia a caer hacia abajo.

Siguiendo su ritual habitual tomó aire cuando iba a cerrar los ojo vio de refilón como un grupo de personas pasaba al lado de su aula a través del vidrio de la puerta, una de ellas se detuvo y dijo señalándola -¡ahí está!- y antes de que alguien pudiera reaccionar la puerta se abrió y una pequeña multitud invadió el salón entre gritos y protestas por el momento ininteligibles. El último en entrar cerró la puerta y tomó una silla vacía atrancándola. La puerta se abría hacia adentro.

Laura vio como la señalaban... ¿Qué es lo qué quieren? y entraban en banda dentro del aula. Sus ojos se abrieron ante la sorpresa. Inspiró una profunda bocanada de aire...¿Qué está pasando?.
Por instinto y sin que siquiera se diera cuenta se levantó dando varios pasos hacia atrás. Tragó saliva...¿Quienes son? ¿Qué es lo que me quieren? ¿Qué he hecho yo?

El - ¿Que es esto? ¿Que esta pasando aqui?- del profesor, murió ahogado en un mar de insultos que se dirigían sin duda alguna a Laura. Las casi 10 personas que habían entrado ahí, tanto hombres como mujeres encajaban justo en el estereotipo del típico santurrón que recorría las calles los fines de semana tocando el timbre casa por casa para llevar la palabra del señor.

Entre las muchas cosas que se oían estaban "Hija del Infierno" "Hereje" "Consorte de Satán" "Bruja" y un variado diccionario de sinónimos de términos que se referían a Laura como una mujer de mal vivir.

Laura se quedó abrumada ante aquella gente rabiosa. Sus mentes parecían vacías y la estaban mirando con odio... Vilipendiándola sin ton ni son. "¿Que hago...qué hago?". Sus pasos iban dirigiéndose instintivamente para atrás, topándose para su desesperación con el encerado. Sus ojos se pasearon nerviosamente por el aula. "La puerta!" estaba atrancada por aquella silla. "La ventana!" estaba en un tercer piso. Notaba como su pulso se aceleraba. Aquello era una ratonera. Sus manos sudaban. Sus ojos se posaron un instante sobre Joaquín, el profesor de guitarra, cuya mirada expresaba incredulidad.... "¡Je dois faire quelque chose!... ¡tengo que hacer algo!"

Uno de los jóvenes furiosos pareció tomar el liderazgo del grupo y el resto calló para dejarle hablar, aun haciendo oídos sordos a lo que el profesor, furioso e incrédulo, decía. La clase estaba alborotada, nadie entendía lo que estaba pasando.

-Vinimos a protestar por la presencia de ESA- señalando a Laura sin miramientos - enemiga de Dios en nuestra amada tierra, queremos que vuelva a su tierra llena de paganos y herejes que no respetan al Santo Padre y las Sagradas escrituras- decía con furia - Es una ramera infernal que ha pactado con su padre demoníaco y solo busca corromper. La queremos fuera y lo queremos ya.

Laura escuchó las palabras de aquel joven fanático... Ramera infernal... Padre demoníaco... “que me digan que soy una puta, una hereje...lo que quieran...pero NADIE se mete con mi padre” Su mente se puso en blanco un segundo... "¿Pero de qué van? ¿Quién se ha creído este niñato enfatizado por la ignorancia?" Cerró los ojos un instante y tomó aire... Contrólate... Contrólate.

Se irguió, dejó la guitarra apoyada contra la pared con cierto cuidado y empezó a hablar - Le rogaría para empezar que respeten la memoria de mi padre, en paz descanse. - afirmó con rotundidad mirando fijamente a los ojos al chico que había proferido aquella sarta de insultos.- No soy más que una historiadora que intenta investigar unos documentos que probablemente solo nos hablen de alquimia. Un mito... No se puede transformar las cosas en oro en el mundo real - dijo mirando para el chico con cierta condescendencia - Ni vivir eternamente..... Salvo por intercesión divina- Dijo puntualizando adaptándose a la audiencia.
- No pretendo hacer daño a nada...solo revalorizar el patrimonio histórico y cultural de este país a través del conocimiento - tomó aire un instante - Les ruego dejen que prosiga la actividad de este conservatorio que no tiene absolutamente nada que ver con mis otras actividades - afirmó mirando a aquel grupo enfervorizado. Notaba un reguero de sudor en la espalda. Había intentado mantenerse firme pero frente a un grupo de fanáticos probablemente todo caería en saco roto.

Y así era...-No intentes justificarte y engañar a la gente, esos papeles estaban escondidos porque sus conocimientos pertenecen al mismísimo Lucifer, y la iglesia se encarga de que su sus corruptos saberes no contaminen al hombre.

Laura lo miró con cierta sorpresa - ¿Escondidos? Fue un fraile el que me habló de él por primera vez y me los enseñó... No estaban clasificados, eso es lo único. Lo más probable es que solo nos hablen de una fantasía... Nada más. Nadie vive eternamente... salvo en el reino de los cielos - dijo lo último cubrirse las espaldas - Reitero, no pretendo hacer daño a la Iglesia en ningún momento ¿Para qué lo iba a hacer? No tiene sentido. – Realmente su primera intención investigando no era dañar la imagen de la Iglesia aunque de hacerlo tampoco se iba a sentir mal por ello. Nunca había sentido mucha predilección por aquella institución “sectaria” que se dedicaba a manipular las mentes de sus fieles utilizando la ignorancia como arma para coaccionar y alienar a sus asustados devotos.

-JA!, Ese vil sarcasmo solo da peso a nuestras palabras y hunde mas sus argumentos, los poderes demoníacos son tan reales como nuestro señor Jesucristo. Eso es herejía y la buena gente de esta tierra no va a tolerarlo. Ya todo el mundo sabe que España esta envenenada y han dado la espalda a Dios. Esto es solo otra prueba, como la blasfemia de enviar a ese hombre a cometer la imprecación de hacerse pasar por un miembro de la santa sede, de seguro es otro acolito infernal o peor aun una victima de ese vil súcubo- dijo señalando a Laura.

El resto de las personas volvió a insultarla gritándole que se fuera, sus palabras eran cada vez más fuertes e hirientes.

La puerta empezó a resonar mientras intentaban tirarla abajo, alguien había avisado a los demás profesores y autoridades del conservatorio y, probablemente, ya hubiesen llamado a la policía también.

Laura escuchó las palabras de aquel fanático. Su mirada estaba incoherentemente vacía como la de sus seguidores.
La excursión de Héctor le estaba pasando factura. "PUTAIN DE MERDE!... Lo que me faltaba, como es español ya soy la culpable... La culpable de todos los males del mundo... Todo lo que haga mal un español va a ser culpa mía, no te jode... AY Héctor, la madre que te hizo...FAIT CHIER! QU'ILS AILLENT SE FAIRE FOUTRE!"

La reacción del resto de aquellos fanáticos estaba acabando con la rabia que había nacido en ella sustituyéndola por sorpresa y luego... miedo. Su instinto natural volvía a hacerla retroceder pero nuevamente se topó con el encerado. Cerró los ojos un instante para tranquilizarse como si aquel gesto la ayudara a salir de aquel lugar. Estaba totalmente aislada, asustada, atrapada. De repente escuchó el ruido de unos forcejeos en la puerta... "que se abra, que se abra, que se abra...papa ayúdame" pensó mirando hacia el techo un instante.

De pronto Laura sintió unas manos tomándola por los hombros para luego apartarla sin hacerle daño alguno, era el profesor intentado tranquilizar y defender a su alumna, tratando de retomar el control de su clase.

- Ya es suficiente de esto, es una locura, váyanse de una vez, si se quedan van a ser los únicos perjudicados, porque no hay forma de que la policía no tome esto como un ataque, no voy a permitir más esto, es un atropello y una locura, no son mas que un grupo de maniáticos.

Laura miró para Joaquín. Sus ojos casi negros expresaban incomprensión, miedo, rabia y agradecimiento. Todo un conjunto de sentimientos que se entremezclaban en la mente de Laura liberando adrenalina. Su pulso se había acelerado, sus poros empezaban a exudar más líquido. Agradecía aquel gesto no estaba tan sola expuesta a la furia de aquellos fanáticos.

Los exaltados seguían vociferando ahora insultando a Joaquín, acusándolo de ser su cómplice. Algunos decían que Laura había hecho como con el otro hombre y había comprado su alma a cambio de carnales placeres.
Entonces los golpes en la puerta redoblaron y Laura pudo ver que la policía había llegado, solo había tardado unos minutos pero para ella fueron mil años...

Estaban totalmente obnubilados, sus bocas solo proferían insultos. Semejara que aquello estaba sucediendo a cámara lenta. Podía ver el odio en sus ojos, sus bocas abriéndose lentamente escupiendo aquellas palabras malsonantes, la saliva brotando, sus manos alzándose.
El ruido del exterior estaba aumentando y los golpes contra la puerta eran cada vez más fuertes. "La policía, la policía...que la echen abajo...que la echen abajo"

Intentaron hacer que la puerta no cediera, pero fue inútil, los oficiales pudieron mas y lograron tumbarla y empezaron a neutralizar a los jóvenes fanáticos. El caos era absoluto y en medio de aquella situación de locura uno de los agresores se adelantó intentando alcanzar a Laura con odio en los ojos.

La puerta había cedido. Laura dejó que un suspiro de alivio saliera de entre sus labios como una exhalación. Miró un segundo para Joaquín. Cuando volvió a fijar su vista al frente pudo ver como aquel loco que había tomado la palabra se estaba acercando a ella a pasos agigantados. Laura quería evitarlo, quería frenarlo, pero no tenía escapatoria. Cerró los ojos y sus brazos se cruzaron protegiendo su rostro.

Su sangre iba cada vez a mayor velocidad, acelerando el bombear del corazón. Sus pulmones estaban saturándose de aire. Sintió como una mano le había agarrado violentamente su camiseta a la altura de sus pechos y estaba desgarrando su ropa. Notó el cuello de su camiseta enganchándose contra su piel y cediendo a continuación. Sus párpados volvieron a abrirse. Su instinto de supervivencia estaba saliendo a la luz. Tenía que apartar, alejar aquel loco fanático como fuera. Sus manos se posaron sobre el torso del chico...quería empujarlo, apartarlo, recuperar su espacio vital. De pronto notó como su agresor tiraba hacia abajo desgarrando más la maltrecha costura, sintiendo una nueva quemazón en el cuello. Lo habían placado.Laura se quedó paralizada observando a aquel perturbado en el suelo.

Desde que la puerta cayó, fue cuestión de segundos para que la policía pusiera fin a esa locura. Un oficial fue a buscar al que se había lanzado contra Laura, levantándolo con violencia y llevándolo sin poner cuidado. Laura pudo ver por fin quien había detenido a su agresor y como no era otro que Mauricio.La policía se llevó rápidamente a los fanáticos, pero todo era un revuelo, las profesoras estaban enloquecidas, los alumnos aterrados, los jóvenes frustrados gritaban pidiendo justicia.

Laura se quedó frente a Mauricio que se estaba incorporando. Lo miró con desesperación y agradecimiento de una vez. Se adelantó un paso hacia el...quería abrazarlo, sentirse protegida, dejarse llevar. Pero se quedó nuevamente petrificada. Aquello era uno de los momentos más frustrantes que había vivido. No podía siquiera desahogarse. El agradecimiento estaba desapareciendo de sus ojos y solo quedaba aquel enorme sentimiento de frustración. - Muchas gracias - dijo mirando para Mauricio.

Sus ojos tenían cierto brillo, unas lágrimas pugnaban por salir a la luz. Tenía que comportarse como si fuera casi un desconocido, un frío miembro del profesorado. Quería decirle que le quería, que quería huir de aquel lugar, volver a casa con él, fundirse en un abrazo, sentir sus cálidos labios... Pero aquello le estaba vetado.

Mauricio le tomó los hombros con las manos y la miró a los ojos -¿Estas bien? Quédate tranquila, ya esta todo bajo control.

Laura tomó una larga bocanada de aire - Sí estoy bien - tragó saliva un instante - Estoy bien – dijo para auto convencerse. Le sonrió ligeramente

Le puso ambas manos en el rostro, aun mirándola, ahora con una sonrisa -Intenta olvidar lo que pasó, no pienses en eso- le quito las manos de la cara, solo fue un segundo, demasiado poco para parecer mas que un gesto de alguien muy humano preocupado, pero lo suficiente para decirle a Laura, que él estaba ahí, con ella.
Mauricio se dio vuelta y empezó a hablar con otro de los profesores que se habían acercado y quien entonces se preocupó del bienestar de Laura fue Joaquín.

Laura asintió a las palabras de Mauricio. Habían sido breves, pero notar sus manos cerca de su rostro le había tranquilizado. Había sentido su presencia y apoyo aunque aquello no dejaba de frustrarla. Era totalmente antinatural. Los pasos de Mauricio se alejaron sin que pudiera decirle lo que realmente sentía.


Última edición por el Dom Feb 18, 2007 6:38 am, editado 1 vez
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Feb 18, 2007 6:37 am

La chica pudo ver como el profesor de guitarra se acercaba. Estaba inmersa en cierta irrealidad. Se tocó un instante el cuello notando como su piel se había levantado en algunos puntos y pudo observar las costuras de su camiseta totalmente deshilachada y descosida en esa zona. - Sí estoy bien, siento lo sucedido - dijo negando.

-¿Sientes lo sucedido? ¿Tu? Pero si eres la victima Laura, tranquilízate, esto no fue tu culpa. Eran un grupo de fanáticos dementes, no hay razón alguna para disculparse.

- Sí ya..sí - dijo negando nuevamente - Es sólo que no pensaba, que no me gusta, que esto haya pasado justamente en el conservatorio que no tiene absolutamente nada que ver con la investigación - se quedó un instante callada - Esto es una locura, una locura, no me cabe en la cabeza - afirmó plasmando sus pensamientos en voz alta.

-Ni a ti ni a nadie, pero no importa ahora, quítatelo de la cabeza y tranquilízate, tomate el día, ve a tu casa y de seguro nadie dirá nada si te tomas algún día mas, solo intenta despejar tu mente- dijo poniéndole una mano en el hombro.

- No - dijo Laura con rotundidad - No voy a permitir que unos fanáticos cambien mi vida y mi forma de actuar. Sería darles en cierto sentido la razón y eso no lo voy a permitir - afirmó fijando sus ojos en Joaquín a la par que tomaba otra honda respiración. Volvió a pasarse la mano por la rozadura del cuello inconscientemente. Su ritmo cardiaco estaba volviendo poco a poco a su cadencia natural.

-Pero tampoco puedes estresarte, eso sería peor, y te aseguro que les gustaría mucho más. De verdad Laura, creo que lo mejor va a ser que te tomes un descanso, no estas para andar tocando la guitarra.

Laura se quedó un instante pensativa... tenía que poner la denuncia, quería hablar con Erick con tranquilidad - Sí tal vez tenga razón... aunque antes quiero acabar con lo que empecé. Quiero terminar la clase...luego ya haré los tramites de la denuncia y ya podré descansar.- dijo volviendo a tragar saliva.

-Que terca eres, pero esta bien si es lo que realmente quieres, siéntete cómoda de tomar la decisión que más te convenga.

- No sabe cuan cabezota puedo llegar a ser – una sonrisa triste se inscribió en su rostro - Eso sí, sólo si usted quiere.- su sonrisa tomó un cariz cálido - Gracias por lo que hizo cuando estaban estos... exaltados... Se estaba jugando su propia integridad física... Muchas Gracias.-

-No tienes nada que agradecer, cualquiera en su sano juicio hubiese hecho lo mismo- mientras lo decía el tumulto de gente abandonaba el salón. La directora del conservatorio y su gran amigo el profesor Pereda fueron los únicos que se quedaron allí para decirle unas ultimas palabras.

-Me alegra verla bien Señorita Saavedra Castro, no cualquier persona estaría tan entera luego de algo así, aunque ¿usted nunca baja la cabeza verdad?- dijo Pereda con esa sonrisa tan...sarcástica que tenia siempre en el rostro

Laura observó su sonrisa ... Siempre tan cínica... No puede ser tan cabrón y meterme una pulla ahora... No tiene sentido... Tal vez haya nacido con ella - Sí puede ser, suelo luchar hasta conseguir el resultado esperado -dijo mirando con seguridad a Pereda - algunos lo llaman cabezonería yo prefiero llamarle dedicación - hizo una breve pausa a la par que volvió a respirar profundamente – Decir que no me asusté con lo que acaba de pasar sería mentir pero no voy a dejar que la locura de unos fanáticos religiosos cambien mi forma de actuar. Eso, sería darles la razón. – volvió a reiterar para convencerse de sus propias palabras.

-Lo sé- afirmó Pereda- por eso sigue en mi clase, ahora si me disculpan- dijo y se retiró. Entonces la directora del conservatorio comenzó a hablarle, y a soltarle un discurso disculpándose por lo ocurrido, esas cosa no eran comunes en su establecimiento...

Laura escuchó la afirmación de Pereda. Era el primer reconocimiento que le hacía en persona, hasta ahora solo había escuchado de los demás pero jamás de los jamases había tenido una mínima palabra de reconocimiento.

La chica aguantó con serenidad el discurso de la directora - Lo sé, no pasa nada. En ningún caso es responsabilidad del conservatorio. De hecho me disgusta que esto haya pasado justamente aquí. No me gusta que mi otra actividad repercuta aquí. Son unos fanáticos, el conservatorio no podía esperárselo - se quedó un segundo callada - Ni siquiera yo me los esperaba... Sabía que podía tener repercusiones pero nunca pensé en esto.- dijo con la mirada algo perdida.- Lo que le agradecería es que después - miró su reloj apenas quedaba un cuarto de hora de clase - de esta clase pudiera retirarme, tengo que hacer los trámites de la denuncia entre otras cosas.

-Eso no debe de pedirlo, puede retirarse cuando guste, no es necesario que termine esta clase, de hecho- miro al profesor- lo mejor seria que deje a todos sus alumnos salir temprano hoy. Esto nos ha conmocionado a todos- miro a Laura -y si desea tomarse toda la semana puede hacerlo, no se preocupe.

- Bueno - sonrió brevemente - justamente le decía al profesor Martínez Torcuato que quería terminar con lo que iba a iniciar cuando todo esto pasó si no fuera mucha molestia...de hecho - dijo mirando a Joaquín - No hace falta que estén los demás. Entiendo que quieran retirarse

-Esta bien, hagamos así, nos quedaremos a escuchar tu canción y luego la clase termina, si alguien quiere irse antes, es libre de hacerlo.

- Muchas Gracias - dijo Laura aquello significaba para ella mucho más de lo que podría parecer a primera vista.

Laura volvió a iniciar el ciclo. Se acercó a su guitarra que afortunadamente no había sufrido ningún daño. Pudo observar ciertos murmullos en la gente, pero realmente después de lo que había pasado le daba igual.
Quería sacarse la espina que tenía clavada... No dejar que aquellos locos acabaran con ella. Había decidido que no podía acobardarse hacía apenas unos días y aunque las dudas habían vuelto a su mente, no quería dejar vencerse ante el primer comportamiento falto de raciocinio.

Se sentó en la silla y volvió a acercar el pedal a su pie para volver a colocar su guitarra en aquella posición extrañamente oblicua. Cerró los ojos un instante llamando sus sentidos a la plena dedicación. Con atención se fijó en cada uno de los detalles que conformaban sus más habituales defectos. Había repetido este gesto hasta la saciedad, intentando corregir cada una de las fallas que ella y Mauricio habían podido observar. Obviamente había sido de una gran ayuda....como siempre. Volvió a inspirar aire y a cerrar los ojos.

https://www.youtube.com/watch?v=S1C2Euf3u5s

Había empezado a jugar el movimiento de sus dedos coordinados y acompasados. La canción tomó cuerpo al cabo de unos breves compases. Semejaba un llanto a lo lejano a lo añorado...

Añoraba la paz, la tranquilidad que tenía antes de meterse en aquella frenética vida, antes de que la Iglesia se metiera con sus valores, antes de estar en el punto de mira. Cuando simplemente se estresaba porque no podía multiplicarse para dedicar más horas a todo... Cuando su futuro como historiadora no se había vuelto una incógnita... Cuando no la agredían por estudiar lo que amaba...
Añoraba no haber podido disfrutar del cálido abrazo protector del que había conseguido que volviese a amar. No poder plantarse frente al mundo y olvidarse de las normas sociales... No poder expresar libremente lo que sentía. No poder decir toda la verdad a los que creían podían convertirse en amigos, tal como ella entendía la amistad... Los amigos reales nunca habían abundado.
Añoraba la compañía de los que habían demostrado su amistad para con ella... Aquellas horas perdidas en confianza en alguna cafetería charlando.
Añoraba la sonrisa de los suyos. El tierno y cálido abrazo de su madre. Las bromas, el cariño y la seguridad de su hermano... La voz de su padre. Casi no la recordaba. Un mero eco recuperado a través de alguna fría grabación.
Añoraba no haber tenido la posibilidad siquiera de enfrentarse a él. No era más que una quimera, una idealización, un especie de mito del que tenía conciencia pero del que no quería prescindir porque le permitía alcanzar cierta paz con ella misma, serenidad.
Esa misma serenidad que le daban los paseos por las piedras rodadas de Compostela, llevándola hacia aquel rincón desde el que se podía observar la inmensa catedral de fachada barroca en todo su esplendor. La calma que le proporcionaba aquellos recorridos solitarios por los alrededores de la aldea de sus abuelos. El sonido de la naturaleza amansada observando la vivacidad de los colores de las tierras gallegas. La tranquilidad del crepitar de la lluvia galáica contra su ventana... El olor del viento cálido d'autent que tantas veces azotaba su bella ciudad de Toulouse, despertando los sentidos de los transeúntes. Las terrazas de su tardo-adolescencia disfrutando del sol engatusador del sur de Francia, observando el ensamblado perfecto de aquellos ladrillos rojizos que daban a la ciudad un soplo de vida que le hacían tomar cuerpo... Los latidos de esa vieja Europa, cuna de la civilización occidental que le había visto crecer.

Con suavidad y delicadeza sus dedos iban intercalando unos ágiles movimientos produciendo aquel sonido de la añoranza, la morriña, la saudade, le regrêt que le devolvían, sin embargo cierto optimismo. La música le estaba proporcionando un abrazo cálido que le permitía seguir adelante.
El ritmo de sus dedos fue aminorando, el abrazo se desestrechaba dejando sin embargo una huella indeleble, la música se había apagado.

Nadie se había movido de su asiento y en los rostros de todos se podía ver la sorpresa por aquella interpretación, no solo había mejorado mucho la parte técnica sino que el estrés de tan terrible situación no había hecho mella en Laura, por lo contrario le había dado fuerzas, era increíble.

-Excelente, el trabajo que has hecho con las posiciones es mas que visible, es sorprendente en verdad.
Laura volvía poco a poco en si, pudo observar las caras del resto de los alumnos y escuchar el comentario de Joaquín. Le había prestado atención a la corrección pero casi se había olvidado de aquello. No acostumbraba a tocar para que la juzgaran y aunque aquello le importaba antes del inicio de la clase, los acontecimientos habían arrastrado su mente hacia otras metas...El no dejarse vencer...

Miró para Joaquín y una sonrisa ligera pero cálida se inscribió en sus labios - Gracias - dejó que el aire entrara por sus pulmones - Creo que ahora ya puedo irme de aquí tranquilamente - afirmó dejando que sus labios expresaran lo que su corazón le había dictado.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeJue Mar 01, 2007 1:07 am

Cuando llegó a la redacción, lo primero que hizo fue ver si estaba Miguel Rubio. Pero aún no había llegado por lo que fue a su mesa, encendió su ordenador y vio su mail. En ese momento llegó Miguel, espero a que estuviese acomodado en su mesa y se dirigió junto a él. Al llegar le puso una fotocopia del artículo que había realizado sobre el asunto Taxcorp.

El hombre se sorprendió por la manera en que Héctor lo "saludaba", vio el papel y luego miro a Héctor algo perdido -Hola ¿pasa algo?-

Héctor se dio cuenta de que fue un poco brusco. -Lo siento es que aún no me he tomado el café. Mira este artículo lo sacaste en el mes de Agosto, ¿te acuerdas?-

-Nada- dijo restándole importancia, a esas horas uno solía olvidar la diplomacia, vio el articulo otra vez -Si claro, lo de Texcorp y el trabajo infantil y las obras que perjudicaban los vecinos ¿que pasa con él?-

"Bien parece que se acuerda" -Quería saber si seguiste con el tema, y que pasó entonces, es decir si se llegó a algo con todo eso-

-Pues no, la verdad es que no seguí investigando, el gobierno debía hacerse cargo de eso, pero no se que paso ¿por que?-

Héctor esbozó una sonrisa "lo que me imaginaba". -Me gustaría hacer un reportaje de investigación sobre todo este tipo de temas. ¿Mira más información sobre este asunto o temas similares no tendrás, no?-

-Bueno, si te interesa te puedo dar la información que busque para aquella vez que hice la nota, los testimonios completos y esas cosas-

Eso si que era una buena noticia, así podría volver a entrevistar a la misma gente y tener sus opiniones de antes y las de ahora. -Pues mira eso me iba a venir de perlas, pásamelas por e-mail, por favor Miguel-

-Para cuando lo necesitas, porque no se si tengo todo aquí, en mi casa seguro que esta todo, pero aquí no se si lo tengo todo, además tengo algunas cosas que no pase al pc-

-Lo más pronto posible por favor, te lo agradecería mucho- Héctor se dirigió a su mesa. "Veamos, una vez que Miguel me pase los testimonios de los testigos iré a hablar con ellos y después al ayuntamiento. Aunque ahora podría ir a visitar las obras a ver que se cuece por ahí".

Héctor cogió su moto y se dirigió a las obras del vial Taxqueña
Héctor no había visto las obras ene le momento en que la nota fue hecha, tampoco había visto alguna imagen, pero si debía arriesgar, diría que no habían avanzado mucho. Era un paisaje bastante deprimente para la gente que allí vivía, y el ruido era insoportable, la contaminación sonora era increíble.

Se fijo que había una caseta cerca de donde estaba el, así que se dirigió hacia allí como si tal cosa. Había dos obreros tomando un bocadillo.

-Buenos días- les dijo sin detenerse mientras se metía en la caseta.

Los obreros respondieron con al cabeza y no detuvieron a Héctor mientras se metía en el lugar, debía ser otro de esos ingenieros, se creían mucho...

Héctor cogió uno de los cascos y unas botas que había tiradas en la caseta. Salió de allí y se puso a visitar la obra

Tas estar tres cuartos de hora dando vueltas Héctor se dirigió a un grupo de obreros:

-Buenos días, tengo unas preguntas que hacerles señores, soy del comité de evaluación de Taxcorp, es decir evaluó que tal lo hacen los arquitectos e ingenieros contratados por la constructora y me gustaría hacerles unas preguntas a ustedes a los que están aquí en pie de obra-

Héctor hizo una pausa, estaba improvisando sobre la marcha

-Bien lo primero que querría saber es si creen que las medidas de seguridad de la obra se cumplen, es decir si los responsables de esto les dan los medios de seguridad necesarios para poder elaborar su trabajo con seguridad, otra cosa es que los tengan y no los utilicen eso ya es otra historia-

Los obreros parecían un poco recelosos de hablar con Héctor sobre esas cosas, daban rodeos, no contestaban directamente, seguramente temían por sus trabajos.

Al percatarse del temor de éstos, señaló a uno y dijo -Tu ven conmigo a la caseta, tranquilos que esto es anónimo y como ya dijo no es una evaluación a los obreros sino a vuestros jefes que son los que le cuesta dinero a la empresa, no vosotros, es decir vosotros no interesáis, suena fuerte pero es la verdad por eso no tengáis miedo. Claro que sino colaboráis entonces...-

Aquel obrero lo siguió, si bien no relajado, mas tranquilo y confiado por lo que dijo Héctor, quizá fuera una beuna oportunidad para conseguir que mejoraran las cosas en la obra.

Al entrar, cerró la puerta -bueno tu tranquilo. ¿Y bien que me puedes decir de la primera pregunta que os hice?-

-La seguridad no es muy buena- dijo pensando en lo que iba decir
-tuvimos varios accidentes y los capataces nunca nos dieron mas que unas cuantas gasas, el otro día Roca se agarro un pie con el taladro neumático y tuvimos que llevarlo al hospital con una de las camionetas, pero los patrones estaban comiendo y no se preocuparon-

Héctor se quedó sorprendido no se esperaba algo tan fuerte. -Espera, espera dime punto por punto los fallos de seguridad-

-Bueno, muchos de los equipos están viejos y en mal estado, además algunos de los más jóvenes no saben bien como usar todas las herramientas eléctricas y neumáticas, no están bien capacitados, a veces faltan cosas, como orejeras, el botiquín tiene solo cosas para heridas superficiales...-

Héctor estaba exultante tenía otra bomba informativa en sus manos, cuando aquel obrero acabó de soltar todas las carencias de seguridad que había en la obra le preguntó -Vaya muy interesante pero esto me sorprende ¿es qué a esta obra nunca vino un inspector del ayuntamiento?-

-No, o al menos no que nos dijesen a nosotros-

Interesante, no se porque pero me da que el ayuntamiento está en el ajo -Muy bien, otra pregunta ¿En que medida cree que se nota ahora en la obra la falta de los menores porque no he visto ninguno, cree que con ellos se avanzaba más rápido o por lo contrario eran un estorbo o problemáticos?, ya sabes adolescentes-

-Bueno en la obra nunca hubo, están en la parte de los camiones trayendo los materiales y eso, o como ayudantes en la parte de laboratorio-

A Héctor se le hizo un nudo en el estómago "aún los tienen, estos tipejos están como cabras" -Pero cuando salió aquella noticia en el periódico que casi nos jode, ¿los jefes de la obra no los quitaron de en medio? y además por lo que dices, ni siquiera vino alguien del ayuntamiento ¿no es así?-

-Bueno antes ayudaban más en la obra, ahora todos los menores de 18 están donde la gente no los ve, se cuidan mucho de eso-

"Oh joder, joder que bueno" ya se imaginaba recogiendo el premio Nacional de Periodismo -Pero el ayuntamiento no vino a inspeccionar ese tema ¿verdad?-

-No que yo sepa-

Justo lo que esperaba Héctor. -Muy bien. Otra pregunta, ¿estáis tomando medidas para que las estructuras de las construcciones colindantes no se resientan, sobre todo después de las quejas de los vecinos?-

-Eso no lo se, yo soy un obrero, hago lo que me dicen y poco más, aunque no creo que las cosa que hacemos tengan en cuenta el daño que causan a los vecinos-

Tras recopilar la información que necesitaba Héctor empezó a hacerle preguntas generales sobre la obra y sus jefes para aparentar un poco. Después hizo lo mismo con los otros obreros que estaban ahí antes.
Salió con el último de la caseta y agradeció a todos su colaboración. Les preguntó por la zona de descarga y el laboratorio. Tras caminar unos diez minutos llegó a la zona del laboratorio.

Tras hablar con los obreros se dirigió a la zona del laboratorio, para ver si conseguía alguna foto de los menores y poder charlar con alguno de ellos.
No había nadie alrededor pero vio que en las casetas había actividad así que se dirigió a una de ellas.

Al entrar en el aquel lugar, Héctor, vio a dos jóvenes trabajando, no era como esperaba con batas y con tubos de ensayo. Mas bien parecía que estaban manejando tierra, mojándola, apisándola y poniendola en algunos lugares.

-Buenos días, soy el director de recursos humanos de Taxcorp, la empresa que os paga- les dijo con aire severo. -Necesito que me contestéis a unas preguntas para realizar un informe, algo rutinario- les dijo para tranquilizarlos, al ver las caras que ponían los chavales.

Los dos se miraron, no esperaban ninguna inspección ni anda parecido, generalmente solían sacárselo esos días. Uno miró Héctor y se atrevió a decir -No tiene el cartel- dijo señalando su pecho.

-A ver chaval, no se si me entendiste bien soy el director de recursos humanos de Taxcorp, la empresa que os paga- volvió a repetir haciendo hincapié en esas palabras -Necesito que me contestéis a unas preguntas para poder volveros a llamar para otro trabajo, ¿entendéis?. Y a mi no me hace falta esa estúpida tarjeta de identificación- les dijo con voz severa otra vez.

-Pero- volvió a decir cobardemente.

-De pero nada. A no ser, claro que no quieras volver a trabajar con nosotros. Muy bien el que no quiera colaborar que se largue pero ni se os ocurra volver mañana a trabajar.- "Pero que se habrán creído estos putos adolescentes"

-¿Colaboraréis ahora?- les dijo fijando su mirada en el chaval más rebelde de todos.

-Perdón señor- dijeron los dos a al ves, no debían tener mas de 15 años

-Muy bien, eso me gusta más- les dijo con cierto aire de superioridad -La primera pregunta es cuantos años tenéis y si estáis contentos con vuestra paga- les dijo con cierto tono marcial.

-14- dijo uno y luego el otro, el más rebelde de los dos, dijo -16- se miraron un segundo y el mayor contesto -Nos ayudaría si nos dieran mas dinero-

Esa respuesta es la que venía buscando Héctor durante todo ese rato -Y bien actualmente ¿de cuanto es la paga?-

-Muy bien chicos eso es todo ahora a trabajar, voy a hacer unas fotos de vuestro lugar de trabajo para estudiar las mejoras que se pueden hacer. Vosotros como si yo no estuviera-

Héctor sacó fotos desde todos los ángulos y siempre sacando a los niños. Después de realizar las fotos se fue de la obra realizando alguna que otra instantánea.

Héctor se quedó satisfecho con el trabajo realizado, hoy era uno de esos días en los que se sentía orgulloso de ser periodista. Se montó en la moto y se dirigió a la redacción.
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeVie Mar 02, 2007 3:03 am

Laura salió del aula cargando su guitarra y cargando algo mas... Sentía un peso en el fondo de su estómago. Aquella situación había sido chocante y volvía a estar sola, sola con la única seguridad de que quería sobreponerse a lo que había pasado aunque sentía cierta aprensión...una inseguridad latente que nunca había sentido. Jamás había sentido tanto odio dirigido hacia ella. Jamás le habían agredido físicamente y en apenas unos días un empujón y aquella locura. Fue andando por los pasillos del conservatorio, escuchando el sonido de fondo de algunos instrumentos. Al cabo de unos minutos se dio cuenta que se había despistado y buscó la salida. Tenía que ir a poner aquella denuncia y revivir aquel trance. Cuando se encontraba a la altura de la puerta principal pudo ver a un policía acercándose a él para resolver unas dudas - Hola

-Si?- dijo el policía mirándola - ah, es usted...

"y ya me reconocen y todo...genial" - Sí soy yo - dijo mirando al agente - Me gustaría saber en donde tengo que hacer los trámites de la denuncia - dijo Laura mirando al joven.

-Bueno, deberia ir a la comisaria, mi compañero y yo podemso acercarla si quiere.

- Sí ya - dijo la joven con una sonrisa apagada - ¿Me refería a qué comisaría?... Vaya supongo que los que llevais este caso sois de una en particular.

-Si claro, me olvidaba, es al seccionar nº 27 la que corresponde aquí. ¿Si quiere le podemos llevar nosotros? Pero tendrá que esperar a que llegue mi compañero.

“Seguro que por encima me pierdo" ... Laura asintió - Sí le agradecrçia que me llevaran, muchas gracias - Se apartó unos metros, aprovechando la espera del otro policía y tomó el teléfono móvil marcando el número de Erick...Necesitaba hablar con alguien... tal vez tener a alguien que le acompañara si pudiera...Se sentía demasiado sola en aquel instante después de aquella vorágine de acontecimientos.

- ¿Laura?- pregunto Erik al levantar el teléfono - ¿qué no tendrías que estar en clases ahora?

- Sí tendría - tomó aire un instante para empezar a hablar - Pero unos fanáticos religiosos invadieron la clase de guitarra y... - resopló - y bueno hicieron una especie de piquete para que me fuera del país... me llamaron de todo menos bonita e incluso uno de ellos me atacó - volvió a resoplar

-¿QUE? Laura dime que esto es alguna especie de broma de mal gusto o algo parecido...

- Nunca haría una broma así Erick - tragó saliva.

-Pero eso no tiene sentido! ¿Cómo fue? ¿Qué paso? por el amor de dios Laura explícame por que no puedo entender algo así.

Laura se rió irónicamente - yo tampoco- La chica tomó aire - Bueno pues estaba en clases de guitarra y justamente iba a tocar algo y fue en ese momento cuando me vieron y entraron en el aula. Eran unos 9-10. Empezaron a gritar insultos y luego uno de ellos habló, diciendo básicamente que como hija de Satán que soy - dijo laura aun dolida por aquella alusión- tenía que irme a mi país de infieles. Intenté dialogar, pero obviamente no sirvió de nada y volvieron los gritos, los insultos con mas fuerza. Mi profesor intentó ayudarme pero se vio metido en medio de todo aquello - Laura resopló - Al parecer compre su alma a cambio de placeres carnales como también hice con el español que fue a San Miguel - dijo Laura con una ironía no exenta de hastío - Al final la policía logró echar la puerta abajo deteniéndolos...- Volvió a resoplar - Y fue justo en ese momento cuando el que parecía su líder se me echó encima...No llegó a hacer nada grave porque uno de los profesores intervino... -dijo haciendo alusión a Mauricio-

-Hijos de puta, hijos de puta, y tienen el tupe de andar hablando de superioridad moral a la gente, pero si no son mas que una panda de hijos de puta - Erick estaba furioso - una cosa es andar mintiendo y metiéndose en nuestra investigación, pero esto, esto cruza el limite de lo absurdo, es impermisible!

Laura nunca había escuchado a Erick hablando asi - Sí...así es - dijo Laura, su tono normalmente enérgico o risueño estaba algo apagado - Bueno... Voy a ir con unos agentes a la comisaría nº 27, para plantar la denuncia y esas cosas...

-SI, eso hay que hacer, no pueden quedarse así como si nada- reflexionó un poco intentando calmarse -¿pero tu estas bien no?¿además del mal rato no te ha ocurrido nada malo verdad?

- No nada, estoy bien, solo unos rasguños - miró para su camiseta desgarrada en el cuello- y una camiseta menos. Nada más.

-Bueno, eso es lo más importante, no podría dormir tranquilo si por haberte metido en esto te pasara algo- dejó escapar el aire - al menos estas bien, ahora ve con la policía e intenta relajarte - pensó unos segundos - Espera no quieres que mejor te acompañe?

Laura escuchó aquello y realmente no le apetecía estar sola en aquel momento. No tenía ganas de darle vueltas a la cabeza en caliente porque sabía que aquello le podía jugar una mala pasada - Pues, la verdad, si no estás muy ocupado... te lo agradecería - afirmó encendiendo un cigarrillo a continuación.

-SI, no te preocupes, quieres que pase a buscarte por el conservatorio o que vaya directamente a la seccional?

- Ya voy con los agentes a la comisaría...mejor allá entonces.

-Esta bien, tu trata de relajarte-
dijo mas para si que para Laura - estaré allí enseguida nº 27 dijiste verdad?

El oficial se acercó hacia Laura esperando que ella terminara de hablar. Laura sonrió levemente escuchando a Erick - Sí, sí nº27... Nos vemos ahí entonces... - . Al cortar la comunicación, miró al hombre y siguió sus pasos.

El oficial la guió hasta la patrulla donde otro policía esperaba sentado en el asiento del conductor, fue un viaje corto, pero hizo pensar a Laura en si había hecho bien en comprar un auto, hasta los policías daban miedo atrás de un volante...

Parecen vigueses conduciendo pensó Laura. El viaje había sido corto pero había bastado para que su mente se pusiera en funcionamiento. Aquello estaba superando todos los limites de lo razonable... Semejara que estaba viviendo en un mundo paralelo en el que la razón había desaparecido por completo. Realmente la investigación valía la pena...pero tenía realmente sentido arriesgar su integridad física? En qué cabeza cabía que la gente actuara así? Parece que me he trasladado en el tiempo a la época de la contrarreforma... Me han intentado pegar...me han denigrado por una simple investigación. Solo falta una hoguerita y listos....No tiene sentido...no tiene sentido...
Su mente se agarraba a la razón y no conseguía ver ni un ápice de esta en lo que le estaba sucediendo. ¿Pero me puedo dejar derrotar porque ellos no opinan como yo? ¿Dejarme vencer como si fuera una colaboracionista? Ellos tenían que luchar por la libertad...” pensó Laura " y tu también" pensó contestándose a sí misma "por la libertad de pensamiento, de culto... Dios esto está superado desde las revoluciones liberales ¡Es increíble! ¡Increíble!


Al llegar ala comisaría Laura pudo ver en la puerta a unos metros, el auto de Erick y al mismo catedrático esperándole en la puerta.

Laura bajó del coche, saludó a los agentes y se acercó a Erick - Gracias por venir - dijo con sinceridad.

Erick le puso ambas manos en los hombros y Laura podía darse cuenta que si le daba lugar a ello, la abrazaría, la miró de arriba a abajo -¿estas bien?- vio el cuello rojo y no pudo evitar decir -mira lo que te han hecho.

Lo miró sonriendo ligeramente, agradeciendo el gesto paternalista de Erick y sin contenerse, expulsando las normas sociales de su cabeza, abrazó al catedrático. Necesitaba sentir la protección de alguien. Hubiera deseado mas que nada en el mundo poder tener a su madre cerca de ella en aquel momento...pero estaba al otro lado del atlántico y no quería que se enterara de todo aquello. Sin embargo era Erick...No era ni su madre ni Mauricio... Algo le impedía dar rienda suelta a sus tremendas ganas de dejarse llevar.

A continuación y tras separarse dejó escapar una muy breve risa irónica [color:6c5d=seagreen:6c5d] - He pasado por mejores momentos - dijo negando con la cabeza.- Gracias - [/b]volvió a reiterar. Se había cansado de decirle a todo el mundo que estaba bien...porque no era así.

-Ya, ahora estas bien Laura- dijo mientras la contenía como un padre, sin él saberlo, como el padre que Laura había perdido, se separaron y la volvió a mirar a los ojos.

-Ya, ahora estas bien Laura- dijo mientras la contenía como - No tienes que agradecerme, creo que a diferencia de....esos, soy un ser pensante y hago lo que cualquier persona con dos dedos de frente haría.

- Si bueno lo de esos... Lo de esos - dijo Laura adoptando un tono que mezclaba rabia e incomprensión - Es un sin sentido, una locura... Nunca vi tanto odio reunido en vivo y en directo. Parecían perros rabiosos en vez de personas, unos descerebrados... Tanto odio y contra MI - dijo parpadeando ligeramente y negando - No lo entiendo... Es una locura...que lleguen a las manos...Es una locura - dijo Laura con nerviosismo...Estaba descargando el peso que tenía encima - En pleno siglo XXI que hagan esas cosas ...Y una cosa es que se metan conmigo, que me llamen puta, satanista y no sé que otras gilipolleces...pero otra...otra... Es que se metan con mi padre! MI padre - dijo Laura negando y con evidente signos de incredulidad -Por Dios, en donde se ha visto que en el año 2006, no haya siquiera libertad de pensamiento ni de culto! ¿En dónde se ha visto? Merde alors... Mira que son pesaditos los franceses con la sacrosanta revolución de las narices...pero en mi vida la eché tanto de menos - resopló para tranquilizarse después de soltar todo aquello de un tirón.

-Tranquila Laura, inadaptados hay en todos lados, pero como personas de razón tenemos que lograr educar a al gente para ese tipo de "pensamiento" retrogrado y sin sentido desaparezca, lo que no te mata te hace mas fuerte. Laura, vas a pasar momentos muy feos durante tu vida profesional, pero se que vas a sobreponerte y salir adelante aprendiendo de ello, después de esto, pocas cosas pueden ser tan terribles.

- Sí...la verdad es que después de esto mientras no me apalicen o me intenten matar, creo que pocas cosas pueden superarlo - dijo Laura con ironía negando... Tomó aire un instante y cerró los ojos .- Lo siento me he dejado llevar. Adoptó un tono mas sereno - Mientras solo se metan conmigo no habrá ningún problema...Lo que deseo ante todo es que nada de esto pueda llegar a mi madre...y sinceramente me fastidia que la prensa este en medio...porque hoy en día las noticias viajan demasiado rápido - dijo con una mueca de fastidio.

-Pero tu estás bien, eso es lo importante, seguro si tu madre se entera se preocupara, por eso seria mejor que tu misma se lo digas así sabrá que te encuentras bien, o si quieres puedo hablar con ella para tranquilizarla.

- Sí, no, no hace falta en principio... Eso creo... No lo había planteado desde esta perspectiva. Es que al estar tan lejos... - dijo negando brevemente, alzó levemente una ceja tomando aire - Bueno creo que lo mejor será que pasemos adentro –

-Si vamos, no hay que olvidarse de lo importante de este tramite también, vamos, pasa y trata de olvidarte de todo- dijo poniéndole una mano en la espalda y dejándole pasar.

Laura tomó aire...No sabía muy bien que se encontraría en aquella comisaría. Tal vez tuviera que volver a ver a aquellos descerebrados... Con un paso que simulaba la tranquilidad se encaminó puertas adentro.


Última edición por el Vie Mar 02, 2007 3:14 am, editado 2 veces
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeVie Mar 02, 2007 3:04 am

Cuando entraron en la comisaría, Laura y Erick, se encontraron con que había varios oficiales tomando declaraciones a la mayoría de los que habian perpetrado aquel ataque en el conservatorio. Ademas, pusideron ver a la directora del cosnervatorio que hablaba con uno de los oficiales y junto a ella...¿era posible? Si, si lo era, junto a ella se encontraba la tan querida para laura, profesora de Historia de la musica.

Laura al ver la escena entornó los ojos brevemente, miró para Erick y dijo sin poder aguantar - Lo que me faltaba hoy - dijo negando.

Erick escuchó a Larua y la miro sion enteder -¿pasa algo?

-Ah Laura- dijo la directora - veo que ya has venido para hacer lso tramites, nosotras llegamos a hace unos minutos, no quisimos perder el tiempo

La chica sonrió levemente "que cercana... ahora soy laura...me trata de tu..." - Claro, es algo necesario y agradezco el apoyo del conservatorio en este asunto. Al menos queda gente con cordura en este mundo - dijo tomando aire a continuación - Por cierto les presento, al Dr. Erick Pérez que tuvo a bien acompañarme, aunque usted - dijo mirando para su "querida" profesora de Historia de la Música.- ya tuvo el honor de poder asistir a sus clases. –

-Un placer- dijo al directora y la docente le imitó -el gusto es todo mío- respondió el catedrático saludando a ambas, luego se dirigió a Laura -Y no digas esas cosas, ya te dije que hago lo que cualquier colega haría en esta situación, estamos juntos en esta investigación después de todo.

Laura sonrió levemente y se sorprendió escuchar a Erick diciendo aquello en público, se giró hacia el catedrático - Bueno, y como yo digo siempre, aunque a ti te cueste creerlo no todo el mundo es así y lo sé, porque lo he visto. Así que como ya te he dicho también en otra ocasión es de bien nacidos ser agradecidos.

Solo Laura pudo notar la lacerante mirada de su profesora mientras hablaba, pero esa sensación se desvaneció cuando el mismo Erick fue quien le hablo a la docente pero no sin antes negar con la cabeza levemente ante la terquedad de Laura, pero evidentemente satisfecho con su forma de ser -¿Así que usted ha sido una de las victimas de mis torturas?

-Por favor no diga eso- dijo la mujer sonriéndose -Sus clases fueron siempre de lo mas interesante, incluso para mi que soy especialista en el periodo medieval, aunque bueno solo he tenido el placer de estar en su clase durante 2 cuatrimestre y un seminario de doctorado- Erick sonrió y asintió, la historiadora sonreía de tal forma que se delataban sus nervios, entonces el catedrático dijo -Pero bien, no nos dispersemos que la señora- mirando a la rectora- ha de tener mucho que hacer y no me gustaría hacerle perder el tiempo, además es importante que hagan estos tramites de una vez, cosas como estas no pueden pasar en este país ni en ninguno.

"Qué asco me das... esa mirada... que falsa...Ay que emocion! estás hablando con Erick... pelota... Pero no le dices a la cara lo que me contaste el otro día. Al menos agradezco que no me saludaras siquiera asi ni siquiera tenemos que mantener las formas" Realmente Laura soportaba cada vez menos la presencia de aquella mujer. Asintió a lo que dijo Erick y fue acercándose al mostrador junto a uno de los policías para iniciar los trámites.

Los tramites no fueron rápidos pero si simples, no había mucho mas que declarar y dar algunos datos, llevaba tiempo pero no presentaba ninguna complejidad y menos para alguien que para poder acceder a unos papeles había tenido que pasar por todo tipo de tramites burocráticos. Pero en este caso todo estaba claro, la misma policía había sido testigo de al agresión, además las autoridades del conservatorio estaban allí confirmando todo.

Laura empezó a realizar aquel papeleo. La burocracia siempre era igual de tediosa pero casi se podía decir que se había acostumbrado a aquello. Con cierta solvencia acabó con ello. Tomó aire y sonrió mirando para Erick: - Creo que ya nos podemos ir - dijo algo aliviada. Le apetecía terminar con aquello e intentar olvidar todo aquel asunto convirtiéndolo en un especie de mal sueño irreal.

Los cuatro se dispusieron a salir juntos habiéndose sacado de encima el peso de aquella denuncia, seguramente aquellos hombres no estarían ,mucho tras las rejas pero seguro tendrían un buen susto.
Peor todo el alivio se esfumó cuando la puerta de la comisaría se abrió. Afuera había un alud de gente, luces y ruidos....periodistas

La puerta se abrió y Laura que ya estaba con la mano preparada para tomar su cajetilla de tabaco, tuvo que cerrar los ojos. Un flash le acababa de estallar en la cara. "et non... Et merde... Raz le bol, hasta el gorro" , pensó Laura con hastío "Lo que faltaba, Putain".
Erick cerró los ojos al verse cegado por una de esas parpadeantes luces que estallaban frente a ellos.

Había que intentar fraguarse paso entre aquella multitud, entre el griterío y los flashes. Laura no alcanzaba a entender nada de lo que le decían. "Esto es una locura... una locura". La chica tomó aire intentando avanzar, quería llegar al coche de Erick y olvidar aquello cuanto antes, pero parecía que los elementos estaban en su contra ella aquel día, aquel mes... desde que había iniciado su vigésimoséptimo año de vida.

Los micrófonos, teléfonos y grabadoras la rodearon impidiéndole el paso "¿Es usted la investigadora de la UNAM que encontró los antiguos pergaminos? ¿Es verdad que la insultaron y hasta intentaron violarla? ¿Es cierto que se acostó con su profesor de guitarra? ¿volverá a España o seguirá adelante con la investigación?" eran algunas de las miles de preguntas.

Laura se hallaba inmiscuida en contra de su voluntad en medio de un huracán mediático. Nunca había tenido que padecer aquel acoso y aquella falta de espacio le estaba empezando a agobiar... Pero no podría salir de ahí sin hablarles. "Venga Laura, solo un esfuerzo más y ya está... podrás ir a casa tranquilamente". [color=seagreen]" Tomó aire antes de empezar a hablar:

[color=seagreen]"- Soy investigadora de la UNAM en efecto, colaboradora del Dr. Erick Pérez. Durante el transcurso de nuestra investigaciones encontramos unos documentos, en el monasterio de San Miguel. He hablado de esos manuscritos a un compañero vuestro, siendo el artículo publicado en el Universal del pasado lunes. La clave Fioraventi trata de alquimia y como seres razonables tenemos que entender todos que el único sentido plausible que tiene un manuscrito alquímico en el mundo “real” es acercarse al conocimiento, a la ciencia pura
"- insistió en las últimas palabras
- Todos desearíamos que se pudieran hallar los remedios a muchas enfermedades que acosan el mundo, tal como pretendían los alquimista a través de la mítica piedra filosofal, pero obviamente es algo totalmente improbable. Hablar de alquimia es hablar de filosofía y de ciencia, el origen de la química moderna y que yo sepa ni la filosofía ni la química son temas heréticos. "- Laura tomó aire y prosiguió
" - Con esta investigación solo pretendemos poner en valor el patrimonio histórico mexicano a través del hallazgo de un importante documento para la ciencia histórica. No se pretende en ningún caso dañar a las instituciones eclesiástica y tampoco se pretende hacer nada en contra de la moralidad. - Laura hizo una breve pausa antes de proseguir - Hoy un grupo invadió una clase en el conservatorio nacional de México, utilizando el insulto e incluso la fuerza para intentar detener esta investigación. Me agredieron verbalmente e incluso hubo un intento de agresión física para detener una investigación histórica avalada por la Universidad y el ministerio de cultura a través de su secretaría de Patrimonio. Obviamente, la fuerza, los insultos y la coacción no van a hacer que vuelva a España.

-¿Conocía a sus agresores? ¿Son ciertas las versiones que dicen que aquel impostor que se presentó en San Miguel era un conocido suyo?

- No, no conocía ni a mis agresores ni a la persona que fue a San Miguel.- Laura pensó en Héctor, por primera vez estaba mintiendo. Sin embargo no sentía remordimientos... Aquello no había sido idea suya ni mucho menos. Solo había ayudado a una persona en apuros - No conozco a los casi 45 millones de españoles como entenderán - dijo con convicción. Le chocaba que el simple hecho de que Héctor fuera español la señalara como la conspiradora.

-Uno de los monjes de Atlatlahucán ha dicho que usted se comportó de mala forma y les faltó el resto ¿qué dice de eso?

Laura escuchó aquella pregunta - Yo no falté al respeto a nadie. Y no entraré en una guerra dialéctica respecto al comportamiento de los hermanos de los monasterios del valle hacia mi persona.

-Esta diciendo que ellos sí le faltaron el respeto?

Laura miró al periodista - Nunca he dicho eso y si me disculpan creo que entenderéis que después de los acontecimientos de hoy desee descansar un poco. Gracias por su atención - dijo Laura de forma educada.

Erick había pasado desapercibido hasta el momento, pero fue visto entonces y ante la negativa de Laura se avanzaron con nuevas preguntas contra él.

Cuando la colmena de periodistas se desplazó hacia Erick, Laura tomó aire y cerró los ojos un instante, intentando abstraerse de aquel lugar "Es qué no nos van a dejar en paz en la puta vida! Quiero irme a mi casa... No es tan complicado".

Erick respaldó las palabras de Laura e intentó sacarse a los periodistas de encima lo más rápido que pudo diciendo que no podía responder más, que tenia importantes asuntos que atender. No le fue fácil librarse, pero lo hizo logrando llegar al auto junto con Laura para entrar y avanzar a pesar de que aun se agolpaban en las ventanas.


Última edición por el Lun Mar 05, 2007 2:00 am, editado 3 veces
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Mar 05, 2007 1:18 am

Una vez que llego a la redacción, llamó a Mouriño.

-Héctor- respondió Mouriño tomando el teléfono

-Hola Jose, mira me gustaría poder hablar contigo en tu despacho tengo algo que merece la pena ser visto.-

-Tiene que ser hoy o puede esperar a mañana?-

-Hoy, merece la pena tío te lo aseguro, no te arrepentirás- le dijo apresuradamente.

-Está bien esta bien, vente en media hora ¿te parece? croe que puedo hacerte un lugar-

-No te arrepentirás- Héctor cogió el dvd con la grabación del alcalde del PAN montándoselo con su secretaria más el material de la Taxcorp, si sus sospechas eran ciertas el ayuntamiento estaba metido en el ajo.

A la medio hora se presentó en el despacho de Mouriño.

-Hola amigo, ¿qué tal todo?- le preguntó más por formalidad que otra cosa, lo que realmente deseaba era llegar al grano.

-Bien, a las corridas, como siempre, ya sabes-

Héctor se sentó -Mira antes de que veas cierto material que te he traído necesito saber que sabes sobre Taxcorp, la constructora, ¿quién está detrás de ella y si hay algún miembro del ayuntamiento de D.F. con ellos-

-Te lo puedo averiguar, pero así en el aire no puedo decirte que sepa mucho ¿por que?-

Héctor frunció el ceño, "esperar siempre esperar" -Te lo diré cuando sepas algo, pero de adelantó mira esto- Héctor le puso el dvd en el ordenador de Mouriño.

Los ojos se le fueron al ver esas imágenes , no podía creerlo -¿Que es esto? es una broma ¿verdad?-

Héctor rió, era tal como se imaginaba. -Pues ya ves, si lo que pienso es cierto con la Taxcorp, entre esto y la investigación que estoy haciendo...- hizo una pausa para darse de interesante -os brindare D.F., podréis volver a tomar las riendas de la ciudad-

-¿Como conseguiste esto? esta trucado verdad, no puede ser real-

-Que no, que es real, esa chica de ahí es su secretaria, si sacamos esto a la luz su reputación caerá por los suelos, eso más lo de la Taxcorp porque estoy seguro que el ayuntamiento tiene algo que ver en esa movida. Bueno que opinas te interesa- Ahora era el momento que esperaba Héctor, si le interesaba a Mouriño querría algo a cambio.

-Pero esto es una bomba, y tu eres periodista, ¿que haces que esto no esta en todos los canales de televisión ahora mismo?-

"Perfecto" -Pues muy sencillo reservarlo, por supuesto si saco esto, saldréis muy favorecidos y yo quiero algo a cambio, en este mundo no hay nada gratis-

-Si claro, no te preocupes, eso lo veremos-

-Mira a cambio de esto, yo simplemente querría ser el director de informativos de la cadena pública, no es mucho lo que pido, ¿no?. ¿A que el monigote que tenéis ahí no ha sacado nada de esto?-

-Bueno, pero no puedo hacerlo así como así hombre, no soy el dueño de todo, y no puedo andar metiendo y sacando gente a mi antojo-

-Si me imagino que tu no podrás, pero si que puedes decirle a la gente oportuna lo que tengo. Imagínate este triunfo puede ser tan tuyo como mío Jose te presentarías ante tu presidente como el hombre que volvió a tomar D.F. para el PAN- Le fastidiaba tanta lentitud e indecisión, adonde iba a ir este gobierno con gente así.

-Bueno, pero necesitaría que primero presentaras la noticia, si ganaras renombre con algo tan fuerte entonces tendríamos al excusa justa para ponerte en ese puesto-

-Muy bien pero entonces ayúdame con lo de la Taxcorp y cuando tengas algo entonces publicare esta bomba, ten en cuenta que lo de la Taxcorp es muy probable que implique al ayuntamiento corrupto de D.F.-

-Si, si ya te dije que iba a averiguártelo, y si, seguro tiene algo que ver, si están construyendo en el DF entonces el ayuntamiento tuvo que haberlos contratado-

-Bien de acuerdo, cuando sepas algo, llámame. Por cierto este viernes vente a cenar a casa te haré todo un guiso de las tabernas-

-¿Guiso de las Cavernas? ¿que es eso, pollo apaleado y hervido?-

-No, guiso de las ta-ber-nas- dijo pausadamente, ante la ignorancia culinaria demostrada por su amigo.

-Y es carne de ternera a la que se le echa patatas, comino pimentón nuez moscada...- Héctor empezó a recitar de memoría todos los ingredientes de esa receta, le encantaba la cocina se sentía como un hechizero haciendo pociones.

-Bueno pues te espero el viernes- dijo para finalizar.

-Está bien, ¿le digo a mi mujer verdad? a mas tardar tendrás lo que me pediste ese día-

-Gracias, nos vemos- Salió presuroso del despacho cuando recibió una llamada de Antía....
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Mar 05, 2007 3:38 am

Los periodistas se agolpaban alrededor del coche. Laura miró para Erick - Por Dios, parece que esto no va a acabar nunca –

-Por favor, parece que fuéramos asesinos seriales o estrellas de rock, como demonios puede juntarse tanta gente por algo así.

Laura se pasó la mano por el cabello echándolo para atrás nerviosamente - De verdad creo que hoy me desperté en un mundo paralelo. Esto es surrealista... Esto no puede estar pasando - dijo Laura en voz alta como si hablara para simisma.

-Pues está pasando Laura, y será mejor que nos acostumbremos si no queremos que nos pase por encima.

Laura resopló brevemente -Sí es verdad..Es solo que todo está yendo demasiado rápido en estas dos semanas... Realmente desde que llegué a México. Deseaba darle un nuevo comienzo a mi vida, pero esto está yendo demasiado rápido - dijo la joven reiterándose - Creo que pocas veces en mi vida deseé tanto poder tener un respiro, un breve intermedio, ir al pueblo de mis abuelos una semana con mi familia.

-Tranquila, lo tendrás, tendrás el respiro que necesitas, y yo también, ahora mismo estamos en al fase mas agobiante, pero serán solo unas semanas mas, a la prensa ya no va a interesarle y eso nos va liberar mucho, además tenemos mucho que investigar y eso si bien no te da un respiro, si te da algo de paz.

Laura sonrió - El otro día en el archivo de la inquisición me sentí al fin tranquila. Es que lo de los monjes en los monasterios es muy desagradable... Y dios estos periodistas se enteran de todo... Es que el otro día perdí un poco los nervios... Me estuvieron mintiendo una y otra vez, tardando un montón en pasarme la documentación, vigilándome, mirándome con odio - dijo Laura negando.

-Sí, recuerdo el día que me llamaste, estabas a punto de estallar, ahora me imagino lo que debió ser, ya he visto hasta donde puede llegar su abad, no quiero imaginar los seguidores...

- Es que así ni investigando hay paz... Ni en el conservatorio tampoco - Laura entornó los ojos - Raz le bol - dijo ya sin poder aguantar - Ni Historia, ni música... Raz le cul - Laura se pasó la mano nerviosamente por la frente –

-Tampoco lo lleves al extremo, esto de hoy ha sido increíble y no croe que vuelva a repetirse, además esos fanáticos solo lograran ponerse a al gente en contra con estas estupideces, tranquila.

- Pero es que estoy harta! Cansada, aburrida, de ver que cada vez que voy a un sitio para ver un documento me miren mal, como si yo hubiera robado algo en mi vida, como si a MÍ, se me fuera a ocurrir mancillar un documento. Y tener que guardar siempre las apariencias, mantener la calma... Mantener las apariencias - dijo Laura pensando en Mauricio.
La chica negó con la cabeza y se rió sola irónicamente. - Y por encima van unos locos y me insultan, machacan la memoria de mi padre, me intentan pegar. - Laura volvió a negar - Pero no puedo decirle a esos periodistas que esto es un mundo en el que la razón ha desaparecido, que la Iglesia está actuando como institución retrógrada. Que por encima de ser el opio del pueblo, lo asesina diciendo barrabasadas... No uséis preservativo niños africanos... ¿Por qué tardar mas de 50 años en condenar el holocausto?...total para qué...si sólo murieron seis millones de personas pero no eran mas que los descendientes de los que provocaron el asesinato de Jesús! Pero NOO, son santos varones y yo no soy mas que la meretriz de Astharoth y la hija de Belcebuth! - Laura estaba hablando de un tirón sin darse siquiera cuenta de a quien estaba hablando. Tenía que decir aquello a toda costa... Ya no podía aguantar.

Erick buscó un lugar y detuvo el auto al ver aquel "ataque de nervios" que le había dado. Laura estaba desbocada largando todo lo que tenia dentro, la tensión estaba haciéndola trizas y él no quería eso. Le tomó ambos hombros cuando terminó de hablar- Tranquila Laura, ya esta ¿estás mas tranquila ahora? Tenias demasiadas cosas dentro, tenias que soltarlo ¿te sientes mejor?

Laura notó como se posaban las manos de Erick en sus hombros. . Su corazón se había vuelto a desbocar y sintió un hormigueo en las manos y piernas. La opresión del pecho la atenazaba. - Lo siento - dijo mientras apartaba suavemente las manos de Erick y se recostaba en el asiento del coche, cerrando sus párpados. Tomó varias respiraciones profundas y acompasadas cerrando los ojos - Lo siento - volvió a decir intentando mantener el compás de su respirar.

-No lo sientas, esta bien, solo relájate, ya esta, tenias que soltarlo ¿te sientes mejor? trata no guardarte las cosas, no te hace bien.

Laura escuchó las palabras del catedrático. Seguía respirando hondamente con los párpados cerrados. "Tranquila Laura, tranquila...solo es una crisis de ansiedad...una taquicardia...solo eso...No te va a dar ningún infarto, ni nada por el estilo... tranquila". Se mantuvo así durante un tiempo indeterminado para ella, dejando que su respiración fluyera, notando como poco a poco su corazón volvía a la normalidad.
Al cabo de ese breve pero intenso y reparador lapso de tiempo Laura se reincorporó viendo la mirada del catedrático posada sobre ella. Sintió cierto rubor por lo acontecido - Siento esto, de verdad, lo siento - dijo la chica avergonzada.

-No Laura, no te preocupes, no tienes por qué disculparte ¿estas bien? ¿te sientes mejor? ¿Quieres que vayamos a una farmacia para que te tomen la tensión?

Laura lo miró y negó - No, ya estoy mejor. Sé que no lo debería hacer pero me encantaría llegar a casa y fumarme y cigarrillo - dijo riéndose, intentando quitar importancia a todo lo sucedido.

-Con esos argumentos no haces que más que dar peso a la idea de que mejor vamos a la farmacia- puso el auto en marcha - vamos total serán dos minutos y ambos estaremos mas tranquilos, y podrás relajarte.

Laura lo miró "este es peor que yo" - No en serio, estoy bien. Soy mujer, tengo menos de 50 años, no tiene porque pasarme nada. Solo fue una taquicardia, nada más. Solo eso...

"Solo eso" dijo Laura cuando la melodía empezó a surgir desde su teléfono, alguien estaba llamando....

El tono del padrino que Laura había asignado a su madre a modo de broma como matriarca familiar que era estaba sonando. - Uyy - alcanzó a decir Laura mientras cogía el teléfono del bolso - Hola mamá -

-Mi niña- dijo con tono maternal desesperado, antes de que lo dijera Laura ya lo sabia, las noticias habían corrido mas rápido que la peste - te acabo de ver en al téle ¿estas bien? ¿qué pasó? ¿qué hiciste? ¿qué te hicieron?

Laura sonrió escuchando a su madre - Nada mamá estoy bien... No fue nada, ya sabes, los de la prensa exageran todo - dijo Laura intentando suavizar la situación.

-LAURA TE VÍ!!! estabas toda desgarbada con la ropa hecha jirones!!!

Laura apartó el auricular del teléfono un segundo [color=seagreen]- Mamá no grites. Vale, vale... A ver... -
quería suavizar la situación como fuera pero le era totalmente imposible - Bueno ¿qué es lo que sabes? Así te explico y entiendes todo bien.

-Como que qué sé? No sé nada de ti en todos estos días y de repente apareces en la televisión con la ropa deshecha y con un problema con el Vaticano por quien sabe por qué !! Laura por Jesucristo dime algo!!!

Laura se echó su mano libre a la cabeza y negó [color:1faf=seagreen:1faf]- A ver tranquilízate, estoy bien. Eso primero. Bueno a ver... Hace cosa de dos meses, te acuerdas que dije que habíamos encontrado algo muy interesante ¿no? - dijo a modo de pregunta retórica - Bueno pues eso tan interesante es la clave fioraventi... te hablé de eso alguna vez...-
Laura intentó resumir todo de forma sencilla clara y concisa acabando su relato con el intento de agresión del conservatorio. Laura cerró los ojos esperando los gritos histéricos de su progenitora - Pero lo arrestaron y no me pasó nada. Puse una denuncia y ya.

- ¿¿¿Pero cómo puede ser que entren en la clase y te atacaran??? ¿¿¿Qué país es ese??? Supongo que habrás denunciado al conservatorio... mira si te hubieran hecho algo.


- Mamá - dijo Laura negando - El conservatorio no tiene culpa de nada... De hecho ellos también los denunciaron. No tienen culpa de que 10 personas entren por la fuerza en una de sus aulas. Como entenderás no es un cárcel de alta seguridad y no tienen puestos a 10 vigilantes... Normalmente NO pasan esas cosas.

-Pero cuando has visto que algo así pase aquí, allí deberían estar acostumbrados si pasó una vez antes debió de pasar en algún otro lado. Tienen que tomar medidas!!!

- Mamá - dijo Laura resoplando - En la facultad de Historia de Santiago son especialistas en piquetes... Si ya sabes que hasta compartí clases con la chica esta que al final puso la bomba el día del apóstol. Realmente, te aseguro que el ambiente del conservatorio se parece más al de un colegio de secundaria que a un grado superior... Si me siento como una niña allá, con lo de las faltas...el típico rigor al estilo colegio... Lo que pasó hoy fue porque vino una panda de desalmados.

-Bueno ¿y cuando vas a decirle a tu director de Historia que te retiras de eso de al clave no sé que?

- Pero ¿qué estas diciendo? Así no me has educado... Atente a las consecuencias de lo que me has ido diciendo a lo largo de los años... "No puedes ceder ante la primer adversidad bla bla bla " - dijo Laura haciendo una burda imitación de su madre.

-Laura Saavedra Castro no me hagas burla, soy tu madre. – dijo la mujer en un tono seco.

Laura se tomó la cabeza con una mano - Vale, vale, no me llames por mi nombre completo que odio eso, parece que tuviera 15 años ... lo siento.- hizo una breve pausa -Pero no puedo ceder al chantaje mamá! Entiende eso.

-Y tampoco puedes ir en contra de tus creencias hija ¿quieres que te excomulguen? ¿quieres condenar tu alma por un papel?

- Ay Mamá! Si sabes muy bien que no son mis creencias, para empezar, sabes de sobra que soy atea...ni agnóstica soy... atea - recalcó Laura - ¿Y por qué me van a excomulgar? si no hice nada malo... Te llamó la abuela toda preocupada con eso ¿Verdad?- Laura se rió irónicamente - Uy en la aldea no van a hablar de otra cosa, con lo aburridos que están. Por fin van a encontrar algo nuevo que contar.... la pequeña Castro a metido al fin la pata... Estarán felices. - dijo Laura con ironía.

Laura no hables así!- le reprendió - Cómo puedes preocuparte tan poco por tu alma!

A ver mamá... si dios existe y si es tan buena persona como dicen y es omnisciente.... sabrá de sobra que no soy ninguna mala persona ¿no? Pues a mi con tener la conciencia limpia, y respetar mis propios valores de los que te recuerdo gran parte son tuyos, me vale.

-Y que hace el tal Pérez a todo esto? Es que piensa hacerte hacer todo el trabajo y que te ligues todos los problemas e insultos para luego llevarse al gloria???

Laura resopló - No mamá, para nada, todo lo contrario... y lo que te dije hasta ahora sigue siendo si cabe más valido. Está aquí conmigo... me ayudó en todo el tema de los trámites y mucho más. ¿Es que no salió en la tele?... No me digas que sólo me pusieron a mí - dijo Laura frunciendo el ceño.

-Sí, sí que apareció, pero se notaba como se escudaba atrás de ti y cuando le toco el turno de hablar no dijo nada, tuviste que decirlo todo tu...vaya catedrático.

- Mamá no. No es así... Es todo lo contrario, sigue siendo lo mismo sino mejor que lo te conté el día de mí cumple - Laura no quería que Erick notara aquello.

-Lo mismo sino mejor, no te entiendo Laura de qué me estas hablando?

Laura resopló " et merde maman.... Si te he dicho que esta conmigo" - Pues que la situación es aun mejor respeto a ese tema - dijo la chica... a ver si se da cuenta...

-De qué tema me estas hablando laura, por favor sé clara, no intentes esquivarme.

- De nada mamá déjalo... –

-Ah claro, ahora me ignoras, te desconozco Laura, tu no eras así, ese hombre te esta haciendo mal, primero te metes en esos problemas y ahora me tratas como me tratas

- Et mince Maman NON... Non! No es así te estás equivocando al mil por mil. Pero mira ya me da igual... Con el día que tuve y me vienes con eso ahora! Pues hablemos claro. Erick está, aquí a mi lado, no quería dejarte quedar mal, por eso estaba dando tantos rodeos... Pero tu te lo has buscado. Y te aseguro que el trato que me da Erick es el que deseas para mi. Es justamente lo que deseas. Y para tu información dentro de todo el tema de la investigación justamente se ha quedado con lo más desagradable ahorrándome mucha burocracia. Cuantas veces me dijiste eso de que no se puede hablar sin saber. A la que no reconozco es a ti. ¿Pero qué te pasa? - La frágil paciencia de Laura en aquel día se había agotado.

Erick miró a Laura al no poder evitar oír eso, le hizo un gesto sin hablar como si le preguntase si prefería que detuviera el auto para hablar mas tranquilamente con su madre, que a su vez contestó a su hija - Laura te das cuenta de como me estás tratando, claro ay se que no te importamos los de la familia tanto como tus cosas, pero al menos podrías tenerme algo de respeto.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Mar 05, 2007 4:17 am

Laura miró a Erick y afirmó, se cogió la cabeza entre las manos y volvió a tomar el auricular - Maman, no me vengas con esto hoy por favor... Por favor! Qué quieres que haga! Pues mira, voy a serte franca. Hoy hubiera deseado mas que nada en el mundo poder estar contigo. Pero oh! hay un charquillo de nada llamado océano atlántico entre nosotras. Hubiera deseado estar contigo que Esteban no estuviera en Barcelona, ver a los abuelos, a los tíos,... Pero no, estoy lejos de todos vosotros. ¿Y tu crees que la primera dolida por eso no soy yo? Si es verdad yo soy la que decidí venirme aquí a México pero después de lo de Marcos sabes muy bien que era lo mejor para mi salud mental. Estar en Santiago solo me hacía daño. Lo sabes de sobra... Tenía que cambiar de aires y viniendo aquí tuve una gran oportunidad. Y también sabes que desde el principio el único freno para venir... eras tu...y lo hablé contigo y tu me dijiste que adelante. Así que ahora no me vengas con victimismos. Hoy NO por favor.


Erick buscó un lugar rápidamente y estacionó el auto. Le hizo un gesto con al mano a Laura y bajó para dejarla tranquila dentro, y que pudiera hablar en privado.
-Claro, pero yo no sabía que ibas andar metiéndote contra la iglesia, tampoco sabia que México era un lugar tan peligroso y menos sabía que ibas a venirme con estos tratos. Si no llamo yo tu no eres capaz de levantar el teléfono y ver como estoy, segura y pensabas no decirme nada de todo esto.

Laura se levantó y salió del coche negando con la cabeza a Erick para que pudiera estar en su coche. Encendió un cigarrillo - Mamá por favor no seas como ellos! Yo no me meto con nadie... Lo sabes de sobra... si solo quiero investigar unos papeles. Nada mas... No hago nada raro mamá solo leer papeles y archivos. Lo que hacía en Santiago. Y vale...no te conté nada al principio porque justamente no quería preocuparte. Es verdad... pero justamente Erick hoy fue el que me hizo entrar en razón y me hizo entender que probablemente te fuera a enterar... Pero ni siquiera he llegado a casa mamá. Desde que pasó todo esto no pude descansar todavía...

-Ah claro y si no hubieses tenido ningún problema entonces no me llamarías ¿verdad? ¿eso es lo que me estas diciendo?

- Te llamaría en breve, el fin de semana supongo... si no hubiera habido problemas... Pero desgraciadamente los ha habido y tu no me estás ayudando para nada. No te das cuenta que prefieres creer lo que dicen unos curas que lo que te cuenta TU hija. Te he fallado alguna vez Mamá! No estuve siempre ahí cuando me necesitaste! ¿He sido una mala hija acaso?- dijo Laura con rabia contenida. Tantos años intentando ser esa hija perfecta... y se olvidaba de aquello en un segundo

-Claro que no es así. No creo en unos curas mas que en mi hija , pero yo me preocupo por ti, precisamente por que soy tu madre y no quiero que el pase nada a mi hija.

- Pues sigue confiando en mi por favor. Si te preocupas por mi, no eches mas leña al fuego. Como entenderás no he tenido hoy precisamente el mejor día de mi vida y me gustaría al menos sentir que mi familia me apoya.

-Claro que confío en mi hija, todos te apoyamos, pero no quiero que hagas una locura hija.

- ¿Una locura? Pero si yo no he hecho nada mamá. Los locos son los que me atacaron hoy, no yo.

-Solo te digo que seas precavida, aunque no te guste el Vaticano no va metiéndose en cualquier lugar porque sí, son una institución importante y respetable.

- Mamá - dijo Laura ya con cierto hastío... "que manía con tratarme toda mi vida con una cría" - Sé con quien estoy tratando, no por nada llevan 1700 años en la cúspide del poder. No voy a hacer locuras. Entiende que mi intención no es siquiera molestarlos. Yo solo quiero seguir con mi investigación tranquilita sin meterme con nadie. ¿Estás más tranquila ya?

-Te conozco bien Laura, puedes mentirle a los periodistas pero no a mi, sé que algo le hiciste a esos monjes.

- A ver llevaban todo el día metiéndose conmigo. Me mintieron no sé cuantas veces, tardaban mas de lo humanamente posible en traerme las cosas...dejaron sobrentender mas de una vez que Yo les iba robar... Pues que quieres que te diga, perdí los nervios e hice un par de pequeñas maldades. A uno de los monjes que estaba leyendo el código Da Vinci y que no paraba de mentirme le conté el final del libro - negó un segundo - ya sé que actué como una cría... y luego les dije que tenían que hacer una confesión multitudinaria... por lo de las mentiras...pero nada mas.

-Ay Laura, Laura- dijo negando – solo a ti se te ocurren hacer esas cosas, son monjes deberías tenerles un poco mas de respeto

Laura se rió - Me dijeron casi a la cara que era una ladrona! Yo respeto a la gente lo sabes, pero ellos a mi no me respetan... y es normal que pueda llegar a perder los nervios. Hasta a mi me pasa... No soy de hierro, no soy inmune aunque lo intente.

- Bueno, pero la próxima vez ya lo sabes, tendrás que tener mayor cuidado y paciencia.

- La primera interesada soy yo.- Laura se calló un instante antes de seguir - Bueno mamá, me está esperando Erick, y me apetece llegar a casa y descansar un poco... Es que eso de ser una estrella mediática cansa - dijo Laura riendo intentado quitarle nuevamente hierro al asunto.

-Ah claro ahora me dejas, no solo tengo que llamarte sino que además me cortas la llamada, esta bien Laura.

- Maman! Te iba a llamar pero al llegar a casa... Estoy en la calle, tengo a Erick esperándome en el coche, mi ropa está hecha una birria. Solo quiero ducharme y descansar un poco...solo es eso. Si quieres te vuelvo a llamar después.

-No esta bien Laura, ya esta, no hace falta, adeus.

- Anda no te enfades. Si tu sabes que te quiero mucho. Jo! Si lo de hoy, lo que mas me preocupaba es que te enteraras. No quería que te preocupases. Lo siento... - dijo Laura en un suspiro.

-Esta bien Laurette- dijo ahora con algo de culpa utilizando el diminutivo por el que solía llamarle de pequeña - tranquilízate, yo te entiendo, pero no me des estos sustos.

Laura se rió - No me apetece te lo aseguro. - Tomó una ultima calada del cigarrillo y lo apagó - Cuídate mucho y muchos besos a ti y a todo el mundo, ya llamaré a Esteban y a los abuelos.

-Adeus neniña, moitos bicos, cuidate mcuho ¿si?

Laura sonrió con ternura - Sí y tu también. Gros gros bisous...- dijo Laura escuchando como tras un breve intercambio de despedidas se cortaba la comunicación. La chica cerró el móvil y de repente empezó a escuchar una retahíla de tonos de sms. Lo volvió a abrir y pudo observar un sinfín de llamadas perdidas. "Ya llamaré después" pensó Laura mientras apagaba el celular. Subió al coche y miró a Erick - Siento esto - dijo mientras arqueaba una ceja con una evidente mueca de fastidio.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Abdul Al Hazrad
Artífice del foro
Artífice del foro
Abdul Al Hazrad


Cantidad de envíos : 147
Edad : 43
Ubicación : Lanús
Ocupación : Playboy Multimillonario
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMiér Mar 07, 2007 12:48 am

Fué una noche dura, no descansó bien. Mejor así, hubiera desconfiado de su cordura si luego de haber torturado a un hombre, por más que éste se mereciera eso y mucho más, hubiera podido dormir como un bebé.

Se tomó una aspirina y se hizo unos mates. Estaba apesadumbrado, la noche anterior fue siniestra, en el peor sentido de la palabra. El sorbo de infusión caliente le devolvió un poco el alma al cuerpo, y lo hizo salir de ese abismo en que se estaba hundiendo, el abismo inhumano en el cual algunos caen.

“No estamos hechos para éstas cosas”. Pensó respecto a los seres humanos y su capacidad para dañar al prójimo. “Podemos idear sin problemas la mejor manera de hacer sufrir a un ser vivo, pero soportarlo, soportarlo no era nada fácil.” Pero era mejor soportarlo que aceptarlo, porque aceptarlo significaba renunciar a todo lo que hace a un ser humano: su razón y sentimientos.

Tenía todos los datos necesarios. Sabía donde estaba la esposa de Riviera, cuantos eran captores y tenía todos los detalles de la vigilancia que montaron en el lugar. La casa era grande, ubicada en un barrio acomodado del D.F., tenía dos plantas, una cochera cerrada y un jardín que la rodeaba. Al frente, un muro separaba el terreno de la calle.

Dentro había cinco secuestradores y la esposa de Riviera. A ella la mantenían en una habitación sin ventanas en la planta baja, que se conectaba con la sala de estar, en donde dos delincuentes mantenían una vigilancia contínua. Se trunaban para dormir, montando siempre guardia entre dos o tres secuestradores. Según le dijo Rodriguez, estaban armados y estaban entrendos.

El problema con la muerte de Gordon Rodriguez era que existía la posibilidad de que lastimaran a la mujer, al no saber el resto de la banda de su compañero y sospechar del accionar policial. Si bien Rodriguez le confesó que quien los contrato deseaba mantener a la mujer y a su bebé ileso, Nehuel no podía arriesgarse a que la lastimaran. Tomó el celular del secuestrador y le escribió un mensaje de texto a sus compañeros: “¿Así que ustedes hicieron que Raúl fuera encarcelado? Yo voy a hacer que paguen, tengo a Gordon en mi poder, pronto van a recibir instrucciones.”

Con eso esperaba desviar la atención de los secuestradores de la mujer de Riviera, que pensaran que la desaparición de Rodriguez se debiera a una venganza de un amigo de alguien que fue a la carcel por culpa de esa banda.
Luego envolvió el aparato del secuestrador en papel aluminio para aislarlo de la red, y anotó todos los telésfonos agendados, así como los mensajes de texto y otros detalles contenidos en el teléfono móvil.

Con la ayuda de Riviera alquiló un departamento en las cercanías de la guarida de los delincuentes. Vigiló durante un día la casa, casi no había movimiento, salvo por un pareja de hombres que salió y volvió un rato después con bolsas de supermercado, no usaban auto, se movían a pié. Nehuel le pidió a Riviera que se mantuviera como hasta ahora, que continuara negociando con los secuestradores y que accediera a sus demandas.

Estaba en un verdadero dilema. Qué hacer. No había muchas opciones, ya que de involucrar a las autoridades locales, seguramente lastimarían a la mujer. Era obvio que la banda tenía contactos dentro de la policía o del departamento de justicia. Quizás podía pedirle ayuda a Gutierrez y sus hombres, o traer a alguin del extrajenro, pero eso tomaría demasiado tiempo, y cada minuto que pasaba se ponía en riesgo la vida de esa mujer.

Qué hacer, qué hacer. Y de repente, se puso en el lugar de Riviera. “¿Qué haría si fuera mi mujer?” Pensó “¿Qué haría si supiera que un grupo de hijos de puta tienen secuestrada a mi mujer y a mi hijo, a pocos metros de donde estoy yo?”

No hizo falta que siguiera meditando sobre la cuestión. Salió rápidamente en taxi hacia el departamento de policía. Utilizó sus influencias y reputación para conseguir el silenciador para su pistola, y se llevó un traje táctico, del tipo que utilizaban él y sus alumnos durante las clases. Tomó también unos lentes de visión nocturna se dirigió al centro de la ciudad, a comprar un cortavidrios, para poder destrabar eventualmente alguna puerta o ventana. Tenía el equipo.

Una vez de vuelta en su puesto de vigiláncia, desarmó un enchufe y unío los cable en su interior. Con eso podría poner en corotcircuito la instalación eléctrica de la casa, era un truco viejo que aprendió en el secundario. Alistó su arma y el resto del equipo, y se hechó a dormir, para estar fresco en la noche. Intentaría rescatar a la mujer por su cuenta.

Eran las diez de la noche, retomó la vigilancia de la casa en donde estaban los delincuentes. No había movimiento en la calle, lo cual era bueno, ya que de entrar debería hacerlo por el frente. A la una de la madrugada se preparó, se puso el traje, su chaleco, el pasamontañas y el casco, en donde montó los lentes de visión de nocturna. En sus bolsillos llevaba el enchufe modificado, el cortavidrios y dos cargadores extras para su arma silenciada.

Tomó su celular y el de Rodriguez, y tras sacarles el sonido, tambien los guardó en sus bolsillos. A las dos de la madrugada, cruzó se dirigió sigilozamente hasta el frente de la casa. Con ls información que obtuvo del secuestrador, el era fácil evadir las cámaras de seguridad, moviéndose por los puntos ciegos. Se asomó por sobre el muro de la casa y se aseguró que no hubiera nadie ahí. Luego se trepó y cruzó al interior del terreno, e inmediátamente se escabulló entre unos arbustos cercanos. Desenfundó su pistola y le sacó el seguro. Todo eso era una locura, pero lugo de tantos años de entrenamiento y práctica, aprendió a mantener sus emociones y pensamientos reducidos a lo mínimo indispensable para poder llevar adelante su tarea.

La noche estaba en sielncio. Había luz en el interior de la casa, aunque en el jardín, la iluminación era solo perférica; así que podía moverse oculto con relativa facilidad. Comenzó a avanzar y se dirigió a la parte trasera de la casa, rodeándola. Según sabía, allí estaba la cocina. Buscó un enchufe en los alrededores, por suerte había uno en el jardín, de esos para exteriores. Levantó la tapa que evita que se moje el tomacorriente, y conectó su enchufe modificado. Inmediátamente la casa quedó a oscuras. Su plan había funcionado, puso en corto la instalación de la casa.

Prendió sus lentes de amplificación de luz y observó por la ventana el interior de la cocina, no había nadie allí. Tenía pensando ingresar por la ventana, pero la puerta era vidreada, así que pegó el cortavidrios a la superficie y trazó un ccírculo con el cortante. Con un sutil movimiento extrajo el pedazo circular de vidrio, metió su mano y destrabó la puerta.

Entró a la cocina, pudo ver que en esa habitación se encontraba la caja de fusibles, por lo que pronto tendría compañía cuando quisieran restablecer el suministro eléctrico. Teniendo ésto en cuenta, se colocó en el punto ciego de la puerta que daba a la habitación contígua. Tenía pensado emboscar a quien ingresara.

A los pocos segundos, entró un hombre a la cocina. No había visto a Nehuel. El policía lo tomó de repente por detrás, poniendo su mano en la boca del secuestrador para silenciarlo. Inmediatamente posó el cañón de su pistola verticalmente por sobre la clavícula izquierda del delincuente; y gatilló.

El arma silenciada, apenas emitía sonido al ser disparada. Era similar al ruido que hacía un recipiente hermético al abrirse, como un pequeño y breve escape de aire comprimido. Nehuel pudo sentir como el hombre dejó de forcejear casi al instante de recibir el disparo. Como médico y perito, sabía que ese disparo era mortal. Tras ingresar cerca de la base del cuello, el proyectil debió haber atravezado el torso del hombre hasta alojarse en alguna parte de los huesos de la cadera. Sin tejido óseo que pudiera detenerla en medio del camino, debió haber perforado la mayoría de los organos internos.

Cuando retiró su mano de la boca del delincuente, la sangre brotó de ésta. Nehuel se encargó de esconder el cadáver tras la puerta, y prosiguió el rescate. La adrenalina impidió que se detuviera a pensar en el hecho de que había terminado con la vida de un ser humano. En cuclillas, se asomó sigilosamente para observar lo que ocurría en la habitación contígua. Era la sala de estar, en donde montaban la guardia los secuestradores. Había son en ese lugar, pudo ver que portaban armas. Uno de ellos entró a otra habitación, en donde según le dijo Rodriguez, mantenían cautiva a la mujer, dejando solo a su compañero.

Nehuel apoyó el codo en su rodilla y tomó su muñeca, apuntando cuidadósamente a la cabeza del secuestrador que quedaba en ese lugar. Disparó, otra vez el breve soplido, letal y sigiloso. El tiro dió en el costado de la cabeza del malviviente, lanzando un spray de sangre al aire. El cuerpo sin vida se desplomó sobre el sofá.

Se mantuvo atento a lo que ocurría a su alrededor, había tres puertas y una escalera, sabía que la banda estaba conformada por seis hombres, así que mantuvo alta la guardia, vigilando y apuntando a los posibles lugares de donde pudieran salir otros delincuentes.

La casa estaba en silencio, de repente, oyó gritar a uno de los secuestradores, desde la habitación contigua, en donde estaba la esposa de Riviera. -¿Qué pasa con la puta luz?- Gritó el secuestrador, preocupado.

Nehuel no oyó respuesta al pedido, pero si escuchó un murmullo proviniente de la misma habitación. No podía arriesgarse a esperar, decidido, tomó el cadaver del delicuente que yacía en el sofa y usándolo como escudo, ingresó a la habitación de la cual provino el grito. Entró normalmente, confiando en que el delincuente confundiera la silueta de su compañero muerto en la oscuridad, dándole unos segundos de ventaja.

Sin embargo, el secuestrador tenía a la esposa de Riviera como escudo. Nehuel no lo pensó. Tanto entrenamiento, tanta práctica, hicieron que algunas cosas quedaran grabadas profundamente en su memoria psicomotriz. Sin siquiera proponérselo, disparó a la cabeza del delincuente. Fue un disparo digno de un arquero Zen. La bala ingresó por el ojo izquierdo del malechor, matándolo instantáneamente, sin darle tiempo siquiera a reaccionar. Luego de una fracción de segundo, el grito de horror de la esposa de Riviera hizo que la mente en blanco de Nehuel tomara conciencia de lo ocurrido, e inmediátamente fue a socorrer a la mujer, que estaba temblando.

-Tranquila, soy policia. Me envía Gustavo Riviera, soy un agente de Interpol, de la Policia Federal Argentina. Ahora, andá a aquel rincón, y agáchate.- Acto seguido, el policía entró a la habitacion, dejando la puerta abierta para poder vigilar el exterior.

La mujer estaba horrorizada, pero hizo caso a las palabras rápidamente cuando escuchó el nombre de Gustavo. Estaba intranquila y tenía miedo, pero al menos haber oído ese nombre la hacia reaccionar. -Quieta, ponete tras ese mueble- dijo Nehuel, señalando una mesa.
Volver arriba Ir abajo
Abdul Al Hazrad
Artífice del foro
Artífice del foro
Abdul Al Hazrad


Cantidad de envíos : 147
Edad : 43
Ubicación : Lanús
Ocupación : Playboy Multimillonario
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMiér Mar 07, 2007 1:03 am

Unos instantes más tarde, oyó que alguien bajaba las escaleras. También pudo ver el haz de una linterna, que inspeccionó rápidamente el living. Nehuel se asomó cuidadosamente, y vió como se cerraba la puerta de la cocina, a los pocos segundos, se había restablecido la energía eléctrica de la casa, todo estaba iluminado. Seguramente encontraron el cadaver que allí yacía.

Tomó el cadáver del secuestrador y escudándose con él, se aproximó a la puerta de la cocina, la cual abrió repentínamente. No pudo ver a nadie desde la puerta, sin embargo escuchó al secuestrador gritar desde el punto ciego de la puerta: -¡Hijos de puta!-

Nehuel, sin exponerse, apoyo el cañón del arma sobre la superficie de la puerta, y guiándose por el sonido de la voz del delicuente, apuntó aproximádamente. Gatilló rápidamente el arma, tres veces, y se cubrió. Como respuesta a sus disparos, oyó un quejido de dolor, una catarata de insultos incomprensibles por lo bajo y varios balazos que atravesaron la puerta.

Sin pensarlo, y en un acto que roza más la locura que el coraje, Nehuel ingresó rápidamente a la habitación, con el cadáver en alto. Vió la cara de sorpresa del secuestrador. La adrenalina que recorría su cuerpo invadiéndolo todo, hizo que un segundo pareciera una eternidad. Pudo ver en detalle la cara de sorpresa y odio del delincuente, y cómo levantaba lentamente el arma apuntando hacia él. Tenía la otra mano sobre una herida en el costado del abdómen, posiblemente una herida superficial. Nehuel también pudo ver como elevaba su propia arma hacia el delincuente lentamente, aunque más rapido que su enemigo. Presionó el gatillo, el recorrido de su dedo parecía eterno; el silbido del silenciador se prolongó más de lo acostumbrado para su cerebro acelerado.

De repente, todo volvió a su velocidad normal. La cabeza del secuestrador hizo un brusco movimiento hacia atrás, para luego relajarse, flojo de muerte. La bala de Nehuel le había dado en la frente.

Volvió rápidamente con la mujer. Se aseguró que estuviera bien y le indicó que se mantuviera a resguardo.

-¿Qué pasó? ¿Los mató a todos?- Preguntó la mujer.

-Tranquila, no sé si aún queda alguno en la casa, pero voy a pedir refuerzos, mantenete a cubierto.- Respondió Nehuel, mientras también se ponía a cubierto. Sacó su celular, y llamó a Riviera.

-¿Hola?- Dijo riviera.

-Estoy con su esposa en la casa donde la tenían secuestrada, queda uno de los tipos vivo, tengo que encontrarlo. Venga con la prensa. Ella está bien.-

-Voy para alla, pero no quiero meter a la prensa en esto.-

-Ok, pero llámelo a Gutierrez, el de la empresa de seguridad, que traiga a sus hombres; quien queda es muy peligroso. Y venga rápido.-

Nehuel cortó, y se quedó atento a los sonidos de la casa. No se oía nada. Observó la habitación, pudo ver que había una cámara que vigilaba ese lugar. Con rabía, la arrancó. Sabía que eran seis los miembros de la banda. Cinco habían muerto ya, de los cuales cuatro cadáveres se encontraban en el lugar. Quedaba uno.

Se aproximó a la puerta de la habitación, para que pudiera oirlo cualquier posible habitante de la casa.

-Ya todo se acabó, ésta es la Interpol, todos sus compañeros están muertos. Entréguese.-Gritó Nehuel, a nadie en particular. El grito no recibió respuesta, lo único que se oia en la casa eran sus pasos y a la mujer. Se mantuvo vigilante, esperando que pronto llegaran los refuerzos.

A los pocos minutos, sonó el teléfono de la casa. Nehuel vió que había un aparato a mano, pero decidió no responder, a la espera de que, si quedaba algún delicuente en la casa, éste levantara el tubo. El teléfono dejó de sonar, y Nehuel levantó el tubo repentínamente, buscando sorprender a quien estuviera hablando, sin embargo solo oyó el tono de llamada.

Indicándole ala mujer, con señas, que se quedara quieta y callada, tomó la mesita en donde descansaba el teléfono, y la arrojó por la ventana del living, que daba al frente de la casa, rompiendo el vidrio. Acto seguido gritó: -¡Salgamos, vamos, vamos!- Mientras miraba a la mujer y le indicaba con la mano que se quedara donde estaba. Inmediátamente volvió a apuntar hacia las escaleras y las puertas de las otras habitaciones, buscaba engañar a quien estuvirea escondido ahí, haciéndolo pensar que iban a escapar. Pero no había nadie.

A los pocos minutos, pudo ver las luces de varios vehículos que se reunían en la puerta. Con agrado vió que eran Riviera, Gutierez y su gente, que rápidamente tomaron control de la propiedad. Respiró aliviado, puso el seguro a su arma y se sacó el casco y el pasamontañas. Tras revisar la casa, quedándose con todo lo que pudiera contener algun tipo de información, se dirigió a Riviera.

-Tiene que irse ya mismo de México.-


Gustavo abrazo a su mujer e ignoro por completo a Nehuel por unos largos instantes, viendo como ella se encontraba depués se giró hacia el argentino. -¿Están todos muertos?-

-No, queda uno dando vueltas, tiene que salir ya mismo del país. El aeropuerto debe estar vigilado, contrate ya mismo un charter y salga lo más pronto posible, vaya a la Polinesia o un lugar similar. No puede quedarse aca.- Recalcó Nehuel.

-Si, ya mismo nos volvemos a Argentina, no vamos a pasar un segundo más acá...- se contuvo de decir más ya que estaban aquellos otros Mexicanos presentes -Pero quiero saber algo, ¿esos hijos de puta sufrieron?-

Nehuel se sorprendió un poco ante la pregunta. Tenía claro que no había hecho todo eso para buscar el sufrimiento de los delincuentes, sino que buscó preservar la vida de la mujer. De hecho, todos tuvieron una muerte rápida. Pero sabía que responder a esa pregunta. -Sí, esos hijos de puta tuvieron lo que merecían. Que los hombres de Gutierrez lo custodien, tómese lo más pronto posible un charter a algún lugar alejado, no vuelva al hotel.- Fueron las últimas directivas de Nehuel para con Riviera. Le dió un apretón de manos y fue en busca de Gutierrez. El mexicano había ido al piso de arriba a ver si podía encontrar algo más, pero en vano. Cunado bajó se encontró con Nehuel, que lo buscaba.

-Gracias por venir Gutierrez, no sabía a quien recurrir. Es una situación complicada.- Agradeció Nehuel.

-¿Usted hizo todo ésto solo?- Preguntó Gutierrez impresionado.

-A veces la necesidad lo lleva a uno a los límites. Pero no se confunda, no estoy orgulloso de ésta masacre. Necesito pedirle un favor.-

-Sí, dígame.-

-Ésto tenemos que hacerlo oficial. Mi idea es la siguiente, para preservar la identidad de Riviera y su esposa, decirle a la policía que uno de sus hombres fue secuestrado por esta banda. Usted me contactó porque estaba interesado en que entrenara a algunos de sus hombres, y me contó de su problema. Yo noté algo sospechoso de casualidad, mientras iba al supermercado, y seguí a los hombres hasta aquí, en donde sucedió el tiroteo.-

-Mmm...- El hombre se quedó pensativo unos instantes, realmente no le gustaba andar mintiéndole así a la policía, pero sabía que en este caso era mejor que la verdad. -Está bien.-

-Traiga a su empleado de mayor confianza entonces, y repasemos la historia, las patrullas no tardarán en llegar.-

Gutierrez se dió vuelta. -José, ven aquí, tenemos que hablar.-
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMiér Mar 07, 2007 10:25 pm

Aviso Importante: este post posee un alto contenido cursilerico y puede ocasionar efectos secundarios en el lector, tales como vómitos e irritabilidad entre otros. Se recomienda que los niños menores de 8 años lo lean acompañados de sus padres o un adulto responsable. Tanto Narrador como Jugadora no se harán cargo de los daños ocasionados este mensaje, la decisión de su lectura es entera responsabilidad de los usuarios

------------------
-No te disculpes, no ha pasado nada-

- Si ya... Mi madre estaba histérica - dijo Laura negando

- Lo entiendo pero no había quien la hiciera entrar en razón, quería que lo dejara todo y que me volviera - resopló brevemente.

-Es lógico, tras lo que paso, de no saber nada a enterarse de todo y que además fuiste atacada por eso...

-Sí claro, es normal ... Pero no conoces la verdadera mala leche del gen Castro - dijo Laura riendo e intentando zanjar todo aquello relajando el ambiente.

-Bueno estas segura de no querer ir a la farmacia ahora? Me quedaría mas tranquilo si fuera así, pero si no quieres te llevo a tu casa

- Sinceramente, ya estoy mejor... Pero si tu te quieres quedar tranquilo, vamos.- dijo la joven mirando para el catedrático.

-Son solo dos minutos, si no tienes nada que hacer...mejor prevenir que lamentar- dijo y puso en marcha el auto para llevar a Laura hacia una farmacia cercana.

A Laura le hizo gracia el comportamiento de Erick aunque no se lo dijo. Parecía su madre en sus mejores momentos de hipocondría aguda. La farmacéutica le dijo que tenía la tensión un poco mas alta de lo normal pero que era algo natural teniendo en cuenta la situacion vivivida y le proporcionó unas pastillas de valeriana y una pomada para la quemadura del cuello. Erick también aprovechó para comprarse otra caja de aquellas hierbas tranquilizantes. Al llegar a su casa Laura le dijo a Erick - ¿Quieres subir? Tomar un café... una infusión...

-Está Mauricio o estás sola? si no está entonces voy a aceptar tu oferta, prefiero que no te quedes sola ahora, pero si está...no quiero molestar

Laura miró para su reloj -Supongo que ya debería estar en casa...supongo... Pero no pasa nada - dijo Laura con franqueza - Solo faltaría que no quisieras venir por Mauricio. No tiene sentido, en ningún caso molestas-

-No, no, no es por él, no me malentiendas, pero no quiero molestarlos, además es tarde y aun tengo cosas que hacer, no te preocupes por mi, solo cuídate.

Laura arqueó brevemente una ceja aquella excusa no le había convencido en absoluto - Bueno, vale... como tu veas. Yo procuraré descansar hoy, mañana ya será otro día - afirmó la joven - Cuídate tu también - dijo Laura con franqueza. Erick no era de piedra y todo aquello también le había conmocionado..

-Tranquila, preocúpate por descansar ahora -

Laura se despidió del catedrático y subió para su piso. Con cierta ansiedad introdujo las llaves en la puerta...al fin llegaba el anhelado momento...al fin iba a poder estar en SU casa y al fin podría ver a Mauricio o eso suponía.

Mauricio estaba dentro del departamento y parecía que poco mas y caminaría por las paredes al verla entrar se avanzó sobre ella para abrazarla -¿Qué pasó? ¿Dónde estabas? Estuve llamándote.

Laura lo abrazó y le dio un beso aunque intentó tranquilizarlo ante el nuevo aluvión de preguntas que había brotado. -Tranquilo... ven - Cerró la puerta tras ella y avanzó unos pasos, tomando el chico por la mano, dejándose caer en el sofá soltando un breve resoplido de alivio. Se giró hacia Mauricio sonriendo levemente - Estuve en la comisaría puse la denuncia y, al salir vino un aluvión de periodistas. Tuve que contestar a unas preguntas y bueno, luego Erick me trajo a casa... Lo que pasa es que por el camino me dio una pequeña taquicardia... - dijo Laura con sinceridad...no quería más medias verdades al menos con Mauricio - Luego me puse mejor y me llamó mi madre histérica perdida porque al parecer todo esto salió en la tele allá... y bueno luego Erick me llevó luego a una farmacia para que me tomaran la tensión. El pobre, estaba preocupado...

-También salió aquí en al tele, te vi....- dijo y luego recapacitó - una taquicardia? ¿y que te dijeron en al farmacia?

- Que estaba bien...que tenía la tensión un poco alta pero que era normal y que después de lo de hoy era natural... - Laura se paró un instante y sonrió brevemente - Es que soy toda una celebridad - dijo bromeando

-Bueno al menos ya estas de humor para hacer esas bromas tuyas- dijo y fue a tomarle las manos - Me hubiera gustado hacer mas.

Laura lo miró y sonrió con dulzura - Ya hiciste mucho, menos mal que apareciste tu porque sino...

-Bueno cualquiera lo hubiera hecho, fui solo el que reaccionó más rápido, si por mi hubiera sido hubiera hecho mas que detenerlo.

- Me imagino, a mi me hubiera pasado lo mismo si fuera el caso contrario... – La chica negó – Creo que me hubieran entrado ganas de romper con todo...y hoy la verdad es que no me faltaron.-

-Ya, puedo imaginármelo, hoy no debió ser un buen día, ¿quieres recostarte y descansar un poco?

Laura se recostó un poco junto a Mauricio - Llevo todo el día soñando con esto...aunque también tendré que ducharme y cambiarme esta ropa... y luego atender a las miles de llamadas que tengo en el móvil -dijo la chica resoplando mientras volvía a tocarse el cuello. Se incorporó un instante tomando la pomada para quemaduras que le habían dado en la farmacia - Han roto mi camiseta de Grace Kelly por Warhol los cabrones! ...con lo que me gustaba...- dijo negando nuevamente

-Bah, las llamadas déjalas para otro día, olvídate de eso por ahora ¿quieres?

-Hombre, tendré que llamar al menos a mi hermano y a mis abuelos, que aunque mi madre hable con ellos entiendo que quieran saber de mi... para los demás les mandaré un mail y ya iré hablando a los pocos - dijo la chica mientras miraba de reojo el prospecto.

-Bueno si me parece bien que hables con tus abuelos y tu hermano, aunque supongo que este ultimo entenderá si esperas para llamarlo, pero no te preocupes aun por el resto no pienses en eso ¿esta bien?- dijo acariciándole el rostro intentado calmarla y hacerla sentir mas cómoda -olvídate de todo ahora.

La chica escuchó las palabras de Mauricio y dejó la pomada sobre la mesa a la vez que se abrazaba al chico - Vale, tienes razón - dijo Laura mirándolo a los ojos, sonriendo levemente algo embelesada - Qué guapo eres -se rió y lo miró nuevamente.

-También tu chava, eres mucho más guapa que tu doble conductora de la televisión española- dijo Mauricio con una sonrisa y le beso los labios

Laura se rió - No me digas, menso, que buscaste a la Nuria Roca en internet - se volvió a reír - Solo a ti se te ocurren esas cosas! -

-Me costó encontrarla porque me había olvidado el nombre- confesó riendo - pero al final lo encontré y pude ir a su pagina oficial, si se parecen, pero tu tienes mucha más personalidad.

- Bueno al menos yo no me paso el día con una sonrisa de oreja a oreja como si anduviera haciendo una permanente publicidad de dentífrico - dijo la chica riendo a la vez que volvía a besar a Mauricio. - Pero ella es mucho mas guapa...no sé en que nos parecemos.

-No te vendría nada mal tampoco, me gustas más, si eso es posible, cuando sonríes- dijo poniendo su frente contra la de ella y volviendo a besarla -y tu eres mucho más bonita que la Nuria esa, se parecen si, pero tu rostro dice mucho más.-

- Eso es porque me conoces -Laura se quedó un instante callada -Parece mentira que solo llevemos 3 meses juntos - dijo clavando sus ojos oscuros en los suyos.

-No, eso es así, por que es así, siempre pasa lo mismo con esas mujeres, no son reales, tu eres igual de bonita que ella y tienes la presencia que ella no, algo que te hace mucho mejor, más hermosa- pensó un instante -¿3 meses? Es cierto eso que dicen que el tiempo pasa volando cuando uno lo disfruta, para mi es como si hubieran sido dos días, aunque siento que te conozco de toda la vida.

Laura sonrió - Sí a mi me pasa lo mismo...parece mentira que no te conozca desde hace más tiempo aunque también pasó todo muy rápido...-

Sonrió sin dejar de mirarla -Te amo. Laura, agradezco él haberte encontrado, te amo y me haces bien.

-La que lo agradece soy yo - dijo mirándolo a los ojos - Te amo - dijo sin poder contener un fuerte abrazo.

Mauricio la abrazó a su vez como parte de una misma necesidad, de un mismo impulso creciente entre los dos. No dijo nada solo la abrazó disfrutando el estar junto a ella, habiéndose olvidado por completo de todo lo que había ocurrido. Así se mantuvieron un rato hasta que Laura se separó levemente y simplemente se quedó mirándolo sin poder creer en la suerte que había tenido al encontrar aquel chico al otro lado del mundo.

Mauricio le acaricio el rostro suavemente sonriéndole -Te amo- volvió a decir y a besarla a la vez que le abrazaba dejando que ambos se recostaran en el sofá.
Laura se dejó llevar por aquella espiral de sentimientos y gestos, notando como sus brazos la levantaban llevándola hacia la habitación mientras se fundían en un renovado, prolongado y pasional abrazo.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Mar 18, 2007 8:30 pm

Héctor cogió el teléfono –Hola Antía, dime-

-Héctor, a Laura la han agredido unos tipos en el conservatorio- le dijo aceleradamente.

Se quedó perplejo al escuchar eso. -¿sabes si está bien?- le preguntó mientras por su cabeza pasaban mil imágenes de Laura llena de moratones.

-Si tranquilo, está bien, creo que no la llegaron a pegar, Jiménez fue a la comisaría número 27 a cubrir la noticia, allí estuvo Laura para denunciar los hechos-

Héctor se tranquilizó al escuchar que la historiadora se encontraba bien -Bueno menos mal, voy a llamarla, a lo mejor nos podría dar una entrevista. No lo entiendo ¿por qué la habrán querido pegar?... ah no ser... ¡Joder la investigación!-

Tras colgar a Antía, Héctor probó reiteradamente llamar a Laura, pero ésta no contestó en ninguna de las ocasiones, ya que tenía el móvil apagado.
Por lo que decidió ir a la comisaría, para ver que podía sacar de los policías.

Tras ir en su moto esquivando como buenamente pudo el tráfico de la capital llegó a la comisaría nº 27 donde Laura fue a poner la denuncia, al entrar se encontró a un policía de guardia sentado en una silla detrás de una vetusta mesa mientras leía el periódico.

-Buenos días agente, soy Augusto Cartago, periodista del Universal. Quisiera hablar con los agentes que llevan el caso de la joven investigadora agredida hoy en el conservatorio-

-¿Que caso? - pregunto el hombre -esto esta a manos, ahora, del juzgado que determinaran la condena de los implicados, mientras tanto se encuentran detenidos e incomunicados-

"Vaya ya están detenidos" -Perdone agente ¿dónde están detenidos los reclusos?- Héctor tenía la intención de entrevistarlos.

-Eso he dicho- contestó el oficial -detenidos e incomunicados hasta que el juzgado determine la sentencia-

El hecho de que estuviesen incomunicados era toda una contrariedad -Vaya eso significa que no puedo hablar con los detenidos, ¿verdad?-

-Así es, me pondría en un compromiso si me lo pidiera así que por favor...-

-Y si en vez de pedírselo se lo sugiero- le dijo mientras sacaba de su cartera el equivalente en pesos de 100 dólares.

-Bueno, si usted fuera familiar de - miro unos papeles que estaba a su derecha -Antonio Ibáñez, podría dejarlo pasar pero solo unos minutos ¿como me dijo que era su apellido?-

Héctor esbozó una sonrisa, se sentía como en una película de Hollywood
-Si bueno, me llamo Juan Ibáñez, donde está ese familiar mío- le dijo al policía mientras le daba discretamente el dinero.

-Si acompáñeme por aquí Señor Ibáñez, pero recuerde solo tiene dos minutos aprovéchelos bien-

-OK, gracias, le sigo-

El oficial guió a Héctor hasta la celda donde estaban los detenidos
Hectór se plantó delante de la celda y se dirigió a ellos.

-Buenos días, soy periodista del Universal he venido para haceros unas preguntas si estáis de acuerdo, claro-

Uno de ellos fue el que tomo la palabra -¿Para que? para confundir a la gente contándoles medias verdades???-

Héctor ya se imaginaba que habría ciertas reticencias -No mira, para confundir a la gente sobre este tema no me hubiese molestado en venir aquí a veros, simplemente me limitaría a escribir falacias sobre vosotros. Si estoy aquí por tanto, es que me interesa lo que hicisteis-

Héctor esperaba convencerlos de que apoyaba la causa de esta pandilla de energúmenos.

-Solo fuimos a pedir justicia- dijo el joven.

-¿Justicia? pero según vuestro punto de vista ¿qué es lo que ha hecho mal la investigadora Saavedra?- Héctor quería conocer las motivaciones de estos sujetos, los impulsos que les motivaron a agredir a un semejante.

-¿Y lo pregunta?-

-Claro que lo pregunto, quiero que los lectores conozcan de primera mano vuestras motivaciones para que os comprendan y así evitar malos entendidos-

-Es obvio lo que fuimos a hacer, pero cloro usted debe ser un amigo e ella, seguro lo mando ella aquí-

Héctor ya se estaba impacientando pero tenía un as en la manga -Mirad chicos, soy amigo personal del abad de San Miguel, el me llamó para que hiciese un artículo sobre vosotros ya que esa tipa va a llevarse todas las portadas y la opinión pública seguro que se pondrá a su favor, con esa cara que tiene de no haber roto nunca un plato. Por eso estoy aquí para ofreceros un medio donde esplayaros a gusto. ¿Queréis o no? porque me han dado muy poco tiempo para poder charlar con vosotros.-

El hombre no estaba muy convencido de las palabras de Héctor -Y como se yo que eso es cierto, fue una española la que encontró los documentos y fue un español el que quiso engañar al abad-

"Hijos de puta, está claro que tendré que poner acento mexicano la próxima vez" Héctor sacó su cámara y les hizo unas fotos -Bueno chicos tenéis suerte de que haya unos barrotes de por medio porque sino os partía la cara a todos malditos niñatos, mira que venir a intentar joderme una pandilla frustrados como vosotros, anda y que os den por el culo- Se dio media vuelta y se fue al llegar a la mitad del pasillo se dio media vuelta y les dijo -Ahora si que vais a estar jodidos-
Al llegar junto al policía se dirigió a el -¿Me podría dar los nombres de los presos?-

-Realmente no puedo recordarlos bien...- dijo el oficial

Héctor rió por no llorar -Bueno tranquilícese, tengo la medicina que le hará recuperar la memoria- le dijo mientras sacaba unos 60 dólares de la cartera.

El hombre tomo un papel luego del billete y se dirigió a la fotocopiadora, al vovler entrego a Héctor una lista con los nombres de los detenidos.

-Gracias- tras coger la fotocopia salió de la comisaria con una lista de nombres, un par de fotos y nada entre manos, un fiasco en total. Pero le daba igual a esos chicos les iba a caer todo el peso del cuarto poder, o eso esperaba Héctor.
__________________________

Martes 24 de Octubre

El amanecer Portad10


Última edición por el Dom Mar 18, 2007 9:33 pm, editado 4 veces
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeDom Mar 18, 2007 9:13 pm

El día anterior había terminado con varias llamadas. Laura había podido hablar con su hermano Esteban que había quedado particularmente impactado y ultrajado por la situación. La historiadora era su hermana pequeña y el hecho de que alguien se hubiera atrevido a tocarle siquiera un pelo había supuesto un golpe para el chico. A continuación Laura había recibido la llamada de aquel periodista, Héctor, concediéndole aquella entrevista que el hombre le había pedido después de preocuparse por su estado de salud y ánimos.
La chica había acabando optando por apagar el móvil y dejar un mensaje en el contestador... Había querido descansar del tema y había salido a cenar con Mauricio y a tomar unas copas. Una agradable velada que había puesto un punto y final a un día de locos.
Al día siguiente Laura había decidido volver al conservatorio a pesar de lo sucedido, lo que no había dejado de chocar al profesorado después de la gravedad y la repercusión de lo ocurrido. Las miradas se posaban sobre ella de forma totalmente indiscreta sin los torpes disimulos del día en que había salido el primer artículo en el periódico. Así había pasado la mañana entre las reflexiones varias de los docentes y la preocupación constante de Jóse y de Ana.
Tras un rápido tentempié Laura había cogido el coche y había puesto rumbo a Cuernavaca. Al pasar por delante del mirador no pudo evitar hacer una parada para fumarse un cigarrillo. Era un lugar sumamente tranquilo que inspiraba paz y que además estaba vinculado a muy buenos recuerdos. Por fin llegó al monasterio.

Como era de esperarse Laura debió de llenar mil y un papeles para poder siquiera acercarse a las bibliotecas del lugar, pero a diferencia de los otros monasterios los monjes aquí parecían no tenerle resentimiento alguno, parecía que aquello había sido un simple formalismo.

Algo sorprendida por el recibimiento exento de resquemor. Laura se dirigió biblioteca adentro... Lo primero era averiguar algo acerca del abad Gregorio Pazos que había sido el mentor de los siete abades del valle que habían desaparecido misteriosamente con parte de la documentación de los monasterios. Se acercó al monje encargado de la biblioteca - Hola - dijo con rostro amable -Desearía un índice de la documentación existente en este monasterio de la segunda mitad del XVII y la primera del XVIII por una parte y, por otra, la documentación referente al abad Gregorio Pazos –

-Si, aguárdamele un momento- dijo el monje y fue a buscar lo que se le pedía, tardó un poco pero finalmente lo trajo.

Comparado a la tardanza habitual aquella espera hasta se le había hecho corta a Laura. Tras tomar la documentación, la chica se dirigió a la mesa en la que todas sus cosas se hallaban organizadas según los pulcros parámetros habituales. Con curiosidad la chica empezó a leer aquella documentación. No sabía si aquello le llevaría a la clave pero la investigación resultaba de lo más interesante y en ningún caso podría convivir con ella misma dejándola de lado

Laura estuvo leyendo algunas horas, al parecer el Abad había sido un hombre letrado, aunque también un hombre severo, odiado por unos amados por otros, pero era posible ver en las obras que el monasterio guardaba que era un hombre de cultura y al que le gustaba tener accesos a gran cantidad de información y también compartirla sirviendo de tutor.

El monje volvió a aparecer junto a Laura y la interrumpió luego de un rato dijo que había recordado algo que quizá podía serle de utilidad en su investigación. Le entregó una caja de madera, dijo que según creía allí estaban guardadas algunas de las cartas del aquel abad, pero que no estaba seguro ya que nadie las había revisado restándoles importancia.

Laura agradeció aquel gesto doblemente. Después del trato que había recibido en Atlatlahucán y en San Miguel, aquello semejaba un remanso de paz, casi increíble... "¿Es que lo sucedido ayer les hizo recapacitar sobre su postura?". Tras esas reflexiones la chica se volvió a centrar en la investigación y tras acariciar la caja de madera que a pesar de los siglos no mostraba ningún signo de apolillamiento se puso a examinar pormenorizadamente aquellas cartas.

Las cartas, si bien interesantes, pocos datos le aportaban, aunque dejaban en claro el carácter que el Abad debía de tener dando peso a lo que ella había logrado deducir de la investigación. Era un hombre solicitado por su gran conocimiento, pero también criticado por su severidad. Entonces un pequeño tesoro apareció, una carta firmada por un famoso miembro de la Inquisición de aquella época.En las cartas, el mencionado Inquisidor felicitaba al abad por algunas severas resoluciones tomadas por su persona, haciendo mención a como había descubierto a algunos herejes o algunos castigos que había aplicado,
Las cartas también hacían referencia a la ayuda que el hombre había prestado a la institución facilitándole información sobre le paradero y las actividades sobre los que habían sido aprendices de los grande pensadores del circulo del escorial.
Pero dentro de aquella pequeña caja Laura también pudo encontrar cartas que habían sido enviadas por aquellos otrora aprendices de algunos miembros del círculo del escorial, donde agradecían al hombre por proporcionarles refugio y a veces hasta grandes enseñanzas.

Laura al ver aquellas cartas no pude evitar sentir aquella emoción vinculada al descubrimiento de los objetos y papeles olvidados en los recovecos de los túneles del tiempo. Con entusiasmo empezó a leerlos hallando a continuación otras cartas que también aportaban una valiosa información sobre la figura del abad Gregorio Pazos "Menudo cabrón" pensó Laura "Hacía doble juego según la fluctuación de sus intereses...Por una parte se asegura el conocimiento y por otra el visto bueno de la Inquisición...Un cabrón muy listo..." Laura empezó a registrar la diversa documentación de interés para poder hacer su estudio exhaustivo en casa o en la facultad como solía hacer habitualmente tras los trabajos "de campo". Lo que seguía sin aclararse era el paradero de la documentación y de los discípulos del abad Pazos. “Con semejante maestro lo extraño es que fueran declarados herejes conjuntamente” . Laura se levantó de la mesa y tras devolverle al monje la caja con las cartas con otro agradecimiento solicitó al mismo documentación acerca de los siete discípulos de Pazos.

-Discúlpeme- dijo el monje - pero no tengo lo que me pide, aunque si usted dice que eran discípulos del señor Gregorio Pazos entonces puede que encuentre algo fuera de aquí, cuando el Abad dejó su cargo se retiró a vivir a un pueblo no muy lejos de aquí.

Laura lo miró con cierta sorpresa una por la información y otra por la reiterada colaboración de aquel monje - ¿En dónde? ¿Se puede visitar su casa? ¿Se puede tener acceso a su biblioteca? - Las preguntas se agolparon en su boca por aquella posibilidad.

-No sabría decirle, pero el pueblo se llama Paso del Buey, se llama así porque es atravesado por uno de los ríos del deshielo, llamado el Buey, que baja desde las laderas de la montaña, esta a 30 kilómetros de aquí en dirección al volcán.-

Muchas gracias por todo - dijo Laura con absoluta sinceridad - Muchas gracias - repitió con una sonrisa. Laura miró su reloj. Eran las 17h45... Todavía tenía algo de tiempo, quería aprovechar aquella ocasión. Salió disparada a recoger sus cosas rumbo al coche. Ahí programó el GPS " Bendito invento...así hasta yo llego a los sitios...malo será..." Laura empezó a conducir concentrada en el camino que tenía que hacer y en las diferentes indicaciones que le daba la voz femenina e impersonal que emanaba del artilugio.

La chica llegó por fin a un pequeño pueblo rural, bastante descuidado y atrasado. Vio a alguno de los aldeanos...La vida del campo no parecía variar de un lugar a otro aunque la maquinaria y la tecnología si habían llegado hasta los recovecos más perdidos de su querida Galicia. La chica iba a bajar del coche cuando se acordó de las palabras de Erick que le había indicado que sin duda entre la gente que no había tenido acceso a la educación sería la que peor la verían. La chica cogió sus gafas de sol y se las puso... "tal vez no tengan tele...y no hayan visto nada de lo de ayer...pero mejor así, por las moscas."
Laura bajó del coche y se dirigió a uno de los aldeanos - Buenas tardes, me dijeron en Cuernavaca que aquí se encontraba una casa que había pertenecido a uno de los abades de allá, el abad Gregorio Pazos hace muchos años... No sabría decirme cual es?- "que idiota soy a veces... cómo va a conocer la casa de una abad del siglo XVII...esto no tiene pinta de tener ningún "museo Gregorio Pazos" - Y en todo caso en donde puedo hallar al párroco - dijo con amabilidad.

-La iglesia es aquella que ve allí señorita, y la casa de los Pazos esta en la otra parte del pueblo, cruzando el rió, esta al centro de aquella parte.

Laura lo miró agradada por tener respuesta - Ah muy bien. Por aquí a la derecha ¿No? - dijo para asercionarse del camino - ¿Esta cerca se puede ir andando?.
Tras escuchar la respuesta positiva, la chica pasó primero por el coche a recoger la mochila de su portátil y luego empezó a andar.
Los días no podían ser más diferentes. Estaba disfrutando de un agradable tarde otoñal en medio del campo cuando el día anterior había anhelado fervientemente sentir aquella sensación de paz y soledad. Se paró un instante observando el río y respirando aire a pleno pulmón. La vista era espectacular... al fondo el volcán humeante y ante ella el río salvaje que bajaba por su fértil ladera. Laura se sonrió, aquel lugar le inspiraba una profunda paz interior. Estaba encontrando el mejor remedio al sentimiento claustrofóbico que le había invadido hacía apenas 24 horas... Sacó la cámara de la mochila e inmortalizó el paraje quería grabar aquel momento de alguna forma, marcarlo ese instante de catarsis interna.Prosiguió su camino no sin antes volver a darse la vuelta para guardar aquel paisaje en su retina... Los recuerdos siempre eran mejores que las frías fotografías. Llegó ante la puerta de la casa de los Pazos. Buscó un timbre y al no encontrarlo dio tres golpes en la puerta con la ayuda de la manija.

La puerta se abrió y Laura se encontró con una mujer de su edad que la veía sorprendida.

-Hola, soy investiagadora de la UNAM, de la Universidad. Me dijeron en el monasterio de Cuernavaca que aquí pasó su retiro un antepasado de su familia, el abad Gregorio Pazos y supongo que a lo mejor tienen algún tipo de documentación que su ilustre familiar le habrá legado - dijo Laura esperando la respuesta de la mujer... Tal vez no quedara nada de la obra de Pazos en aquel lugar...

-Ah, usted quiere ver los libros del abuelo Gregorio, si venga- dijo haciéndose a un lado y dejándola pasar -él tenia muchos libros, venga mire - la llevó a una habitación que estaba repleta de antiguos libros y papeles - estos son algunos, antes había mas.

-Muchas gracias - Se retiró las gafas de sol al entrar en la casa. Al ver aquella habitación sonrió abiertamente a la mujer - Y me podría decir en donde se hallan los documentos que teníais antes?-

-No, tiramos muchos porque necesitábamos lugar.

Laura escuchó aquello y se quedó apabullada intentando disimularlo. Tragó saliva un instante... "Oh Putain...y si tiraron el descifrador de la clave... Oh Merde". Buscó aire intentando serenarse - Sí...claro... Eh, si necesitan hacer más sitio para otra vez dígamelo, le dejo mis datos si quiere –

-No, gracias, ya vaciamos otra habitación como esta y unos baúles, pero está el párroco nos dijo que la dejemos así, que como era la habitación del abuelo no teníamos que tocarla.-

- ¿Pero el párroco no se llevó ninguna documentación de las anteriores habitaciones que vaciaron? - siempre quedaba un resquicio de esperanza para que aquello no fuera un destrozo absoluto. Lo que sí resultaba positivo es que aquella fuera la habitación del abad...En aquel lugar solían estar los papeles más personales e importantes.

-No, el párroco dijo que guardemos lo de su habitación nada más.-
:
"El sabio del pueblo que mete la pata...de todas formas habrá que ir a verlo...tal vez haya recuperado algo por su cuenta..." - Bueno y sabe si alguna de las personas que vino por aquí antes hizo algún tipo de clasificación... índice de lo que tenéis...o también si su abuelo tenía algún tipo de diario por ejemplo –

-Nunca vino nadie de la ciudad a ver nada- dijo mirándola aun sorprendida por su ropa y sus maneras - y no se nada de lo que el abuelo Gregorio tiene aquí, yo nunca leí nada de esto.

- Entiendo - dijo Laura. Las malas y las buenas noticias se sucedían...estaba entrando en un terreno virgen, todavía sin investigar y aquello podía ser una buena señal - No quiero molestarle, pero me gustaría leer lo que dejó su abuelo. ¿Sería tan amable de dejarme consultarlos?- dijo una Laura expectante, tenía ante ella otro gran descubrimiento “A ver si no se cierra en banda.”

-Si, pase, pase, yo tengo que ir a prepararle la comida a mis chavos.-

- Muchas gracias- Laura entró en la habitación. Aquello era una maravilla y su vista se dirigió hacia todos los lados notando el abrumador peso de lo descubierto sintiendo una inmensa alegría en el pecho. Buscó un lugar en donde acomodarse, sacó el portátil poniéndole la batería aquel sitio no parecía disponer de luz "estoy en el culo del mundo" pensó Laura "Esto es peor que la España más profunda...tan cerca de la ciudad más poblada del mundo y sin embargo... tan lejos del primer mundo". La habitación estaba repleta de manuscritos varios. Era difícil decidirse por algún lugar. "Tal vez el escritorio...ahi está lo que uno quiere tener más a mano..."

Laura revisó el escritorio, había varios libros y papeles allí y también parecía que alguien había comido mas de una vez en ese lugar recientemente, muchas de las cosas estaban manchadas con grasa y aceite, pero al abrir uno de los cajones encontró lo que buscaba, lo que parecía un diario.


Última edición por el Lun Mar 19, 2007 8:07 pm, editado 2 veces
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Mar 19, 2007 7:05 pm

Laura notó la grasa de los alimentos, si bien la joven mujer no parecía interesada por el lugar sin duda alguien de su familia si lo estaba... "Tal vez uno de los niños" pensó Laura mientras seguía buscando. Aquella mujer tenía mas o menos su edad y sin embargo semejara que sus vidas se habían desarrollado en mundo paralelos. El pensamiento de Laura quedó interrumpido por el hallazgo de un pequeño volumen encuadernado. Con cuidado lo cogió y empezó a leerlo...Podía ser un diario y si fuera su diario tal vez pudiera dilucidar mas de un misterio...Definitivamente era el diario de Gregorio Pazos, Abad de Cuernavaca, y estaba escrito en un Latín en extremo anticuado.

Laura fue empezando a leer aquel "diario" estaba escrito en latín culto del XVII y el abad semejaba ser bastante rebuscado en su vocabulario. Con cierta dificultad la chica empezó a leer aunque sabía que aquello le podía llevar demasiado tiempo. Tenía varias posibilidades abiertas una pedir el diario prestado a la mujer, la segunda era fotografiarlo concienzudamente y la tercera tomarlo prestado claro que aquello no era éticamente correcto. Laura se dirigió con el diario en la mano hacia la descendiente de Gregorio Pazos - Disculpe, la molestia. Quería saber si fuera posible que me llevara este cuaderno a D.F y se lo devolviera la semana que viene. Tomó su bolso y sacó su pasaporte. - Le dejo todos mis datos para que pueda contactar conmigo en cualquier momento si así lo desea.-

. -Ah no, no- . dijo la mujer negando . - el párroco dijo que no debíamos sacar nada de ese lugar- .

"El párroco de la narices, el que permitió que saquearan toda una habitación... Tengo que hablar con ese tipo.” . . - Bien, entiendo, solo era una propuesta para ahorrar tiempo. Le aseguro que se lo devolvería la semana que viene. Incluso le podría dejar dinero a modo de fianza si así lo desea - . dijo la chica esperando que aquello no le sentara mal. El dinero era un arma de doble filo.

. -No, no, señorita, puede ver lo que quiera, pero no vamos a sacar nada de allí, por la memoria del abuelo. .

. “La memoria del abuelo...ya... bien que os la sudó saquear una habitación...” . . - Perfecto, le entiendo y agradezco que me deje consultar la biblioteca - . dijo Laura volviendo hacia la habitación. Tomó la cámara de fotos y tal como solía hacer con la documentación de los monasterios acostumbrada a no poder sacar ningún tipo de manuscrito empezó a fotografiar el cuaderno, numerando cada fotografía y descargando el resultado a continuación en el portátil.
Laura miró su reloj ya eran las 19h y tenía todo aquel tesoro ante ella. Aquel cuaderno del que seguía sin saber nada. . "bah...le voy a echar un vistazo... que me muero de ganas. No podré aguantar hasta D.F, sin mirarlo y tengo que volver aquí cuanto antes" .

Laura empezó a leer el cuadernillo por donde lo había dejado. El diario no parecía cuadrar del todo con la impresión que Laura se había hecho de aquel hombre leyendo las cartas y demás documentos, en sus propios relatos aprecia alguien mas justo, altruista y magnánimo, mucho menos severo o ruin.

Laura frunció ligeramente el ceño... . "Este tipo es un misterio... Un Jano de la vida...Habrá que leer esto con mas calma...esta noche..." . Miró para su reloj, ya eran las 19h30. Recogió sus cosas dejando el diario en su sitio y yendo hacia la mujer para despedirse y agradecerle nuevamente su hospitalidad dejándole en claro que volvería a pasarse por aquel lugar.
Laura estaba exultante cuando salió de la casa. La investigación había dado un giro positivo y aquella casa resultaba una mina aunque el hecho de que parte de la documentación hubiera desaparecido podía suponer un grave problema. Miró para su móvil para hacer una llamada a Mauricio para evitar preocupaciones pero evidentemente no tenía cobertura. Quedaba intentar hablar con ese párroco. Su forma de inmiscuirse en aquel asunto era más que curiosa aunque también resultaba peligroso que la viera y tuviera una postura recalcitrante respeto a la investigación. De estar enterado de todas formas de la polémica lo más seguro es que ya estuviera al tanto de su visita a la casa de los Pazos... Las noticias siempre habían volado en las aldeas superando las velocidades de las mejores bandas anchas. Laura se dirigió a la casa del párroco que estaba en las cercanías del coche. Dio tres golpes a la puerta.

La puerta se abrió, un hombre de ¿40? años ¿50? Resultaba difícil decirlo realmente con al gente de los pueblos, además la etnia mexicana era marcadamente diferente a la española, el mestizaje hacia que el contraste fuera obvio. El hombre estaba vestido humildemente y miró a Laura con extrañeza, aunque no con sorpresa. . -Buenos días - .

Por la mirada del hombre Laura corroboró que el boca a boca había funcionado a la perfección. Estaba claro que su visita no pasaba desapercibida . - Buenas tardes - . dijo la chica - Disculpe la molestia, soy historiadora, investigadora de la Universidad, la UNAM. Si no fuera mucha molestia me gustaría hacerle unas preguntas sobre la biblioteca de la casa de los señores Pazos.- dijo con una sonrisa educada.

. -Usted esta estudiando la vida y obra del Padre Gregorio ¿no es así? un gran hombre. .

. - Si un gran hombre - . dijo Laura pensando en sus múltiples facetas . - Y sí, estoy intentando recabar toda la información posible sobre el, ¿tal vez usted me pueda ayudar? - . dijo Laura intentando dejar claro que confiaba en su criterio aunque el hecho de que permitiera la desaparición de mucha documentación le hacía pensar todo lo contrario.

. -No podría decirle mas que cualquiera, era un hombre santo que siempre se preocupó por al educación y el bienestar de toda la gente, tanto en su trabajo en el monasterio de Cuernavaca, como en su retiro aquí en su pueblo, incluso antes de morir donó algunos de sus queridos libros a la parroquia. .

Laura escuchó aquello. - ¿Obras personales o legajos de otra autoría legados?- .

. -No, estos eran los tomos que él usaba cuando hacia de tutor, era un hombre muy generoso y había decidido volcar sus conocimientos en varios libros para que otros pudieran impartir sus enseñanzas también. .

Laura sintió como su corazón volvía a acelerarse... sus enseñanzas volcadas en unos libros...era perfecto, simplemente perfecto . - Esto es interesante - . dijo Laura intentando disimular su emoción aunque un brillo había aparecido en su mirada . - ¿Me dejaría consultarlos?- .

. -Sí, por supuesto, era el sueño del padre Gregorio que todos pudieran nutrirse con su saber, no esta en mi prohibírselo. .

. - Perfecto, hoy ya se me ha hecho tarde pero intentaré volver cuanto antes hasta aquí - . dijo Laura sin poder ocultar del todo su emoción. - ¿Los ha leído usted? -. preguntó la chica para intentar hacerse una idea de su contenido.

. -Los que están en español sí.- .

. -Los otros están en latín supongo ¿no? ¿Y de qué tratan los tomos en castellano?- . La chica hubiera querido poder llevarse todos aquellos maravillosos tesoros y leerlos sin descanso hasta haber acabado de saciar su curiosidad aguijoneada reiteradamente aquella tarde.

. -Son muchos de sus conocimientos sobre la religión , su visión sobre las enseñanzas de la sagrada Biblia y otras cosas muy interesantes. .

. "un tratado teológico...buff... esto va a ser indigesto Lauriña... a ver los libros en latín, habrá que empezar por ahí". . - Si en efecto muy interesante -. dijo Laura de forma amigable . - Por cierto hablando hoy con la señora Pazos me decía que habían tirado parte de la colección documental que poseían, sabe el contenido a grosso modo de esos manuscritos?- .

. -No sabría responderle, el Padre Gregorio tenia muchos libros, había donado algunos al monasterio de Cuernavaca, en su casa guardaba los que más le gustaban según sé, pero no podría responderle concretamente. .

. - ¿Y usted no recuperó ninguno de dichos documentos para la parroquia? - . Laura quería averiguar el "criterio" de selección que había tenido el cura a la hora de salvaguardar unos documentos y permitir la quema de otros... . "Si podían haber ganado dinero joer... Por qué los tiraron! ¡Animales!" .

. -No, si el padre Gregorio hubiera querido que estuvieran en la parroquia los hubiera donado, eran propiedad suya y de su familia, yo solo les recomendé que dejaran lo que él tenia en su estudio en memoria suya. .

"Joder...claro en su memoria... ay!!! pero como pudiste permitir eso putain...avisa a cualquier museo que lo recogerían...la memoria, la memoria. Si tanto le gustaban hubiera preferido que fueran salvaguardados a quemados". . - Sí - . dijo Laura escuetamente intentando no demostrar su disgusto . - Bien, si no es mucha molestia me pasaré por aquí para consultar los tomos de los que me habló. He de irme a D.F que ya está anocheciendo - . dijo Laura observando como la luz solar había disminuido . - Un placer - afirmó a modo de despedida.

Tras la despedida del párroco se dirigió al coche y programó el GPS en dirección contraria emprendiendo nuevamente su ruta. En cuanto tuvo asomo de cobertura llamó a Mauricio con el manos libres del coche para que este no se preocupara más por su tardanza explicándole la situación y el hallazgo y tras despedirse del chico, llamó a Erick para informarle de todo aquello... En gran medida resultaba maravilloso aunque la perdida de documentación era sangrante... . "y si la clave se vio encriptada para siempre en una quema de documentos en una remota aldea mexicana" . pensó Laura mientras escuchaba el tono del teléfono en el coche.

. -Hola- . dijo la voz de una mujer al otro lado de la línea, sonaba bastante joven, pero evidentemente era una persona adulta.

Laura escuchó una voz inesperada, miró un segundo al cuadrante del teléfono del coche y pudo ver que no se había equivocado con la llamada. Tras un breve silencio dijo. -Hola, disculpe las molestias, soy Laura Saavedra y quisiera hablar con Erick si fuera posible. .

Al parecer la otra mujer también se sorprendió al oír a Laura del otro lado, pero al oír su nombre era como si le hubiese reconocido. -Ah sí, aguarda un instante pro favor, ya te lo paso- . Laura escuchó como se apartaba del tubo y pudo oír cuando lo llamaba . "Amor, es tu colega, Laura" "dile que ahí voy" contestó una voz que parecía ser la de Erick, la mujer volvió a tomar el teléfono . -dice que lo esperes que ya viene. .

Laura no pudo evitar sonreír con la expresión utilizada por la que sería sin duda su mujer. Ya había observado la alianza al dedo de Erick... La expresión de "colega" no dejó de sorprenderla. Erick era un especie de "ente superior" en el mundo académico a pesar de su sencillez absoluta y su amabilidad y aquellos vocablos la ponían a su nivel. . - Sí claro -. La chica miró para el reloj del coche eran casi las 21h y por lo que sabía los mexicanos no eran como los españoles en cuanto a horarios se refería . - Disculpe la hora de la llamada. - .

. -Esta bien, no te preocupes, recién acabábamos de comer y Erick esta lavando los trastos, ah ahí viene, te paso, adiós- dijo y Laura escucho como el teléfono pasaba de mano en mano -Laura- ahora sí la voz del catedrático sonó

Laura sonrió nuevamente al escuchar aquello de que Erick estaba lavando los platos. Si no lo hubiera conocido personalmente aquello incluso hubiera podido resultar cómico teniendo en cuenta su caché profesional - Hola Erick disculpa por la hora de la llamada pero pensé que te gustaría enterarte de los avances de hoy.- Laura tomó aire antes de proseguir dejando un espacio a su interlocutor por si quería decir algo.

-No te preocupes por la hora, no me acuesto hasta dentro de una hora, pero no hacia falta que me lo cuentes hoy si no tenias tiempo. Esto no es una legión romana, no se van a diezmar las tropas –

Laura sonrió de forma audible ante aquella típica muestra del "humor de historiador" - No claro que no, estoy en el coche y no me cuesta nada llamar con eso de los manos libres y demás - dijo para evitar cualquier tipo de sermón sobre la seguridad vial. Conocía lo suficientemente a Erick para conocer su lado paternalista protector. - Bueno estuve en el monasterio de Cuernavaca esta tarde y lo primero no sé muy bien por qué pero parece que los monjes han sido víctima de una especie de abducción extraterrestre. No sólo fueron amables sino que colaboraron y su colaboración fue muy fructífera.- Laura fue relatándole los diferentes hallazgos del monasterio, la caja de madera, el papel de “agente doble” del abad Pazos, la carta del famoso inquisidor...

Erick guardó silencio unos segundos asimilando todo lo que Laura le decía, era un giro inesperado en los acontecimientos. Una vez mas la suerte se ponía de su lado para llegar a lo mas alto ¿vendría luego de eso otra de esas recaídas mortales? ¿o ahora si todo marcharía viento en popa? - ¿que más? de sus discípulos descubriste algo ¿las desapariciones? ¿los documentos?-

- Pues es que aquí es donde viene lo mejor. Cuando fui a solicitar documentos acerca de los discípulos de Pazos el monje me dijo que no tenía nada referente a ellos pero que si eran discípulos de Pazos a lo mejor podía hallar algo en su casa en el pueblo al que se retiró, Paso de Buey. - La chica se quedó un instante pensativa - La verdad es que no sé siquiera de donde sacó esa información y me quedé tan...tan...emocionada ante la expectativa que no se me ocurrió preguntarle. - Laura negó un instante maldiciéndose por aquel error... Nunca había soportado tener ese tipo de despistes – Bueno, la cuestión es que me fui hasta ese pueblo y después de unas pocas preguntas averigüé en donde estaba la casa de los Pazos. Al llegar ahí me atendieron y me enseñaron el estudio del abad. - La chica siguió relatando los acontecimientos con emoción primero... la habitación intacta, con disgusto luego, la quema de documentos y de nuevo con tono vibrante al relatar el hallazgo del diario.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Mar 19, 2007 7:46 pm

-Lo quemaron?????- Erick no tenía reacciones para las cosas que Laura le contaba -Se puede ir a la casa del Abad? Tenemos que ir a visitarla, yo te acompaño la próxima vez.

- Claro, obviamente – dijo la chica emocionada. Le fue relatando el papel del párroco en la quema de los papeles comentando a continuación lo que había podido leer del diario, el latín culto del XVII así como la nueva visión de Pazos ofrecida en su propio escrito.

-Toda humildad eh- dijo con sarcasmo imaginándose las descripciones que el abad debía dar de si mismo - y con el párroco ¿intentaste hablar? quizás él salvo algunos documentos...

- Sí, así es. Al salir de la casa fui a ver el párroco... Parece que ya había funcionado el típico voz a oreja de las aldeas porque ya se medio esperaba mi visita. Le pregunté sobre ese tema justamente pero me vino a decir que el abad no había querido donar esos documentos ni a la parroquia ni al monasterios, así que la cuestión de permitir la quema era respetar su voluntad - dijo Laura con un evidente escepticismo y cierto sarcasmo.

-Si estoy seguro de que al abad le hubiese encantado que quemasen los libros que había juntado durante su vida, por eso se los dejo, dios mío algunas personas-

Dos pequeños puntos dorados aparecieron en al oscuridad de la noche frente a Laura y rápidamente se dio cuenta, era un animal que estaba parado en medio del camino.

Laura reparó en los puntos - MERDE! - pegó un frenazo y un volantazo para evitarlo. Lo sorteó justo a tiempo. Por el volumen el animal podía haber producido un buen choque. Estaba perdiendo el control del auto. Con celeridad pegó un contravolantazo, volviendo a situarse en su carril – PUTAIN DE MERDE! JODER! ... PUTO BICHO!-

La vaca no se inmuto, se mantuvo allí parada mirando como Laura casi las mataba a ambas. Erick escuchó las frenadas y luego a Laura maldecir -Laura ¿qué paso? ¿Estás bien? ¿Laura?-

Laura tragó saliva "odio esto...por qué tendré que moverme con un puto coche...por qué los inventaron...por qué existen..." La chica necesitó unos segundos para volver a centrarse aunque el susto todavía no se le había ido del cuerpo - Una "puta" vaca en medio de la carretera, ahí esperando a que alguien se espete contra ella - dijo Laura presa del típico cabreo y lenguaje que utilizaban los conductores en esas situaciones.

-Pero no te ocurrió nada ¿no? tu estas bien, pudiste esquivarla,¿no te hiciste daño?- Erick estaba desesperado, no podía estar pasando aquello....

- Un susto no ha sido más que un susto -dijo Laura intentado tranquilizar a Erick y a ella misma [b][color=seagreen]- No ha pasado nada al final... Frenazo, volantazo...perdí el control del coche y lo recuperé... y todo bien, perfectamente, estoy bien - dijo Laura todavía con cierto nerviosismo. - No ha pasado nada –

-No iba decirte nada, porque no quiero que pienses que te ando dando sermones a tu edad, pero no puedes ir conduciendo y hablando por teléfono, tiene que concentrarte en el vehículo, no importa que tengas las manso en el volante, dios mío laura podría haber sido una catástrofe!-

Laura negó y no pudo evitar reírse ligeramente... realmente empezaba a conocer a Erick ya anticipaba sus "sermones" - Bueno nunca me gustó hablar con el móvil en el coche... pero esto es como tener a alguien al lado y lo de ahora fue porque había algo poco previsible. Si no hubiera estado atenta me hubiera empotrado contra la vaca. - A veces le recordaba a su madre o un especie de padre historiador.

-Ya manejar de noche es peligroso, además por esos caminos tan agrestes es normal que los animales se crucen- volvió a respirar mas tranquilo, aun tenia el corazón en al boca - Eres peor que mi hija, un día de estos me vas a matar de un susto.

Laura se rió - Sí, bueno, creo que sería más feliz ahorrándome los sustos... Como le digo a mi madre soy la primera interesada en que no me pase nada - dijo Laura riendo ligeramente nuevamente. Realmente haberse topado con Erick había sido una suerte. - Bueno y a todo eso no terminé con todo porque todavía hay algo más... Hablando con el párroco me dijo que el abad Pazos también donó unos tomos con las enseñanzas que impartía a sus discípulos a la parroquia. El hombre solo leyó los tomos en castellano que al parecer en gran parte son un tratado en teología pero todavía quedan los manuscritos en latín y algo me dice que por ahí podemos tener más suerte - dijo la joven nuevamente emocionada. - Laura se quedó un instante callada - No sé que me pasa últimamente pero tengo un especie de imán documental... No puedo creer estos vaivenes con la suerte! - Laura se rió con la situación...El día anterior había pasado uno de los peores ratos de su vida y sin embargo aquella tarde había sido simplemente perfecta.

-Si, tenemos que investigar ese lugar con detenimiento, los tomos que ahí ha de haber... no puedo ni imaginarlo

- No pude ni empezar...pensé en un diario, busqué un poco y apareció - dijo riendo sin creer en su suerte - un imán...

-Pareces la protagonista de alguna antigua leyenda griega con esos golpes de suerte cambiante, esperemos que sea de los pocos mitos con buen final-

-Sí la verdad es que paso de ser Casandra o Ifigenia... No me apetece que me sacrifiquen en ningún altar- dijo Laura riendo ante aquella broma.

-Bah tranquila que tu no eres una Casandra, más bien eres una Penélope, que persevera y al final logra su anhelo y la felicidad.

Laura sonrió - Según como se mire. Hay añadidos finales en la Odisea y no son muy felices que digamos... En una Odiseo la abandona y en la otra la asesina Telegonos.- dijo la chica con sorna.

Erick negó con la cabeza como si Laura pudiera verle -Eres terrible...- dijo al ver con lo que Laura le salía - Además deberías saber que las fuentes de esos finales son poco fiables y que por consenso "el final" aquel que yo cite, las pruebas historiográfica sobre los otros dos dejan mucho que desear.

- Ya - dijo la chica riendo - lo sé - Iba a rebatir aquello por pura cabezonería - Pero todo es siempre discutible, la Odisea es fruto de tradición oral. Si estas versiones aparecen es que en algún momento fueron contadas. Si bien no son las mayoritarias deberían ser tenidas en cuenta por lo que tienen validez histórica.

-Sí, pero incluso en las civilizaciones modernas es imposible hacer caso a las tradiciones orales, su mutabilidad es constante y por ello debe formarse un consenso sobre la más correcta de las versiones, y este problema aumenta radicalmente mientras más antiguo es el mito en cuestión.

- Yo no discuto en ningún momento ese punto- dijo Laura con terquedad, sabía que Erick tenía razón pero no quería dejarse doblegar - El mito es oralidad, la oralidad es subjetiva y versátil. Hablar de consenso para un mito del s.VII antes de nuestra Era, es algo complicado ya que las fuentes son mínimas y pasaron una criba totalmente aleatoria que no es otra que la de los avatares del tiempo. Por lo que de nuevo entramos en un criterio de subjetividad. ¿Ha de ser mayoritaria una versión por un simple criterio cuantitativo?-

-Penélope era una buena persona, pero no una buena mujer para los valores de la sociedad donde vivía. Una buena mujer debía cumplir con su rol de progenitora y Penélope al esperar a su amado y engañar tanto tiempo a sus pretendientes no cumplía con lo que la sociedad esperaba de una mujer como ella.-

- Pero Penélope era una mujer casada que cumplía con sus votos de fidelidad, no solo para con su marido sino también para con su país, si es que podemos llamarlo así aunque incurrimos en un anacronismo bastante grande, aunque la idea de base es la misma. No traiciona a ninguno de estos valores y por ello no quiere procrear. Al contrario Penélope es un ejemplo moral ya que no cae en ningún tipo de vicio. -

-Pero estas fijándote en una visión de los valores y el matrimonio demasiado catolizada, el deber de Penélope a los ojos de la sociedad de su época no era el de amar a su esposo, era el de honrarlo dándole progenie y educándola. Al partir Odiseo a un viaje del cual le tomaría 20 años volver, el deber de Penélope como mujer joven era el de ser útil para su sociedad y complacer a otro hombre pues.-

Laura negó - Sinceramente no creo que le esté dando valores judeo-cristianos. Los valores que expongo son de índole indoeuropeos con paralelismos en las diferentes culturas euroasiáticas como exponía Dumezil, por ejemplo. Penélope ante todo honra a su marido ya que protege a su descendencia y a sus intereses. No lucha por ella en ningún momento sino por el futuro de Ítaca y de su progenie. Telémaco en esa nueva situación no podría reinar y con ello mantener a Ítaca en la órbita del mundo griego. Ante todo es un sacrificio patrio. La tenacidad en la defensa del ideario heleno.

He ahí el punto, su deber es honrar a su marido mientras este a su lado, pero al no poder hacerlo sus deberes cambian y ella ha de honrar a otro hombre.-

- Pero aparte de mujer de Ulises es también reina de Itaca. Tiene que defender a la isla y eso es justamente lo que hace. A eso hay que añadir que a pesar de las dudas cuenta con el apoyo de Atenea que le asegura que Ulises está vivo. La diosa Pallas en persona está de su lado siendo ésta una de las pocas diosas que muestra unos valores cuasi intachables. Penélope defiende a su patria y es una mujer que demuestra un gran sentido religioso.

-Pero eso no es algo que su pueblo sepa, lo que ellos saben es que Ulises fue a una guerra de la que probablemente no regrese, y el trono del rey esta vació y su hijo siendo criado por una mujer, sin una figura masculina como guía.-

- Pero Atenea esta con Ulises. Ella no puede fallar. Cuando corren rumores de la muerte de Ulises en algunas versiones, la pobre Penélope se tira acantilado abajo y es Atenea quien manda a unas aves a salvarla... un hecho para volver reafirmarla en su actitud...para mantener su aliento y su creencia en la vuelta del héroe, del verdadero rey de Itaca.-

-Entonces porque permitiría Atenea que Ulises mate a su hijo o abandone a Penélope? - inquirió Erick y entonces se escuchó la voz de aquella mujer de fondo- aguarda una momento Laura- el catedrático alejó el teléfono y aun así se pudo oír "¿qué me decías?" "decía que en esas otras versiones Penélope le era infiel a Ulises y por eso él hace lo que hace" "es cierto gracias cariño" Erick volvió a tomar el teléfono -Verónica tiene razón y acaba de poner punto final a la discusión sin saberlo- rió un poco - Odiseo hizo lo que hizo en esas versiones porque Penélope no era lo que se supone que era, había cometido adulterio, lo había olvidado.-

-Jaque mate - dijo Laura riendo - Sí es así -dijo riendo nuevamente - Lo que pasa es que no podía reconocerlo porque iba a incurrir en una contradicción, me acordé a mediados de discusión. Si incluso en una de esas versiones se acababa acostando al mejor estilo de Mesalina con ciento y pico pretendientes y entre ellos estaba el Dios Pan – La chica se rió -...Lo que pasa es que reconocerlo era echar abajo todo el resto de la argumentación - dijo Laura entre divertida y tímida.

-Lo peor del caso es que me lo haya tenido que recordar una Antropóloga, ni siquiera es su tema, Dios mío, ¿ahora quien le baja el ego?- rió

Laura se rió - Bueno piénsalo así...la mitología es antropología al fin y al cabo...- La chica estaba metida en el tráfico de D.F. Se escuchaban algunos bocinazos de fondo. - Bueno y después de este debate, volviendo a lo nuestro tendríamos que ponernos de acuerdo con lo de ir a Paso de Buey... ahora entiendes el porque de mi comportamiento castrense - dijo riendo.
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Abdul Al Hazrad
Artífice del foro
Artífice del foro
Abdul Al Hazrad


Cantidad de envíos : 147
Edad : 43
Ubicación : Lanús
Ocupación : Playboy Multimillonario
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeLun Abr 23, 2007 2:14 am

Todo había terminado, a lo lejos se oían las sirenas, y las luces de las casas del vecindario estaban prendiéndose. Algunos vecinos se asomaban por las ventanas, observando el despliegue de los efectivos de la empresa de seguridad privada. Nehuel volvió a su departamento luego de declarar media hora en el departamento de policía, Riviera y su esposa habían partido hacia el aeropuerto escoltados por algunos de los hombres de Gutierrez.

No terminó de cerrar la puerta, que recibe un llamado a su celular. Era uno de los custodios de Riviera. Un asaltante había aparecido de la nada y le pegó un tiro en el abdomen a la mujer de Rivera, logrando escapar. La estaban llevando al hospital, seguramente pierda el bebé, y puede que la mujer también muera.

Nehuel cortó, tomó su placa, el arma, y su chaleco y se dirigió a toda prisa hacia el hospital.

En el hospital, en la entrada estaba el hombre de la empresa de seguridad que lo llamó por teléfono. Nehuel fue acompañado por el jefe de éste, quien no dice mucho y los llevó rápidamente a donde estába Gustavo, a la mujer no podían verla, estaban tratando de salvarla.

-¿Cómo está? ¿se encuentra bien?-
Le preguntó Nehuel al custodio de la pareja, que estaba también en la sala de espera.

-No creo que sobreviva.- Dijo refiriéndose a la mujer. -Tuvo que ser el que no estaba en la casa, salió de ningún lado, disparó un solo tiro y justo al abdomen, lo perseguí, pero no pude alcanzarlo, había mucha gente y se perdió rápidamente.-

-Tengo la identidad de todos los miembros de la banda, dígame como estaba vestido, y voy a pedirle a la policía que emita un pedido de captura inmediátamente.-

El hombre asintió e hizo una breve descripción. No lo había visto muy bien, lo que pudo ver fue que llevaba una campera de cuero marrón y unos jeans, todo había pasado muy rápido y no podía decir nada más, pero no importaba ya que Nehuel tenía el nombre y al foto del sujeto. Llamó al departamento de policía y pidió que ubiquen a la persona.

Nehuel se aproximó a Riviera, le dió unas palmadas en la espalda, buscando acercarse. Gustavo estaba en un estado que mezcla la desesperación con al furia homicida, tiene a su vez los ojos inyectados en sangre y vidriosos, pero sin llegar a llorar. Esta demasiado alterado como para quedarse sentado y cuando le tocó la espalda, Nehuel se dió cuenta de la tensión que tenía encima; pero sin emabargo Riviera no decía nada, estaba como mudo.

Nehuel no le dijo nada por unos minutos, no hay nada que decir en esa situacion. -Vamos a agarrar a ese hijo de puta.-

-No, voy a a agarrar a ese hijo de puta y a toda su familia, y le voy a hacer sufrir mil veces más de lo que él le hace sufrir a Olimpia.-

-Lo que no comprendo es la zaña, por qué estan empecinados con su mujer. Quién carajo les ordenó capturarla.-

-No lo sé, pero cuando me entere, él y todas las personas que lo conocen van a sufrir el infierno en vida.-

-Le entiendo. ¿Quién es el médico que está atendiendo a su esposa? Quisiera hablar con él.-

-No sé como se llama, pero todavía están interviniéndola, sacando la bala y tratando de salvarlos a los dos.-

-Ok, voy a averiguarlo.- Nehuel se puso de pié y se fue a buscar al jefe del sector, preguntándole a los enfermeros, sacando su placa si fuera necesario.
[color:f8a2=blue:f8a2]
-La está atendiendo el doctor Barrionuevo,- dijo una de las enfermeras -pero todavía está allí dentro, su estado es muy grave al parecer.-[/b]

-Gracias.- "mierda" pensó. Sabía lo que implicaba una bala en el abdomen. Se relajó. No quedaba más por hacer, sólo esperar. Se sentó en la sala de espera y llamó al departamento de policía, esperando alguna buena noticia.

Los minutos pasaron lentos, el clima era muy tenso en el lugar, pero al cabo de diez, tal vez quince mintuos, que parecieron el doble, el médico salió de al sala de urgencias. Su cara lo decia todo.

Gustavo fué rápidamente frente al doctor quien negó con al cabeza y dijo algo que solo él ahora viudo pudo oir. Gustavo pareció enloquecer y agarró al doctor sacudiéndolo, empezando a gritar descontrolado. Nehuel corrió y retuvo a Riviera. -Tranquilo, de nada sirve que pierdas la cabeza.- Sabía que le pedía algo casi imposible.

Riviera estaba enloquecido, no sabía lo que hacía o decía, culpaba al médico por no haberla salvado, estaba descargando todo con aquel hombre que nada tenía que ver. Nehuel le pidió a los custodios de Gutierrez que retuvieran a Gustavo, hasta que se calmara. Se llevó al médico, y le pidió los detalles de la operación, así como cualquier dato que le pareciera relevante al profesional.

El disparo, intencional o no, había sido certero, atravezando varios órganos y dañándolos severamente. Cuando llegó al hospital, el feto ya estaba muerto y la mujer había perdido demasiada sangre, hicieron lo que pudieron, pero fue imposible salvarla. No podía decir mucho más ya que todo fue muy rápido, para más información debería hacerse una autopsia.

No había nada que hacer. Nehuel le pidió al psiquiatra del hospital que le resatara unos calmantes a Gustavo, y acompañó al viudo hasta una nueva habitación de hotel. Luego regresó a su departamento, se dió una ducha y se acostó, agotado.

Nehuel se despertó, decidido a encontrar al asesino de la esposa de Riviera. Sabía que vivía en un barrio peligroso, de esos que solo hay en latinoamerica. Preparó su arma, se puso su chaleco, tomó su celular y partió, dejando la placa de Interpol en su departamento. Llevaba anotada la dirección del asesino. Sabía que tomaba riesgos, pero estaba iracundo. Había arriesgado tanto para poder rescatar a esa mujer con vida, y ese hijo de puta había hechado todo a perder. Ya no era una cuestión policíaca, ya era algo personal. Tomó un taxi y se aproximó a ese barrio de mala muerte.

El taxista comenzó a adentrarse en aquella zona, y a las pocas calles se detuvo. -Más de aquí no voy, el resto hágalo a pié.-

-Bien, gracias, acá tiene. Esta calle, ¿sabe para donde queda?-

Lo miró un instante, "este tipo ha de estar loco"[color] pensó el taxista, pero finalmente dijo [color=brown]-Sí, cinco calles en esa dirección, luego doble a la derecha otras cuatro.-

-Gracias, adiós- Dijo, y se bajó del taxi, con paso decidido fue en busca de la casa que indicaba la dirección. No conocía los códigos de aquel barrio, esperaba no llamar demasiado la atención. Estaba atento a los alrededores, pero se concentró en parecer lo mas distendido posible.

Quizás por la hora, quizás por mera suerte, Nehuel llego sin problemas a la dirección que buscaba, era una casa, destartalada, pero una casa. Miró a los alrededores, asegurándose que nadie estuviera mirándolo y se acercó a la puerta, buscando una ventana, para ver el interior. Nehuel ingreso a la casa, abriendo sigilosamente una de las ventanas del frente de la casa. Con su arma silenciada en mano, empezó a revisar el lugar, como lo habían entrenado a hacerlo, cubríendose en casa puerta, atento a cualquier movimiento.

El interior de la casa estaba vacío, pero había señales que indicaban que alguien vivía ahí, e incluso que alguien podría haber salido hace poco o volver en cualquier momento. Nehuel cerró la ventana por la que ingresó, procurando dejarla como la había encontrado, y revisó el resto de la casa, incluyendo el patio trasero. Al acercarse a la puerta trasera, pudo oir ruidos que provenían del otro lado, había alguien en el patio. Observó por la ventana lo que ocurría, discretamente.

Había una mujer, mexicana seguramente, que estaba lavando algo de ropa, era una mujer bastante mayor, aunque no llegaba a la tercera edad, quizás tuviera la misma edad que al madre de Nehuel, quizás más quizás menos.

Pobre mujer, seguramente no se merecía estar en ese barrio, o tener "¿un hijo?" como ese. Había dos habitaciones en la casa, una con una cama matrimonial, la otra con una cama simple. Nehuel se ocultó en la habitación simple, que supuso era del hombre que buscaba, y espero allí.

Media hora mas tarde la puerta de la habitación se abrió, y Nehuel pudo ver como la mujer entraba para dejar un monton de ropa. Nehuel se mantuvo en su escondite, atento a lo que ocurría, no quería cometer errores. Cuando la mujer se dió vuelta para salir de la habitación, alcanzó a ver a un extraño en su casa y soltó las cosas que tenía en sus manos para gritar aterrada. Nehuel salói inmediátamente de su escondite, reteniendo a la señora, tapándole la boca.

-Tranquila señora, si se calma le explico todo.- Dijo con tono firme.

La mujer no entendía lo que pasaba, había un hombre, armado, escondido en su casa y que se le había avalanzado encima. Intentaba gritar y movía sus brazos intentado zafarse, era presa del pánico.

-Cálmese señora, nada va a pasarle si coopera.- Le ordenó a la mujer.

La mujer estaba en pánico, no entendía razones, seguía intentando safarse y gritar por todos los medios. Nehuel, sin otro remedio, amordazó y ató a la mujer, procurando no lastimarla. Fue difícil llevar a cabo la tarea sin hacerle daño a la mujer, estaba demasiado alterada, pero al final pudo lograrlo.

Nehuel, con la mujer inmovilizada, intentó hacerla entrar en razón, estando atento a lo que ocurría en la casa. Le preguntó por el hombre que buscaba. Lágrimas corrían por el rostro de la mujer desesperada mientras negaba y por sus adentros rogaba que no la mataran.

-Señora, cálmese, soy policía, nada va a pasarle si coopera, ahora respire profundo y calmese.- Nehuel le dió unos minutos a la mujer para que se calmara.

La mujer seguía llorando, pero unos cuantos minutos después dejo de moverse, seguía con miedo, seguía llorando, pero ya no era presa del pánico.

-Bien, voy a sacarle la mordaza, y usted se va a quedar en silencio. Nada va a pasarle si coopera.- Dicho ésto, Nehuel esperó la respuesta de la mujer, si le decía que si, le soltaría la mordaza. Ella asintió varias veces con al cabeza.

Nehuel le retiró la mordaza. -Bien, ¿podemos dialogar un momento? Dígame lo que quiero saber, y me voy.-

-Por favor no me mate, no me haga nada, yo no se nada, solo soy una mujer, no me haga nada, no me mate.-


-No voy a lastimarla, ahora, ¿conoce a este hombre?- Nehuel le mostró la foto del prófugo. Ella negó con la cabeza.

-No lo conozco, no sé quién es, yo no soy nada, sólo una mujer que plancha y cocina para su marido y su hijo.-

Nehuel le nombró al hombre que buscaba. -¿Oyó de él alguna vez?-

Negó con la cabeza -No, yo no lo conozco.-

-¿Hace cuánto que vive en esta casa?-

-Hace... hace, cinco años, hace seis años, no, no, cinco, cinco.-

Nehuel le mostró nuevamente la foto del hombre que buscaba. -¿Lo vió por el vecindario últimamente? ¿Lo reconoce?-

-No, nosotros no conocemos a la gente del barrio, somos gente honrrada y humilde, por favor no me lastime.-

Nehuel liberó a la mujer. -Si vé a este hombre, evite tener contacto con él, es muy peligroso. Ahora, espere unos minutos en la habitación, yo voy a irme, nada va a pasarle, y nada va a faltarle. ¿Me entendió? Se queda quietita y callada acá, unos quince minutos.-

-Pero por favor no me haga nada.- Rogó la mujer.

-shhhh...- siseó Nehuel llevándose el índice a la boca. Guardó su pistola y salió de la casa, cautelosamente. Vigilando que nadie lo viera. La zona parecia aún en bastante calma, Nehuel estaba seguro de que nadie le había visto entrar ni salir.

"Mierda" pensó. Lo que había hecho era una locura, se sentía mal por haber aterrorizado a aquella mujer. Sin embargo, decidió investigar, y dar con el hijo de puta que mató a Olimpia.
Volver arriba Ir abajo
Lucie de Bélancourt
Doctora en chancletología
Doctora en chancletología
Lucie de Bélancourt


Cantidad de envíos : 240
Edad : 43
Ubicación : Gallaecia
Ocupación : Diva...
Fecha de inscripción : 08/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMar Abr 24, 2007 4:11 am

Era Viernes por la noche... Un viernes más, el gran momento, el momento de explayarse y dejar que la alegría, tensión, satisfacción, dolor, amor, odio pudieran liberarse en un roce, en un grito desgarrador, en un susurro, en un poderoso crescendo.
Laura había recibido un sms de Héctor por la tarde diciéndole que mirara la página 23 del Universal. Ahí en la sección cultural del fin de semana vio una breve reseña que anunciaba su concierto en el Blowin’ in the wind.
Después de los acontecimientos de aquella semana, de la vorágine de sentimientos vividos y enfatizados en aquellos días, la historiadora tenía un especial deseo por actuar. Y así había llegado al local en compañía de Mauricio, una hora antes, como acostumbraban a hacer cuando por la puerta del local pudo vislumbrar dos figuras que se fueron acercando.
Laura que hasta entonces estaba hablando tranquilamente con su pareja, compartiendo sonrisas, intercambiando miradas y algún que otro beso aunque por suerte en aquel momento simplemente se hallaba dialogando, pudo ver como se avanzaban Jóse y Ana, sus amigos del conservatorio por la puerta “Merde...merde...” – Mauricio – dijo por lo bajo - Jóse y Ana - Fue lo único que alcanzó a decir antes de levantarse con una sonrisa en los labios. La sonrisa no era fingida, pues apreciaba el detalle de sus compañeros al venir a verla aunque suponía un problema logístico por el tipo de relación que mantenía con Mauricio.

El amanecer Jose10

El amanecer Ana10

- Ey ¿ qué tal? – dijo Laura - ¿Y vosotros por aquí?

- Nosotros.. – dijo Jóse – Pues nos tenemos que enterar por el periódico que tu, pendeja, tocas en un local. – afirmó el chico sin verdadero resquemor.

“a ver que digo...” – Bueno – dijo Laura con una sonrisa confusa – Es que me da corte que me vean... me da palo que me vea gente que conozco y más siendo del conservatorio – afirmó algo colorada. “que cuele, que cuele...” estaba deseando la chica.

Jóse y Ana se rieron – Mira que eres pendeja – dijo Ana – Tu y tus manías...de que si no lo hago perfectamente bien y bla bla bla ... Mensa.

Laura se rió – Me podías haber avisado al menos, que venías, aparte de no haber pagado entrada, me podría haber preparado psicológicamente...menudo palo – afirmó Laura siguiendo por aquel lado, a sabiendas que aquel espíritu perfeccionista que los demás veían en ella la estaba encubriendo perfectamente.

- Bah, tranquila tonta – dijo Jose tomándole el brazo – No te vamos a comer, además ya sabemos como tocas y lo haces muy bien – dijo el chico con una sonrisa en el rostro.

- Además – añadió Ana hablando más bajo – No debemos ser los únicos que piensan que lo haces bien...si hasta vino el profe de canto, Mauricio – dijo riendo mirando de refilón hacia él – Je je...siempre te dije que le gustabas a este tío –

- Bah! No seas tonta –dijo Laura intentando sacar peso a aquello – Vino porque tenía tiempo hoy y es amigo del dueño del local – pura casualidad, dijo sonriendo – Además si le gustara tu crees que me hubiera puesto una advertencia?... Eres una mensa. – afirmó Laura riendo.

- Mensa o no está aquí – dijo una Ana sonriente y exultante - Y parece que estabais entretenidos charlando – añadió Jose riendo.

- Me preguntaba por lo típico...que tal México y todo eso y como soy poco parlanchina - afirmó Laura riendo y a continuación los miró y arqueó una ceja – ¿Y vinisteis así, sin nada? ¿Dónde está tu violín Ana?-

- En casa...aburrida de practicar para que ese sádico de Pereda quiera hundirme en la miseria – dijo la chica negando

- No te me quejes con Pereda...que a ti no te saca a tocar en todas las benditas clases aunque debe ser terrible el tío, con el violín como primer instrumento.... Pero no nos desviemos el tema – dijo Laura sonriendo – Tu no tienes el violín a mano...pero hay un magnífico piano – dijo Laura mirando a Jóse con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Quieres que toque? – se rió – Estás como una cabra, Laura – sonrió – Bah...sólo porque eres tu –

- Te paso la partitura ahora...para que le vayas echando un vistazo antes del concierto...así no os podréis meter conmigo – dijo Laura riendo – si participáis en esto sois cómplices.-

- Sí –dijo José –pero con premeditación y alevosía tuya – dijo riendo. Ana estaba un poco distraída mirando para Mauricio – deberíamos ir a saludarlo – afirmó la chica –es lo mínimo...

Laura sintió un sudor frío...las versiones tenían que coincidir... Mauricio tenía que estar en el local porque era amigo del dueño... “el móvil...lo aviso con el móvil”. Se echó la mano al bolsillo. – Voy ahora, que me acaban de mandar un mensaje, contesto y de paso voy a cogerte esa partitura – dijo mirando para José.

- Venga...vamos – dijo Ana tirando ligeramente de la manga del chico. – La verdad es que no podíamos haber elegido mejor día para venir a verte –afirmó Ana con una sonrisa en los labios e inclinando la cabeza señalando a Mauricio, haciendo un breve guiño a Laura.

La gallega se rió “si tu supieras Aniña...si tu supieras...”despidiéndose brevemente con la mano y sacando ya el movil. Escribió rápidamente mientras iba andando hacia la parte trasera del escenario: “Stas aki xq eres amigo dl dueño”... Laura odiaba ese tipo de escritura que le parecía una masacre de la lengua de Cervantes pero el tiempo imperaba...

El local fue llenándose a los pocos, Laura volvió junto a Ana, José y Mauricio para llevar aquella partitura. Se retiró bastante pronto pues tenía que calentar su voz y ejercitar sus dedos antes de empezar el concierto.

La hora había llegado y Laura salió al escenario, sonriente, exultante... Se sentía féliz por el mero hecho de estar en aquel lugar. De poder compartir su música con la gente, de poder dejar salir todo lo que sentía hacia fuera expulsándolos de la caja de pandora a la que se asemejaba su mente.
Las notas empezaron a brotar de su guitarra...empezaría con la canción que ya era la “de siempre”... La que había dedicado a Mauricio y que en aquella noche cobraba más valor por la comedia que estaban actuando contra sus voluntades.
Los temas fueron pasando con fuerza, sensibilidad, tibieza y garra.

- Me gustaría contar para esta canción con la colaboración de un compañero, José Serrano – dijo Laura mientras el chico iba subiendo al escenario - excelente pianista, no menos buen amigo y un Amenábar en ciernes, componiendo las canciones de sus cortometrajes que os animo a ver, al menos de momento y esperando tiempos mejores, a través de internet – dijo Laura sonriendo a la vez que José se sentaba en el piano. Se le veía un poco tímido tras el halago de la chica.
- Para introducir la siguiente canción, “peces de ciudad” me gustaría citar a esa gran y talentosa mujer Rosalía de castro, madre de las letras gallegas: “Bajemos, pues, que el camino antiguo nos saldrá al paso, aunque triste, escabroso y desierto, y cual nosotros cambiado, lleno aún de las blancas fantasmas, que en otro tiempo adoramos.”... Adentrémonos pues...- –

Las miradas de Laura y José se cruzaron con complicidad dando el chico inicio a la canción con unas suaves notas del piano. La voz de Laura empezó a resonar, con delicadeza y fuerza a la vez, con ternura y desgarro, con amor y desamor, con clarividencia y perdición...

http://rapidshare.com/files/27511955/Jazzean2__Zahara_y_Aure___03-2004__-_Peces_de_ciudad.mp3.html

- Se llamaba Alain Delon
el viajero que quiso enseñarme a besar
en la gare d'Austerlitz.

Primavera de un amor
amarillo y frugal como el sol
del veranillo de san Martín.

Hubiera querido ser yo,
La primera en olvidar
cuando en un si bemol de Jacques Brel
Me perdí en el Port d’Amsterdam

En la fatua Nueva York
da más sombra que los limoneros
la estatua de la libertad,

pero en desolation row
las sirenas de los petroleros
no dejan reír ni volar

y, en el coro de Babel,
desafina un español.
No hay más ley que la ley del tesoro
en las minas del rey Salomón.

Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis sueños va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de un no te quiero querer.

Y cómo huir
cuando no quedan
islas para naufragar
al país
donde los sabios se retiran
del agravio de buscar
labios que sacan de quicio,
mentiras que ganan juicios
tan sumarios que envilecen
el cristal de los acuarios
de los peces de ciudad

que mordieron el anzuelo,
que bucean a ras del suelo,
que no merecen nadar.

El Dorado era un champú,
la virtud unos brazos en cruz,
el pecado una página web.

En la latina comprendí
que al lugar donde has sido feliz
no debieras tratar de volver.

Cuando un vuelo regular
surque el cielo de Madrid
me esperaban tus pies en el suelo
pero no se acordaban de mí.

Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis venas va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de no te quiero querer.

Y cómo huir
cuando no quedan
islas para naufragar
al país
donde los sabios se retiran
del agravio de buscar
labios que sacan de quicio,
mentiras que ganan juicios
tan sumarios que envilecen
el cristal de los acuarios
de los peces de ciudad

que perdieron las agallas
en un banco de morralla,
en una playa sin mar –



Las notas se fueron desgranando, las teclas del piano imprimían los últimos compases, hasta que por fín el silencio se hizo. Un silencio turbador, nadie se movía, nadie hablaba, ni un leve respiro. Laura volvía a aquella realidad atrapada en un imponente mutismo. Los segundos se fueron sucediendo hasta que al fín se escuchó un aplauso solitario que pareció ser el detonante de una reacción en cadena. Como en un laberinto de dominó, los espectadores empezaron a aplaudir una tras otro. El silencio se había roto.


Última edición por el Mar Abr 24, 2007 3:24 pm, editado 1 vez
Volver arriba Ir abajo
https://astrorojo.editboard.com
Augusto Cartago
Ancillae
Ancillae
Augusto Cartago


Cantidad de envíos : 87
Fecha de inscripción : 09/02/2007

El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitimeMar Abr 24, 2007 4:15 am

Laura se retiró del escenario por un lateral del mismo, realmente se había salido por lo menos para Héctor.

-Bueno chicos, ¿qué os ha parecido?- preguntó dirigiéndose a Cristóbal y Antía.

Cristóbal, con sus gafas de pasta sin graduación y su americana con tres chapas parecía el típico indie salido del FIB[color:aec1=red].*1

-Sinceramente me ha parecido fabulosa, tiene una voz prodigiosa, es la nueva la nueva Françoise Hardy. Oye me la tienes que presentar Héctor, creo que me he enamorado.-

Héctor se rió -Bueno pues esmérate porque tiene novio.-

-Bueno ya sabes, ante una buena crítica, los artistas hacen cualquier cosa- dijo Cristóbal entre risas –

Antia rió de aquel ultimo comentario negando con la cabeza - Hombres - dijo y entonces señalo con la cabeza por donde Laura debía aparecer - vamos a ir a saludarla o no?- -Vale vamos, espero que no tarde en salir- dijo Héctor

El concierto salió mejor de lo que Laura había imaginado...realmente estaba exultante. Se había sentido muy a gusto en el escenario y en cierta medida se sentía renovada como si el concierto hubiera tenido el don de hacer olvidar algunos acontecimientos y enfatizar otros. La chica fue avanzándose bajando las escaleras y entrando en la sala.

-Estas como una cabra - dijo Jóse mientras reía caminado con Laura - pero debo admitir que salió bien- Pudieron ver entonces al "grupo de admiradores de Laura" esperándoles, la joven historiadora pudo ver como se habían juntado varios de sus conocidos, estaban Ana con Mauricio, Héctor junto a Antía hablando con otro hombre y también se encontraba allí Erick.



La chica se rió - Un poco...a veces viene bien - Laura vio a toda aquella gente...con cierta sorpresa. No se esperaba la visita del catedrático por ejemplo Realmente estaban ahí reunidos las personas que mas apreciaba en México, Erick, Mauricio asi como Jose y Ana... y también estaba aquel periodista, Héctor que a pesar de haberla metido en un lío con su incursión en el monasterio de San Miguel no resultaba mala persona.


- Hola a todos - dijo sonriendo algo abrumada por la sorpresa de verlos a todos .

-Wow si que tienes un sequito- dijo Jóse la notar la cantidad de gente. La mayoría respondió al saludo de Laura haciéndose cargo de esas palabras y al ver a los otros desconocidos saludar algunos se sorprendieron.

- Hay más gente de lo que pensaba que lee la sección cultural de los periódicos - dijo Laura riendo - Gracias a todos por venir y Héctor también por la reseña - sonrió nuevamente mirando para el chico - Aunque debería presentaros...a los que no se conocen...Este señor es Erick Pérez, mi director de tesis aunque también lo considero como un amigo - dijo Laura con sinceridad después de la ayuda del catedrático aquella semana.

Erick asintió con al cabeza algo vergonzoso, no esperaba que lo presentaran de esa manera ante tanta gente él había ido a ver a Laura, no se esperaba aquello. Inmediatamente saludo a algunos de los presentes con algún "encantado" o un "Mucho gusto" entonces vio a Mauricio - Ah tu eres..-

“putain de merde...buff” Laura vio lo que iba a suceder y se apresuró a hablar - El es Mauricio Altamira, profesor del conservatorio, lo habrás visto el otro día con lo de esos fanáticos, él fue quien me quitó de encima al loco que me quería atacar -
dijo intentando parecer natural aunque mantuvo su mirada clavada un segundo en el catedrático. Laura estaba abochornada interiormente por lo que estaba haciendo...por tener que meter a Erick en aquel juego... Héctor y Antía también se estarían enterando de la situación...pero no podía permitir por Mauricio que Jóse y Ana supieran nada.

Héctor se quedó sorprendido "con que Mauricio era su profesor, se puede meter en un buen lio". El periodista se dirigió a Laura quería presentarle al crítico musical que había venido a verla.

-Hola Laura te quiero presentar a Cristóbal, supongo que lo conocerás es un importante crítico musical- le dijo mientras señalaba a Cristóbal.

- Pues no tengo el gusto. La verdad es que desde que estoy aquí no he tenido tiempo para nada, así que ando un poco desconectada de todo- dijo la chica justificándose - encantada - dijo sonriendo y adelantándose para dar dos besos a Cristóbal.




-No el placer es mío, has estado fabulosa, como le he dicho antes a Héctor pareces la nueva Françoise Hardy. Estuviste genial con la canción "Peces de Ciudad"...-

Mientras Héctor se dirigió a Mauricio -¿qué tal Mauricio? vaya concierto que se marcó tu novia eh-

-Y dale con eso de novia, mira que eres terco - dijo Mauricio negando y luego rió un poco - en lindos problemas me metería si me pusiera a salir con una alumna-
volvió a reír, Mauricio era un gran mentiroso cuando se lo proponía

Cuando Antia se dio cuenta de lo que pasaba, con gran disimulo dio un fuerte pellizco a Héctor para que cerrara un poco su bocaza.

-Eeeh iiiaaah pero Ant...- Héctor se quedó mudo al ver la mirada que le echaba su novia, estaba metiendo aún más la pata “será mejor que arregle esto” -Es que haceis tan buena pareja que deberíais ser novios chico- Héctor se quedó más tranquilo cría haber arreglado el desaguisado.

Laura se quedó petrificada por un instante al escuchar a Héctor abriendo su "bocaza"... "putain...putain". No sabía que decir cuando escuchó a Mauricio hablando. y luego la contestación de Héctor "arreglando" lo que había hecho. Laura se rió...con el nerviosismo le salió muy natural - Eres un empeñado, Héctor. Vale que quedara bien la canción que Mauricio accedió a cantar conmigo el otro día...pero de ahí a lo que dices hay un trecho... Tienes cada salida - dijo riendo nuevamente.

Ana miró a Mauricio y luego a Laura, algo ¿confundida? - ¿Cómo es eso de que tocaron juntos? No nos habías dicho nada... ¿no se habían encontrado aquí de casualidad? -

Laura miró a Ana - Ya te dije que Mauricio es amigo de Enrique, el dueño del local. No es el primer viernes en el que coincidimos e igual que hoy le dije a Jóse que me acompañara se lo sugerí a Mauricio que tuvo a bien acceder a mi petición - dijo Laura mirando para su novio en aquel momento para luego volver a dirigirse a Ana - Y que sepas que tu no te libras la próxima vez...ya puedes traer el violín. - dijo Laura sonriendo esperando que aquella respuesta satisficiera las dudas de Ana.

Cristóbal cogió a Héctor del brazo y le dijo al oído -Te das cuenta, vengo aquí a verla y ni siquiera me dedica un minuto. Algo así me ocurrió en España con otra cantautora, deben ser todos iguales-


-Ah claro y tu mejor nos ocultas todo no, so babas-
dijo Ana - está bien la próxima prometo subir a tocar, pero no me vas a hacer eso de subir sin antes saber nada- Jóse la miro y dijo -Ah no, si yo he subido sin saber, tu también, lo justo es justo-

Héctor le susurró unas palabras a la historiadora. Laura escuchó lo que le decía... no quería faltarle al crítico...también quería hablar con Erick que se había molestado en venir a verla - Si me disculpáis todos - dijo Laura - Luego hablamos -dijo mirando primero para Erick y luego para sus amigos. Esperaba que entendiesen lo que estaba pasando. La chica se acercó a Cristóbal que se había situada a una pequeña distancia del resto del grupo. - Siento haber tardado un poco -dijo - Este Héctor... - dijo Laura negando - Bien ¿qué te ha parecido?-

-Ah no te preocupes- dijo mientras se recolocaba sus gafas de pasta. [color=yellow][b] -Pues como ya te he dicho- dijo recalcando estas palabras -me pareces la nueva Françoise Hardy, aunque claro a lo mejor no conoces a esa fabulosa francesa-

Laura sonrió abiertamente - La grande Françoise Hardy - dijo en su perfecto francés nativo - Buff es más que un cumplido...es demasiado...-

A Cristóbal le sorprendió agradablemente que conociese a Hardy -Pues si me gustaste muchísimo, es más me gustaría hacerte unas fotos, dentro de poco voy a sacar un artículo sobre varios grupos mexicanos y te pienso incluir a ti, si no te importa me gustaría sacarte algunas fotos para el artículo-

Laura sonrió sorprendida - Pues muchas gracias. Sí claro, no hay ningún problema. ¿Ahora? - Laura no estaba muy acostumbrada a que la prensa tratara con ella por asuntos de música...Casi todos los contactos que había tenido con aquel mundo se habían debido a sus estudios... como premio extraordinario de bachillerato, de fin de carrera y luego aquello de la investigación de la clave. Sólo hecho una vez una entrevista sobre sus conciertos cuando la voz de Galicia hablara de los diferentes pub compostelanos y tratara el Medulio.

-Ok muy bien- Cristóbal sacó su cámara de fotos –A ver ponte ahí- Laura puso su cara más sonriente para la foto. Cristóbal sacó la foto cegando a Laura con el flash.



_______
Héctor y Antía se dirigieron junto a Erik -Buenas noches soy Héctor y ella es Antía, queríamos hablar con usted por el tema de la investigación de Laura y toda esa controversia con el Vaticano-

-Ah mucho gusto- dijo saludando primero a Antia y luego a Héctor con un apretón de manos a ambos [color=violet][b] - así que usted es Augusto Cartago - dijo con cierto tono jocoso aunque no parecía que se burlara de Héctor.

-Así es, ese es mi pseudónimo. ¿Porqué cree que el Vaticano está tan ansioso por parar esta investigación?-

Erick rió un poco -Bueno ¿no quieren sentarse a tomar algo para hablar mas tranquilos?- dijo invitándolos a la mesa detrás de él, donde había estado sentado.

-Si por supuesto- Héctor se quedó sorprendido ante la amabilidad del catedrático, no se esperaba esa colaboración.

Antia agradeció también y tras tomar asiento dijo - Leí algunos artículos suyos que publicó en revistas de la comunidad científica. Tengo que admitir que no soy una entendida en el tema y que muchas cosas se me escaparon, pero hubo algunas opiniones y comentarios que me resultaron muy interesantes.-

-Se lo agradezco- dijo el catedrático - usualmente trato de escribir de manera accesible para todos, pero para los artículos científicos uno debe tener cierto grado de instrucción en la materia pues sino se vuelven muy pesados.-

-Si, de eso me di cuenta, tengo su ultimo libro, tengo que leerlo, aun no he podido hacerme un tiempo para ello- dijo Antía y Erick contesto – Posiblemente sea una lectura mucho mas amena que esos artículos, no puedo garantizar que placentera, pero si amena - dijo y volvió a reír

Héctor aprovechó el camino allanado por Antía -Si, es cierto, tiene una obra prolífica. Pero con su última investigación junto a Laura trae cola, ya que el Vaticano por lo visto está empeñado en pararle los pies-

__________________
.*1 Festival Internacional de Benicasim... el festival de música independiente (indie) por antonomasia en España
Volver arriba Ir abajo
Contenido patrocinado





El amanecer Empty
MensajeTema: Re: El amanecer   El amanecer Icon_minitime

Volver arriba Ir abajo
 
El amanecer
Volver arriba 
Página 1 de 5.Ir a la página : 1, 2, 3, 4, 5  Siguiente

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Astro rojo :: Crónicas y partidas online :: Mutatio-
Cambiar a: